Reyes, magia de Highbury y h¨¦roe blanco: ¡°Estaba hecho para el Madrid¡±
Al que fuera jugador del Madrid y Arsenal ¡°le ayud¨® su paso por la Premier. Adem¨¢s, hac¨ªa reir a un vestuario lleno de gal¨¢cticos¡±, asegura Miguel Torres en AS.
La eliminatoria de Champions League entre Real Madrid y Arsenal no solo mide estilos y plantillas, tambi¨¦n memorias. Entre tantos nombres ilustres que vistieron ambas camisetas, hay uno que brilla con una luz distinta: la de la nostalgia. Jos¨¦ Antonio Reyes, el chico de Utrera que desbord¨® en Highbury, ser¨¢ este martes el recuerdo compartido de dos aficiones, la blanca y la gunner, que lo vieron bailar con la pelota y dejar una estela de talento dif¨ªcil de olvidar. En Londres form¨® parte de la gloriosa generaci¨®n del 2004 que gan¨® la Premier sin perder un solo partido. En Madrid fue el h¨¦roe de la Liga de 2007.
El futbolista nacido en Utrera (Sevilla) creci¨® en un entorno humilde. Desde muy peque?o, los que lo vieron jugar en las calles sab¨ªan que ten¨ªa algo distinto. Su padre fue su primer referente y apoyo. Su hijo brilla ahora en La F¨¢brica. Reyes debut¨® con el primer equipo hispalense en el 2000, con apenas 16 a?os, y se convirti¨® en el jugador m¨¢s joven en vestir la camiseta sevillista en un partido oficial. En sus primeros a?os se curti¨® en Segunda Divisi¨®n, en un Sevilla que intentaba volver a la ¨¦lite. Miguel Torres, compa?ero del extremo en el Real Madrid, atiende a AS para hablar sobre la figura del futbolista. Para el que fuera defensa blanco, aquellos inicios en Sevilla le convirtieron un jugador ¡°dif¨ªcil de encontrar hoy en d¨ªa¡±.
¡°Pienso en las nuevas generaciones que no le han visto jugar y les invitar¨ªa a que se pusieran alg¨²n v¨ªdeo. Fue un jugador con un estilo que actualmente es dif¨ªcil de encontrar, porque naci¨® con un talento muy alto a nivel de recursos futbol¨ªsticos que se encuentran en la calle, cuando de peque?o no tienes las condiciones aptas para disfrutar del f¨²tbol, que te tienes que adaptar a un parque o a jugar en tierra. Creo que todos esos elementos le sirvieron para ser un futbolista diferencial, capaz de llevar la pelota pegada al pie, desequilibrante, r¨¢pido y con un gran golpeo. Reyes ten¨ªa un tren inferior muy fuerte, era muy competitivo, pero tambi¨¦n muy alegre porque disfrutaba mucho de la profesi¨®n¡±.
Este ¨²ltimo aspecto, el de la alegr¨ªa que contagiaba en cada vestuario que pis¨® en su carrera, es un denominador com¨²n en todos los testimonios recogidos sobre el exdelantero. ¡°Creo que cuando un jugador llega a la ¨¦lite, la exigencia te lleva muchas veces a no disfrutar de la profesi¨®n y ¨¦l demostr¨® constantemente que jugaba al f¨²tbol porque le gustaba, porque le divert¨ªa y porque le hac¨ªa feliz. Y tambi¨¦n nos hac¨ªa felices a los dem¨¢s, con sus bromas y chistes, era un jugador sin maldad, sin envidias, de los que cualquier entrenador quiere en su equipo¡±, asegura Miguel Torres.
De Utrera a Londres
Durante sus dos ¨²ltimas temporadas en el Sevilla, el f¨²tbol de Jos¨¦ Antonio Reyes alcanz¨® tal nivel que varios gigantes europeos comenzaron a seguir sus pasos. El Arsenal fue el m¨¢s decidido. Arsene Wenger, siempre atento al talento joven, se enamor¨® de aquel extremo el¨¦ctrico, y en enero de 2004, Reyes hizo las maletas para cambiar el sol de Andaluc¨ªa por el invierno de Londres. As¨ª, el utrerano, aterriz¨® en un vestuario de estrellas: Thierry Henry, Dennis Bergkamp, Sol Campbell, Jens Lehmann, Patrick Vieira, Ashley Cole... nombres may¨²sculos que daban forma a uno de los mejores equipos que ha visto la Premier League.
Su carta de presentaci¨®n fue tan explosiva como ¨¦l: en un partido de FA Cup frente al Chelsea, marc¨® dos goles, uno de ellos un misil desde fuera del ¨¢rea. Highbury rugi¨®, y Reyes empez¨® a meterse en el coraz¨®n de la afici¨®n. As¨ª, su velocidad y descaro le dieron un hueco en el once de Wenger y lo convirtieron en parte de ¡¯los Invencibles¡¯, el legendario Arsenal que gan¨® la Premier League 2003-04 sin perder un solo partido.
En Londres se convirti¨® en un ¨ªdolo tanto para aficionados como para las siguientes generaciones. As¨ª, Dani Ceballos reconoci¨® en el canal de televisi¨®n del conjunto ¡®gunner¡¯ que ¡°siempre he seguido al Arsenal por Jos¨¦ Antonio Reyes, es mi ¨ªdolo de la infancia¡±.
Su deseo de volver a Espa?a
En medio de esa distancia emocional, Cesc F¨¢bregas, compa?ero suyo durante toda su etapa en el Arsenal, fue uno de los que m¨¢s cerca estuvo de ¨¦l. Reyes, que se asent¨® junto a su familia en la capital inglesa, acogi¨® al centrocampista en su primera temporada en el equipo gunner. ¡°Nunca olvidar¨¦ cuando t¨² y tu familia me acogisteis en vuestra casa en mis primeras navidades en Inglaterra cuando yo estaba solo y ten¨ªa 16 a?os¡±, recordar¨ªa a?os m¨¢s tarde el exmediocampista catal¨¢n cuando el futbolista falleci¨®.
Lo cierto es que el jugador y su familia, a pesar de ¡°disfrutar de aquella etapa¡±, no acabaron de adaptarse culturalmente a la vida londinense. As¨ª, Reyes expres¨® su deseo de volver a Espa?a despu¨¦s de tres a?os de ¨¦xito en el Arsenal. En el documental Reyes, sonrisa y leyenda, F¨¢bregas se?ala un momento clave para ese clic en la cabeza del delantero: la final de Champions de 2006 ante el Bar?a, en la que fue suplente. ¡°Su cabeza se pierde un poco y empieza a decir que se quiere ir a Espa?a y volver all¨ª¡±, explic¨®. Con todo, Reyes manten¨ªa siempre una actitud positiva en el vestuario, seg¨²n Cesc: ¡°No se le notaba que estuviera mal por su car¨¢cter, no pon¨ªa malas caras y era positivo¡±.
En dicho documental, el actual entrenador del Como revela un curioso momento en el que le ejerci¨® de traductor para ayudarlo en su salida hacia el Real Madrid. Todo ocurri¨® en una previa de Champions, en agosto de 2006, en Croacia. ¡°Est¨¢bamos a punto de jugar ante el Dinamo Zagreb. ?l ten¨ªa que ser titular y me dice: ¡¯Cesc, ven un momento, que tenemos que hablar con el m¨ªster. Me tienes que traducir, me tienes que ayudar a hablar con ¨¦l¡®. Me meti¨® en medio. ¡®Jos¨¦ Antonio no quiere jugar y se quiere ir al Real Madrid. Ha tomado su decisi¨®n¡¯. Arsene Wenger se gir¨®, se fue y no lo puso de titular. Ese d¨ªa marqu¨¦ un doblete y se lo dediqu¨¦¡±, rememor¨® el futbolista espa?ol.
Cuando Reyes lleg¨® al Madrid era un jugador m¨¢s f¨ªsico, le ayud¨® mucho su paso por el Arsenal
Miguel Torres, compa?ero de Jos¨¦ Antonio Reyes en el Real Madrid.
Miguel Torres, que lleg¨® al primer equipo blanco la misma temporada que Reyes aterriz¨® en la capital espa?ola, asegura que, ¡°¨¦l valoraba mucho aquella etapa en el Arsenal. Era un grupo muy representativo, con jugadores espa?oles importantes y con un entrenador que apost¨® por el talento joven. Estar all¨ª le ayud¨® mucho a entender la importancia de estar bien f¨ªsicamente en un f¨²tbol tan diferente como la Premier. Cuando lleg¨® a nuestro equipo era un jugador m¨¢s completo, no solo era talento puro, sino mucho m¨¢s f¨ªsico, con un tren inferior potente, ya que ven¨ªa de un club con un entrenador muy exigente¡±.
Un testimonio que refleja que Reyes no solo se gan¨® el respeto de la afici¨®n en Londres, formando parte de momentos hist¨®ricos y conquistando la Premier, FA Cup y una Community Shield, tambi¨¦n madur¨® y se consolid¨® como futbolista.
La alegr¨ªa de un vestuario gal¨¢ctico
Cuando el ariete lleg¨® al Real Madrid en el verano de 2006 se encontr¨® con un vestuario repleto de nombres ilustres como Ra¨²l, Van Nistelrooy o Beckham, una plantilla exigente y un ambiente cargado de presi¨®n constante. Sin embargo, en medio de esa vor¨¢gine de expectativas y competencia, Reyes se convirti¨®, para muchos, en una bocanada de aire fresco. As¨ª lo recuerda Miguel Torres, quien esa misma temporada dio el salto desde el filial al primer equipo.
Reyes era uno de los que m¨¢s calidad ten¨ªa, se preocup¨® mucho por m¨ª desde el primer momento
Miguel Torres, compa?ero de Jos¨¦ Antonio Reyes en el Real Madrid.
¡°Desde el primer momento se preocup¨® mucho por m¨ª, por ayudarme¡±, recuerda Torres. ¡°Cuando llegabas al vestuario, siempre estaba alegre, era imposible llevarse mal con ¨¦l. Te hac¨ªa bromas, chistes¡ Tuvimos muy buena relaci¨®n desde el primer momento, tanto con Reyes, como con el grupo de espa?oles, con Sergio Ramos, Ra¨²l o Casillas. Me acuerdo en los rondos, que era un jugador muy divertido y nos re¨ªamos much¨ªsimo. Adem¨¢s, era uno de los que m¨¢s calidad ten¨ªa en el equipo, con much¨ªsimos recursos, un estilo muy pillo, muy callejero, que hoy en d¨ªa en el f¨²tbol actual se est¨¢ perdiendo¡±.
Una personalidad que parec¨ªa estar en extinci¨®n en un vestuario donde todo era rigurosidad y responsabilidad. ¡°Para un vestuario como el del Real Madrid, donde hay mucha exigencia y todo el mundo est¨¢ muy concentrado, encontrarte con un compa?ero que suma a nivel grupal y que ayuda a que el jugador disfrute m¨¢s de su profesi¨®n es una herramienta que cualquier entrenador quisiera tener en su equipo¡±, reflexiona Torres.
El que fuera central del Madrid destaca tambi¨¦n el papel de su entorno: ¡°Su familia ven¨ªa mucho a los entrenamientos, son gente muy llana, muy normal, muy natural¡ Cuando veo que su hijo est¨¢ progresando en las categor¨ªas inferiores me acuerdo mucho de su padre¡±.
Van Nistelrooy me pregunt¨® ¡®?c¨®mo puede ser que a ti te entienda y a Reyes no, si sois los dos espa?oles?¡®, ten¨ªa una forma de hablar muy divertida
Miguel Torres, compa?ero de Jos¨¦ Antonio Reyes en el Real Madrid
Y si Reyes era memorable, tambi¨¦n lo era su forma de hablar. En uno de los episodios m¨¢s simp¨¢ticos que recuerda Torres, el protagonista fue Ruud van Nistelrooy. ¡°Me vino un d¨ªa y me dijo: ¡®Miguel, ?c¨®mo puede ser que a ti te entienda perfectamente cuando hablas espa?ol y a Reyes no lo entienda, si sois todos espa?oles?¡®. Y yo le contest¨¦: ¡¯Tranquilo, Ruud, que yo tampoco le entiendo a veces¡®¡±, cuenta entre risas. ¡°Ten¨ªa un acento andaluz bastante cerrado, y dentro de su espontaneidad, ten¨ªa una forma de hablar muy divertida, le hac¨ªa chistes a todos. Entonces los extranjeros era dif¨ªcil que le entendieran. M¨¢s all¨¢ de que hab¨ªa estado en Inglaterra alg¨²n tiempo¡ tampoco hab¨ªa aprendido mucho ingl¨¦s¡±, bromea.
El gol que vali¨® un t¨ªtulo
Aquella plantilla, dirigida por Fabio Capello, luchaba por reconquistar una Liga que parec¨ªa perdida. Reyes, aunque no lleg¨® a ser titular indiscutible, fue decisivo en el tramo final y especialmente en el ¨²ltimo partido ante el Mallorca, que los blancos necesitaban ganar para asegurarse el campeonato. En aquel encuentro, Reyes se puso la capa de superh¨¦roe, anotando un doblete que dio el t¨ªtulo a su equipo.
¡°Fue una temporada muy complicada en la que pasamos por diferentes momentos y vimos la dificultad que ten¨ªamos para conseguir el t¨ªtulo, que al final era la exigencia m¨ªnimo del equipo. Pero poco a poco, fuimos creando un muy buen ambiente de trabajo y confiando en nosotros, con ayuda de nuestra afici¨®n. En ese ¨²ltimo partido ante el Mallorca, Reyes demostr¨® que era un jugador hecho para jugar en el Real Madrid, que ten¨ªa la personalidad suficiente como para en esos momentos pedir la pelota, enfrentarse al rival y sobre todo demostrar el buen golpeo que ten¨ªa por la izquierda¡±.
Todos hubi¨¦semos elegido que Reyes marcase ese gol, era muy querido porque no ten¨ªa envidias y siempre intentaba sumar.
Miguel Torres, compa?ero de Jos¨¦ Antonio Reyes en el Real Madrid.
Aquel primer gol, que lleg¨® al minuto 68 del encuentro (el segundo lleg¨® en el 83), fue una obra de arte. Un disparo con la pierna izquierda que se col¨® en el ¨¢ngulo superior del arco rival, imposible para el portero. ¡°Si nos hubieran preguntado antes del partido qu¨¦ jugador hubi¨¦semos preferido para poder meter ese gol, la gran mayor¨ªa hubi¨¦semos dicho Jos¨¦ Antonio Reyes¡±, afirma Torres. La raz¨®n la tiene clara: ¡°Porque era un jugador muy querido en el vestuario, porque se lo merec¨ªa y porque despertaba alegr¨ªa. Para nada era un compa?ero que tuviera envidia por cualquier otro, intentaba siempre sumar. Creo que la manera en la que le valor¨¢bamos en ese momento era muy alta¡±.
Tras aquella temporada, el utrerano pas¨® por Atl¨¦tico, donde gan¨® dos Europa League y estuvo una campa?a en el Benfica. En 2011 regres¨® al Sevilla, donde vivi¨® su segunda juventud y se consagr¨® como una leyenda del club, levantando tres Europa League.
Su tr¨¢gica muerte en 2019, a los 35 a?os, arrebat¨® al f¨²tbol a un jugador que, con su estilo impredecible y su sonrisa contagiosa, ¡°se dejaba el alma en cada partido¡±. Mientras el Arsenal y el Real Madrid luchan por meterse en semifinales de Champions, Reyes sigue siendo el v¨ªnculo invisible que une a dos grandes, el recuerdo de un talento que trascendi¨® fronteras.
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