Nacho gana la batalla
Ancelotti ha exprimido a Militao tras la lesi¨®n, con cinco titularidades consecutivas, pero sigue lejos de su techo de forma. El capit¨¢n decanta la balanza para Wembley.
A Militao se le indigest¨® Sorloth y se difumina Wembley. Ancelotti ha tratado de recuperar al ¡°mejor central del mundo¡±, en sus propias palabras antes de la rotura. Un plan milim¨¦trico con un ¨²nico objetivo, llegar a tiempo a Londres. Primero, minutos anecd¨®ticos ante Athletic y Mallorca. Despu¨¦s, los diez finales en el ejercicio de resiliencia del Etihad y los ¨²ltimos 16¡ä del Cl¨¢sico. A partir de ah¨ª comenzaron los ex¨¢menes. Ante el Bayern, agua en la ida y al campo en el 89¡ä en la vuelta. La verdadera probeta, la Liga. Cinco titularidades consecutivas, pero La Cer¨¢mica marchit¨® los brotes verdes. Y ah¨ª, desde el banquillo, Nacho gan¨® la batalla por Londres.
Fue la primera gran rev¨¢lida para ?der. Enfrente, el aspirante a pichichi. ?Resultado? P¨®ker. No estuvo atinado en lo a¨¦reo ni en lo terrestre. Tampoco en la anticipaci¨®n ni en las coberturas. Apenas gan¨® dos duelos a¨¦reos (de seis), no se impuso en las tres entradas que intent¨® y con el bal¨®n estuvo dubitativo (s¨®lo Joselu present¨® peor porcentaje de acierto en el pase). Am¨¦n de salir en la foto de los cuatro tantos. Ancelotti, tras los ocho minutos de combusti¨®n del groguet (entre el 48¡ä y el 56¡ä enjaul¨® tres), dio entrada a Nacho. Tras el partido le quit¨® hierro: ¡°Han sufrido los dos centrales. Militao se est¨¢ acercando al 100%. Tenemos dos semanas, puede llegar a tope a la final¡±. Carletto lo ha intentado, alternando la pareja del brasile?o. En ocasiones, R¨¹diger. En otras, Nacho. Pero a la hora de la verdad, la balanza se ha desnivelado en favor del canterano.
Los n¨²meros globales de ?der en sus 479 minutos totales no palidecen en la comparativa con sus compa?eros. Les supera, en una muestra menor, en duelos defensivos (4,5 por cada 90¡ä), recuperaciones (8,7), despejes (3,4), entradas (0,3) o pases largos (5,1). Sin embargo, la muestra, hasta el Villarreal, hab¨ªa sido amable. La exigencia hab¨ªa sido menor. Tres victorias a favor de corriente (C¨¢diz, Alav¨¦s y Granada) y una m¨¢s ajustada ante una Real Sociedad que no le apret¨® en el cuerpeo. Y en l¨ªneas generales ha sufrido en una de sus grandes especialidades, el juego a¨¦reo (s¨®lo se ha impuesto en el 45,4%). Para m¨¢s inri, en Wembley espera F¨¹llkrug, un p¨¢nzer. Por ello, tras ser superado por otro, Sorloth, Nacho apunta a ser el acompa?ante de R¨¹diger.
El alcala¨ªno brill¨® en el Etihad y super¨® con nota elevada la eliminatoria ante el Bayern. En la ida, Ancelotti le sustituy¨® de manera prematura, buscando el vuelo de Camavinga en el centro y el poder¨ªo a¨¦reo de Tchouameni en la zaga, pero en la vuelta sent¨® c¨¢tedra y el Bernab¨¦u pidi¨® a coro su continuidad. Durante la temporada tuvo momentos pantanosos, como sus expulsiones ante Girona y Alav¨¦s, pero es un tramo ya superado. Nacho llega al tramo decisivo en forma, con confianza y la ilusi¨®n de alzar su primera Orejona como capit¨¢n. Si la final de Champions es o no su ¨²ltimo baile s¨®lo lo sabe ¨¦l, pues el club coloca en su tejado la pelota de la renovaci¨®n. Si lo es, se despedir¨¢ con el brazalete, como titular en una final de Champions....
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