?xtasis en N¨¢poles

La maldici¨®n de Klopp en N¨¢poles suma y sigue. El alem¨¢n encaden¨® su cuarta derrota consecutiva en el Maradona, la m¨¢s dolorosa y humillante. Los de Spalletti le dieron un baile inolvidable al Liverpool, y el 4-1 es un marcador hasta ajustado por lo que se vio en el c¨¦sped. Superar con jugadas directas la zaga de los ingleses fue demasiado f¨¢cil para los sure?os, que le mandaron un mensaje muy claro a Italia y Europa: a pesar de los adioses de este verano, siguen muy vivos.

En Fuorigrotta estuvo claro desde la tarde que se avecinaba una noche especial. En el campo reaparecieron los ¨ªdolos Lavezzi, que ahora es comentarista para Amazon, y Mertens, que hizo una escapada para regresar a la que ya considera su casa. Ambos fueron ovacionados, pero Osimhen tard¨® un minuto en robar todas las miradas. La rapidez del nigeriano, ante la l¨ªnea agresiva de los Reds, era un arma demasiado potente para no arriesgarlo desde el primer minuto a pesar de alguna molestia muscular. El punta, nada m¨¢s comenzar, recibi¨® un pase vertical de Di Lorenzo, se deshizo de Alisson y remat¨® al poste ante la porter¨ªa vac¨ªa, pero teniendo poco ¨¢ngulo.

All¨ª comenz¨® el recital de los azzurri, que vivieron una de las mejores primeras partes de toda su historia. Cuatro minutos despu¨¦s, Kvara se present¨® a Europa con una de sus llegadas imparables y centr¨® para Zielinski, cuyo remate fue parado por Milner con la mano. Un penalti claro que el polaco materializ¨® sin apuros. El arre¨®n continu¨® sin pausas y Osimhen, durante la en¨¦sima jugada vertical, fue derribado por Van Dijk. El VAR ayud¨® a Del Cerro Grande para conceder la pena m¨¢xima, pero Alisson esta vez supo detener el lanzamiento, que el nigeriano quiso para ¨¦l.

Tras otra oportunidad construida por la pareja terrible Kvara-Osimhen, neutralizada por Van Dijk con una estirada en la l¨ªnea de gol, lleg¨® el merecid¨ªsimo 2-0. Anguissa, autor de una actuaci¨®n monumental, combin¨® en el l¨ªmite del ¨¢rea con Zielinski y gan¨® el mano a mano con Alisson. Antes del descanso hubo el ¨²nico lunar del hist¨®rico partido napolitano. Las molestias musculares volvieron a parar a Osimhen, que tuvo que abandonar el verde en el 41¡ä. Su percance, no obstante, le entreg¨® a Simeone la oportunidad de cerrar su c¨ªrculo. El ¡®Cholito¡¯ lleva tatuado el logotipo de la Champions desde los 14, se estren¨® con 27, y tard¨® tres minutos en empujar entre palos un centro tras una genialidad de Kvaratskhelia, al que G¨®mez no pudo parar pr¨¢cticamente nunca. El Maradona core¨® el nombre del argentino, que rompi¨® a llorar. Inolvidable.

El N¨¢poles complet¨® el p¨®ker en el segundo minuto de la reanudaci¨®n, cuando el propio Simeone atac¨® la profundidad a pase de Anguissa y centr¨® para Zielinski, que golpe¨® a Alisson en su primer intento, y marc¨® el 4-0 con una suave vaselina en el segundo.

All¨ª apareci¨® la ¨²nica se?al de vida del Liverpool a la altura de su nombre, una rosca de Luis D¨ªaz que vali¨® el tanto del honor. Klopp sac¨® del banquillo a Matip, Jota, N¨²?ez y Arthur, pero sus revulsivos no cambiaron el guion de un partido que nunca supieron controlar. El N¨¢poles pudo gestionar su ventaja y hasta le dio descanso en la ¨²ltima media hora a Kvara, sustituido por Zerbin: los partenopei terminaron el partido acompa?ados por los ¡®ole¡¯ de sus tifosi. A Klopp no le qued¨® m¨¢s remedio que felicitar a Spalletti con un abrazo.