El mismo drama, a?o a a?o
Las lesiones vuelven a apuntar a la zaga de Simeone otra temporada m¨¢s, a pesar de los fichajes. Ante el Feyenoord, solo Azpilicueta, Witsel y Hermoso.
Despu¨¦s de casi doce a?os en el banquillo del Atl¨¦tico, a menudo para saber qu¨¦ piensa Simeone basta con verle asomar en las ruedas de prensa. El gesto, el caminar, c¨®mo lleva la boca antes de hablar, si tensa o relajada. C¨®mo se sienta. Como agarra el micr¨®fono en la mesa antes de contestar a las preguntas de los medios. Cuando contesta en monos¨ªlabos o apenas un pu?ado de palabras, malo, algo bulle en su cabeza que frena y preocupa. Ayer fue as¨ª. Ayer el t¨¦cnico argentino resolvi¨® la comparecencia en la previa del Atl¨¦tico-Feyenoord de la 2? jornada de Champions con respuestas cortas y secas, casi enfadadas. Apenas un rato antes se hab¨ªa llevado otro golpe inesperado en ese costado de su pizarra que sangra desde hace a?os: la defensa.
Gim¨¦nez, su mejor defensor, ese uruguayo que cuando juega se hace muro de George R. R. Mart¨ªn, su presencia se nota, un t¨®tem en ambas ¨¢reas, solidez, entrega y juego a¨¦reo por doquier, hasta el aire parece cuadrarse ante ¨¦l. Pero ese jugar no es siempre, ese jugar es cuando su cuerpo le deja. Perseguido por unas lesiones que nunca le dejan en paz. Una fisura en la tibia le baj¨® del avi¨®n de la gira en verano y le hizo ser baja en los primeros partidos del curso. Regres¨® hace cinco, dos titular, antes de volver a parar por un mordisco de los m¨²sculos como una se?al gigantesca de ¡®Stop¡¯. ¡°Edema en el s¨®leo¡±, dec¨ªa el parte m¨¦dico del club rojiblanco un antes de que Simeone se sentara ante los medios para hablar del Atl¨¦tico-Feyenoord. Un partido sin Gim¨¦nez pero tampoco sin Savic, su otro central titular. Una sobrecarga le ape¨® de la convocatoria ante el C¨¢diz. Una sobrecarga que sigue el mi¨¦rcoles. Tampoco estar¨¢ en la 2? jornada de Champions. Esa l¨ªnea defensiva se presenta ante el Cholo como en un maldito ¡®d¨¨j¨¢ vu¡¯ infinito por mucho que este verano lo primero que el club hiciera fuera reforzar esa l¨ªnea. El mismo drama. A?o a a?o.
Cuatro nuevos: S?y¨¹nc¨¹, Azpilicueta, Gal¨¢n y Mouri?o. El ¨²ltimo se fue cedido al Zaragoza. Quedaron tres para hacer siete (ellos m¨¢s Reinildo, Hermoso, Savic, Gim¨¦nez y un Witsel que es el pulpo del anuncio del juego del Scattergories de mediados los noventa, el octavo pasajero de la defensa rojiblanco, aunque su lugar natural sea la de pivote). Cuatro est¨¢n lesionados. Lo de Reinildo viene de febrero y es largo, ligamento roto, lo de S?y¨¹nc¨¹, del Virus FIFA, lo de Savic y Gim¨¦nez, de lejos. A Simeone le quedan Gal¨¢n, con el que empieza a contar pero sin hacerlo del todo, y sus fijos: Witsel, Azpilicueta y Hermoso. De los tres solo el ¨²ltimo es central de verdad. Juntos suman 96 a?os.
El doble de minutos de los que juegan con respecto a los de ¡®la enfermer¨ªa¡¯
Witsel, 34. Azpilicueta, ibidem. Hermoso, 28. A los tres deber¨ªan ped¨ªrsele las medidas para ir tall¨¢ndoles en bronce. Aunque haya partidos (Mestalla) en los que se les noten las costuras. Lentos, con errores, pero ah¨ª, en ese lugar que otros observan desde la tele en la enfermer¨ªa. Lentos, con errores, pero ah¨ª, aunque el primero pareciera irse tocado de la 1? jornada de la fase de grupos de la Champions, ante la Lazio, aunque el segundo abandonara el juego ante el C¨¢diz con hielos en los m¨²sculos en el banquillo. Juntos suman 96 a?os. Y tambi¨¦n 1.665 minutos en la temporada (691¡ä de Hermoso, primer jugador de campo m¨¢s usado por el Cholo en lo que va de curso; 569¡ä, de Witsel, tercero; 405¡ä, de Azpilicueta, noveno). Entre los cuatro defensas de la enfermer¨ªa suman la mitad: 818¡ä. El drama. El maldito drama que se suma a otro: que no son los ¨²nicos, que hay tres m¨¢s. Que tambi¨¦n faltan Barrios, Lemar y Memphis. Que cuando Simeone mire atr¨¢s ante el Feyenoord, del primer equipo en su banquillo solo ver¨¢ a cuatro jugadores del primer equipo (Gal¨¢n, Riquelme, Llorente y Correa) entre chavales.