El brote verde es Courtois
Frente al Stuttgart fue el segundo partido en el que m¨¢s tuvo que intervenir desde su regreso: seis paradas. En un Madrid endeble, sigue siendo de acero.
Salvados por Courtois. Otra vez. Parad¨®n, parad¨®n, parad¨®n y parad¨®n. Lo que para cualquier mortal ser¨ªa extraordinario, para ¨¦l es rutina. Sostener al Real Madrid. Frente al Stuttgart fue el segundo partido en el que m¨¢s veces ha tenido que intervenir desde su regreso: siete disparos y seis paradas (el que m¨¢s fue contra el Alav¨¦s, en la jornada 36 de la pasada Liga y cuando hizo... ?10 paradas!). Si anoche el Madrid se hubiese ido 0-2 al descanso, no habr¨ªa sido descabellado. Ni mucho menos. Pero no sucedi¨®, porque ah¨ª estuvo Courtois. Impoluto. Brote verde de un equipo en barbecho futbol¨ªstico.
El Madrid no est¨¢ bien. Yerra al presionar arriba (le esquivan con notable facilidad, pill¨¢ndole al contragolpe) y no est¨¢ s¨®lido atr¨¢s (la sensaci¨®n sigue siendo de torre de naipes; m¨¢s voluminosa que rocosa). No hay un dominio claro, no hay regularidad, no hay consistencia. El equipo sobrevive por oficio y por colmillo. Porque algo tiene en su ADN que le hace ser y estar en los momentos adecuados, sin m¨¢s explicaci¨®n. Y porque incluso en los peores momentos, el colmillo no se oxida. ¡°Nunca tendremos un problema de gol¡±, dijo Ancelotti. Ten¨ªa raz¨®n.
De 2,5 tiros...
Como Bellingham cuando tom¨® la palabra en zona mixta: ¡°Courtois es el mejor portero del mundo y hace paradas imposibles, pero debemos evitar que lleguen tanto¡±. Frente al Stuttgart esta radiograf¨ªa revela un problema y de los gordos. A Thibaut, de media, le estaban disparando 2,5 veces por partido esta temporada (s¨®lo contando disparos entre los tres palos); una cifra que tan s¨®lo se hab¨ªa desviado notablemente en Mallorca, donde le realizaron hasta cinco tiros. Pues lleg¨® la Champions... y nuevo r¨¦cord.
...?A siete!
Courtois vio c¨®mo le realizaban 17 disparos, de los cuales tuvo que intervenir en seis... y uno fue para dentro. Seis paradas, seis milagros. Que en el fondo son siete, porque aquella mano a Undav en la primera parte no cuenta para la estad¨ªstica, al estar invalidada la acci¨®n por fuera de juego. Vol¨® hacia su derecha, se lanz¨® con todo abajo y desvi¨® disparos escorados, pero potentes. Una tras otra. El Madrid, durante tramos alarmantemente largos, estuvo a merced del Stuttgart. Pero en esas, siempre estuvo Courtois. Como tantas noches.
| Rival | Paradas | Disparos |
|---|---|---|
| Stuttgart | 6 | 7 |
| Real Sociedad | 2 | 2 |
| Betis | 2 | 2 |
| Las Palmas | 2 | 3 |
| Valladolid | 2 | 2 |
| Mallorca | 4 | 5 |
| Atalanta | 1 | 1 |
Indiscutible
A nivel de mejor portero del mundo. Dentro del vestuario se apela a ¨¦l como una figura m¨¢s que clave para el equipo. Peso pesado en lo extradeportivo y b¨¢sico en lo deportivo. ¡°Nadie es indiscutible en esta plantilla¡±, dijo Carletto en rueda de prensa. Esta afirmaci¨®n, que viene a ejercer de tir¨®n de orejas al equipo para que nadie caiga en relajaciones, est¨¢ m¨¢s cogida con pinzas, en lo literal. Courtois lo es. Y absolutamente. Un gigante que, pese a no optar al Yashin (lesionado toda la temporada pasada, no entr¨® en las ecuaciones), firma un nivel a la altura. Mientras el Madrid est¨¢ mal, ¨¦l est¨¢ bien. Perfectamente. Es el brote verde.