El Brest lanz¨® a Rib¨¦ry... pero dej¨® irse gratis a Le Normand

Hay decisiones en la vida de un club de f¨²tbol que quedan para los restos. Para bien y para mal. El Stade Brestois tiene dos en su historia reciente que ejemplifican aquello de que toda moneda tiene dos caras. El modesto club bret¨®n fue la lanzadera de Franck Rib¨¦ry en Francia y a la vez sufri¨® la miop¨ªa inexplicable de decirle ¡®ah¨ª tienes la puerta¡¯ a Robin Le Normand, y adem¨¢s gratis, para m¨¢s oprobio.

Muchos en Brest recuerdan la irrupci¨®n de Rib¨¦ry, en febrero de 2004. Dentro de su grave crisis como entidad, el Stade Brestois penaba por categor¨ªa Nacional, la tercera divisi¨®n del f¨²tbol galo. La alegr¨ªa fue meterse en octavos de Copa, contra un equipo potente como el Nantes. Y m¨¢s cuando vieron como un rel¨¢mpago a un chaval diminuto, de apenas 21 a?os y con una enorme cicatriz (a¨²n desconocida para el mundo del f¨²tbol) por culpa de un accidente de tr¨¢fico atraves¨¢ndole la cara. El Brest fue vapuleado (4-0) pero las libretas de los ojeadores franceses echaron humo. Aquel desconocido, Rib¨¦ry, hab¨ªa mareado a medio Nantes. Los agentes del muchacho no perdieron el tiempo, comenzaron a mover la cinta de v¨ªdeo de aquel partido entre los clubes de la Ligue1 y llegado el verano, el que puso m¨¢s carne en el asador para incorporarlo fue el Metz.

Lo que hace aquel partido de Rib¨¦ry con el Stade Brestois m¨¢s relevante es que apenas unos meses antes de que aquella revelaci¨®n en Nantes, Franck estaba hundido, en casa tras una mala experiencia en el Al¨¨s, y meditando dejar el f¨²tbol. Todo cambi¨®. El Brest fue lo que necesitaba. El resto se cuenta solo: campe¨®n de Europa con el Bayern en la 2012-13, subcampe¨®n del mundo con Francia en 2006, tercero en el Bal¨®n de Oro de 2013 y, para muchos en Francia, uno de los atacantes m¨¢s vertiginosos de la historia de Les Bleus.

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El caso de Le Normand es dif¨ªcil de entender. Porqque se trata de un canterano de pura cepa del Brest (entr¨® en su academia con 11 a?os), buena planta y uso de ambas piernas, eso le vali¨® para debutar en la 2015-16 con apenas 18 a?os en un Brest en crisis que sufr¨ªa en la Ligue2 francesa. Ni por esas. El club bret¨®n no apost¨® por ¨¦l y ni siquiera le hizo una oferta de renovaci¨®n. Un rev¨¦s que gener¨® una mella enorme en el autoestima del central, al que s¨®lo una llamada inesperada de un scout de la Real Sociedad en Francia, que le ten¨ªa en su libreta, le sac¨® del abismo. Tuvo que hacer una prueba en la Real Sociedad B, el Sanse, y all¨¢ que lleg¨®, gratis.

Imanol le cambi¨® la vida

Tampoco en Zubieta creyeron demasiado en ¨¦l, Le Normand era un futbolista sombr¨ªo en Segunda B y s¨®lo se convirti¨® en el central que hoy conocemos por el convencimiento y la insistencia del entrenador del filial txuri-urdin, que no era otro que Imanol Alguacil. El ascenso de ambos hacia el ¨¦xito (aquella Copa del Rey de 2020) y en el caso del zaguero hispano-franc¨¦s, a la gloria eterna con la pasada Eurocopa, quedar¨¢ como uno de los errores m¨¢s llamativos de un Stade Brestois que nunca ha ido sobrado de dinero ni de talento.

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