El Atl¨¦tico muere con las botas puestas

Al Atl¨¦tico se le comenzaron a escapar los octavos de la Youth League el 13 de diciembre. Una tarde aciaga en Alcal¨¢ se culmin¨® con la derrota ante una Lazio ¨²ltima de grupo mientras el Feyenoord remontaba in extremis su partido para arrebatarle la primera plaza a los rojiblancos. De tener el pase en la mano a enfrentarse al AZ, vigente campe¨®n y un miura que fue imposible de doblegar.

El conjunto neerland¨¦s desat¨® su vendaval nada m¨¢s comenzar. Presi¨®n alta, velocidad, combinaciones... un equipazo que ha cambiado muy poco de aquel que gole¨® en la final al Hajduk Split (5-0), al Real Madrid en cuartos (4-0) y al Barcelona en octavos (0-3). La ruta de campeones est¨¢ hecha para clubes as¨ª. A los seis minutos Smith se plantaba ante Esquivel y golpeaba a la madera. Tres despu¨¦s Kwakman chutaba plano desde la l¨ªnea de centro del campo al larguero. El centrocampista brill¨® con luz propia sobre el c¨¦sped artificial de la ciudad deportiva del AZ.

El resultado se manten¨ªa inamovible, pero al Atl¨¦tico, hoy de azul y blanco, le ca¨ªa un chaparr¨®n. Esquivel salvaba lo que pod¨ªa, deteniendo el remate de Daal tras un fant¨¢stico pase de cuchara de Kwakman, pero tanto fue el c¨¢ntaro a la fuente que Van den Ban no fall¨® tras la jugada de Dijkstra en banda derecha y el toque previo de Kwakman. Un gol que amans¨® a los locales y dio algo de aire al Atl¨¦tico. Tras 25 minutos sometido pudo comenzar a encontrar el bal¨®n y a buscar a El Jebari en banda izquierda, el ¨²nico capaz de desbordar por talento individual. Fernando Torres hab¨ªa situado un equipo muy ofensivo, con El Jebari y Ni?o ya expertos y asentados en el Atleti B junto a Rayane y Jano Monserrate, que se estrenaba en Europa tras llegar en enero.

Pero, sin bal¨®n, ese talento atacante quedaba diluido. Antes del descanso Monserrate y Ni?o se asomaban al ¨¢rea rival y llegaban a probar t¨ªmidamente porter¨ªa. El partido llegaba al entretiempo con el Atl¨¦tico vivo, pero una clara sensaci¨®n de inferioridad. Hab¨ªa 45 minutos para intentar enmendarlo, aunque tendr¨ªa que ser a la heroica. Y m¨¢s tras la nueva salida en tromba de los locales. El Atl¨¦tico resisti¨® los primeros diez minutos con Bo?ar y Spina achicando aguas y volvi¨® a estirarse con Julio D¨ªaz y El Jebari por la izquierda.

Torres cambiaba de esquema, de piezas intentando encontrar una brecha al sistema del AZ. Y, con Omar en punta, Ni?o tuvo su espacio para una fant¨¢stica maniobra con dos recortes y el disparo a la base del palo que oblig¨® a Kuijsten a dejar un parad¨®n para evitar el empate colchonero. ¡°Queda un mundo¡±, gritaba Torres a sus futbolistas. Y el propio Ni?o tuvo el empate en el minuto 87 con un cabezazo, mientras le agarraban en el ¨¢rea, que se march¨® rozando el larguero justo antes de salir sustituido. En el otro ¨¢rea, en el ida y vuelta, Esquivel segu¨ªa sosteniendo el marcador con sus paradas.

Se dej¨® la piel el Atl¨¦tico, acab¨® apretando y embotellando a un AZ candidato a repetir ¨¦xito. Pero no pudo con la fortaleza neerlandesa. No estar¨¢ en octavos por primera vez con Fernando Torres en el banquillo. Una eliminatoria que se comenz¨® a perder en casa contra la Lazio cuando todo parec¨ªa hecho. En Alkmaar, el Atl¨¦tico muri¨® con las botas puestas. Resisti¨® ante un fant¨¢stico equipo. No perdi¨® la cara ante el vigente campe¨®n y lo intent¨® hasta el final. No fue suficiente. Europa no perdona las concesiones. El error en grupos puso una piedra demasiado grande en el camino.