Aprobados y suspensos del Madrid contra el Liverpool: desfibrilador Vinicius
El brasile?o reactiv¨® al Madrid con un doblete cuando el choque era una pesadilla. A favor de obra, Militao y Benzema, con dos tantos, convirtieron un mal sue?o en noche hist¨®rica.
¡°Here we go again¡±, debi¨® pensar un Liverpool que poco antes cantaba ¡°you¡¯ll never walk alone¡±. Su equipo no lo hizo, pues no pararon de animar, pero Vinicius le quit¨® las pilas a los de Klopp con dos apariciones sensacionales. El brasile?o es santo y se?a del Madrid e hizo las veces de desfibrilador. Courtois fall¨® como nunca, pero Alisson le devolvi¨® el favor. Con 2-2, Militao desnivel¨® y, cuesta abajo, el Madrid firm¨® otra noche de Champions hist¨®rica. La afici¨®n ¡®red¡¯ se mir¨® incr¨¦dula cuando, de repente, comprob¨® que Benzema hab¨ªa colocado un sonrojante 2-5 en el marcador. De un mal sue?o a noche hist¨®rica. El Madrid volvi¨® a ser inexplicable. Y esa es su mayor virtud.
Courtois
Desconocido. El Liverpool sali¨® con las garras afiladas, ara?ando la salida de bal¨®n del Madrid y presionando de manera insistente a Courtois, que no tuvo su d¨ªa con el esf¨¦rico en sus pies. Un fallo de Camavinga deriv¨® en una serie de catastr¨®ficas desdichas que termin¨® en un fallo garrafal del meta belga ante Salah, a quien regal¨® el 2-0. En el 1-0 poco pudo hacer al resolver Darwin con enorme calidad de espuela.
Carvajal
No tuvo la exigencia que s¨ª afrontaron en el otro costado, pues Robertson y Darwin no fueron un martillo percutor. No obstante, Carvajal est¨¢ lejos de su mejor nivel en estos momentos. Ofensivamente apenas se descolg¨® y no estuvo demasiado preciso con los env¨ªos en largo. Eso s¨ª, su entrega es innegable y junto a Militao salv¨® un tanto que parec¨ªa cantado con 2-1 en el marcador.
Militao
El mejor de la defensa blanca. M¨¢s all¨¢ de su gol, el primero que marca en la Champions y que sell¨® la remontada en el reinicio, fue la pieza m¨¢s s¨®lida de la retaguardia en los minutos m¨¢s complicados. Darwin se le adelant¨® en el primero, pero fue m¨¢s acierto del charr¨²a que error del madridista. A partir de ah¨ª, firm¨® un encuentro contundente, no permitiendo que Gakpo apareciera demasiado. El broche, el testarazo que dej¨® mudo Anfield. F¨ªsicamente est¨¢ a otro nivel y lo demuestra con suficiencia.
R¨¹diger
Deber¨ªa haber ayudado m¨¢s a Alaba en los primeros minutos, cuando Salah y Trent convirtieron la banda derecha en una pista de baile. Tras el chaparr¨®n mostr¨® una versi¨®n m¨¢s reconocible, pero la del Liverpool tras el arre¨®n inicial fue menor. No particip¨® demasiado en la salida de bal¨®n, entregando esas tareas a Militao.
Alaba
Partido para olvidar de Alaba. La sociedad Alexander-Arnold-Salah fue una pesadilla constante. El austr¨ªaco, si bien no cont¨® con demasiada ayuda de Vinicius o R¨¹diger, fue claramente superado en el cara a cara. A los 27 minutos, en una jugada embarullada, se ech¨® la mano al muslo derecho y Nacho tuvo que entrar en su lugar.
Valverde
En su demarcaci¨®n de nacimiento, Valverde es menos Valverde. Su inclusi¨®n colocaba mayor f¨ªsico al centro del campo en detrimento de Ceballos, pero el Halc¨®n echa de menos el ¨¢rea. Cuando Rodrygo dejaba libre la derecha, Valverde no tardaba en buscar el carril del ¡®8¡ä que tantas alegr¨ªas le ha dado. Prob¨® suerte con un disparo para el que se cuadr¨® perfectamente, pero se march¨® alto por no demasiado. Con la entrada de Ceballos se coloc¨® de ¡®falso extremo¡¯. Enorme esfuerzo. Fue a m¨¢s.
Camavinga
Examen complicad¨ªsimo para Camavinga. Como pivote, donde ¨²ltimamente hab¨ªa instalado el debate con su compatriota Tchouameni. En los instantes iniciales no pudo contener a Bajcetic, Henderson y Fabinho, que manejaron c¨®modamente la sala de m¨¢quinas. Cuando Vinicius activ¨® el modo remontada, Camavinga empez¨® a crecer. Con el encuetro alborotado, Cama se encuentra a s¨ª mismo y su despliegue f¨ªsico brilla. Ocurri¨® en Anfield, donde firm¨® una segunda parte estupenda, demostrando que el traje de titular cada vez le sienta mejor.
Modric
En el 67¡ä, con el partido roto, Modric agarr¨® el bal¨®n en campo propio. El Liverpool trat¨® de pararlo, pero a cada zancada parec¨ªa gritar renovaci¨®n. Termin¨® con gol de Benzema, el que abroch¨® el choque. Luka, como todo el equipo, fue creciendo cuando el encuentro se puso de cara, pero a favor de obra mostr¨® que sigue siendo el mejor b¨¢lsamo del equipo. Se march¨® con aplausos de Anfield.
Rodrygo
?Valverde y Rodrygo? Los dos. Ancelotti dudaba y opt¨® por su once m¨¢s ofensivo, entregando la titularidad al de Osasco. En banda derecha pierde presencia en el ¨¢rea y capacidad asociativa, sus mayores virtudes. Por algo abandon¨® con asiduidad el costado para ocupar posiciones m¨¢s centradas. Su desgaste f¨ªsico fue muy importante, pero no tuvo la incidencia de las noches m¨¢gicas. Su objetivo es dejar de ser el chico para todo y convertirse en chico para siempre.
Benzema
Mr. Champions no hab¨ªa aparecido. A cero en la primera fase, pero en Anfield se desquit¨® por partida doble. En la primera, con la inestimable colaboraci¨®n de Joe Gomez que desvi¨® su remate para desarticular a Alison. En la segunda, aprovech¨® el pase de Vinicius para, con toda la pausa y calma del mundo, driblar y anotar el 2-5. Parec¨ªa llegar entre algodones, pero demostr¨® que siempre es necesario. Aunque la capa de las gestas se la ha robado Vinicius esta temporada, Benzema lleva ya 18 goles. Nada mal para los tambaleos de su temporada... Eso explica el valor del actual Bal¨®n de Oro.
Vinicius
Cuando el Madrid no pod¨ªa, cuando se desmantelaba la Champions, Vinicius camin¨® solo. Klopp le consideraba una leyenda del equipo blanco, en presente, y el brasile?o le dio la raz¨®n. Encarando, incansable, reactiv¨® a un Madrid cadav¨¦rico con una jugada sensacional. De fuera adentro, en solitario, y con el interior, al palo largo, enmarc¨® el 2-1. Quinto gol en la Champions e instantes despu¨¦s llegar¨ªa el sexto. Una presi¨®n llena de fe provoc¨® el fallo de Alison cuando ya ni Vini cre¨ªa, pero el bal¨®n crey¨® que el brasile?o merec¨ªa el bot¨ªn. Tras el refrigerio, m¨¢s. Forz¨® la falta que Militao emboc¨® y se supo l¨ªder, un d¨ªa m¨¢s. Desfibrilador del Madrid.
Tambi¨¦n jugaron
Nacho
Casualidad o no, con Nacho todo cambi¨®. Comenz¨® nervioso, con un error en campo propio que pudo costar un disgusto. Impropio. No repiti¨®. Cl¨ªnic de c¨®mo bailar con la m¨¢s fea, en este caso Salah, a quien se le termin¨® la fiesta que fue para ¨¦l la primera media hora. Incluso se atrevi¨® el canterano con alguna incursi¨®n en campo rival hasta llegar a pisar el ¨¢rea scouser.
Ceballos
Entr¨® en tramo final para dormir el partido. Fue el gran damnificado del once de Ancelotti.
Asensio
Sin tiempo para tener incidencia en el juego, sustituy¨® a Benzema. Hecho que demuestra que Ancelotti piensa en ¨¦l como falso 9.
Kroos
Minutos finales para justificar el viaje expr¨¦s.