?xtasis bilba¨ªno en el derbi

El Athletic devolvi¨® a la Real Sociedad el golpe de la primera vuelta. Los derbis vascos se quedan en casa, guardaditos en el almac¨¦n de cada estadio, sin sonre¨ªr al visitante. Berenguer estren¨® cuenta en este tipo de citas por todo lo alto, fue el autor de dos tantos apoyado en oportunos rebotes. Los leones siguen avanzando con el sue?o de la Champions gracias a su f¨²tbol trepidante. Los de Imanol van perdiendo esencia, fueron muy blandos, se entregaron casi sin oposici¨®n por incapacidad propia y por la ma?a del enemigo para cortocircuitar la maquinaria que genera juego. Ante C¨¢diz, Alav¨¦s e incluso en Copa frente al d¨¦bil M¨¢laga han perdido mucha de esa brillantez que les ha puesto en vanguardia para deleitar a los que les gusta el buen f¨²tbol.

Los de Bilbao mordieron, apretaron con toda su alma y casi siempre salieron victoriosos en las disputas. Est¨¢n en ¨®rbita, van al galope en cada segundo. Hicieron correr como locos hacia atr¨¢s a los vecinos. El pulso de rivalidad vasca por excelencia cit¨® a 51.475 espectadores en una jornada festiva en la ciudad del Guggenheim, m¨¢ximo registro en Liga y a 69 del r¨¦cord absoluto. Con 2-0 y el Athletic abrumando a sus muchachos, Imanol tard¨® una hora en reaccionar, mud¨® las bandas de ataque. Deber¨ªa explicar por qu¨¦ no jug¨® Turrientes si tan necesaria parec¨ªa su exuberancia. Las bajas de Traor¨¦, Kubo y Sadiq se notaron m¨¢s que la de I?aki en los vizca¨ªnos. Ante esta ausencia, otro Williams, el j¨²nior, ha tomado las riendas como l¨ªder. Es que entre eso, el traspaso de Cho y las lesiones de Carlos Fern¨¢ndez, que se cay¨® de la lista antes de empezar por molestias en una rodilla y dej¨® su sitio a Dadie, y un Andr¨¦ Silva que a¨²n est¨¢ renqueante, se qued¨® Imanol con Oyarzabal y Barrene y unos cuantos chavalitos para morder en ataque. Lo ¨²nico positivo para los guipuzcoanos es que supieron defender el coeficiente goleador (3-0 en la ida). El desgaste de la Champions tambi¨¦n lo est¨¢n notando mucho.

Antes de empezar se rindi¨® tributo a Mart¨®n, un excompa?ero de los rojiblancos que ha sufrido una terrible lesi¨®n con el Mirand¨¦s. ¡°Estamos contigo¡±, rezaba una camiseta en la foto inicial. Era el pulso de un equipo en pleno esplendor, el Athletic, contra otro que est¨¢ perdiendo pluma ¨²ltimamente. Los dos trataban de competir con su estilo. En la n¨®mina del derbi ya se sabe que va tanta electricidad que muchas veces hay que saber controlarla para no acabar chamuscado. Valverde e Imanol apostaron por la continuidad, si algo funciona, mejor no tocarlo. Los mismos del Pizju¨¢n en el bando rojiblanco y todos menos Mu?oz, en su lugar entr¨® Tierney, en el txuri-urdin.

El ritmo y la tensi¨®n eran altos, pero el f¨²tbol se qued¨® olvidado en alg¨²n rinc¨®n oculto de la Catedral. Los donostiarras amenazaron con una presi¨®n alta, con l¨ªneas juntas y los de banda metidos por dentro, tratando de que el bal¨®n saliera sucio por las piernas de Galarreta y Vesga, los pilotos en el b¨®lido local. Todos estaban demasiado tensionados, hiperactivos, con la respiraci¨®n agitada, y los que ponen la pausa, es decir los Galarreta, Vesga, Zubimendi o Zakharyan no aparec¨ªan. Luego todo fue cambiando de rumbo. El exjugador del Mallorca es una delicia con y sin bal¨®n, un fichajazo. Si muchos pod¨ªan pensar que sin Remiro el juego no pasar¨ªa tanto por el portero, Marrero imit¨® al cascantino.

El derbi iba a todo meter sin encontrar momentos de lectura sosegada. Y ante ese frenes¨ª, nadie como Nico Williams, que no concibe la vida sin el v¨¦rtigo m¨¢ximo. Sim¨®n sac¨® la pelota r¨¢pidamente para la galopada del hermano de I?aki, que oblig¨® a Odriozola a dispararse para echarle el guante. Fue tal su esfuerzo que se rompi¨® en los isquios. En Copa acab¨® tocado en el gemelo y esta vez se doli¨® m¨¢s arriba. Entr¨® Elustondo en su lugar. Un parte de bajas infinito.

Las chispas pod¨ªan salta por cualquier lado, esas tanganas que echa de menos Imanol. Galarreta se fue al suelo y retuvo una pelota que trataron de golpear Merino y Barrenetxea, aunque dieron alguna patada al mediocampista rojiblanco. Lekue se las tuvo tiesas con Merino. La estrategia era probar a Marrero en su primera titularidad en la Liga, en un derbi vasco nada menos. Tras ese rifirrafe se sac¨® una falta en la que el meta realista sali¨® a por uvas y casi se traga un cabezazo de Vesga.

Segu¨ªa el pulso demasiado revolucionado y ese desm¨¢n conduc¨ªa a la precipitaci¨®n. Los leones perd¨ªan balones con facilidad, a veces por indecisiones. El descontrol era un oc¨¦ano en el que empez¨® a navegar mucho m¨¢s c¨®modo el Athletic. A la media hora, Yuri dobl¨® muy bien a Nico Williams. Oyarzabal persigui¨® al lateral, pero no pudo prolongar su carrera de vigilancia hasta el final. El centro del lateral recorri¨® el ¨¢rea peque?a. Guruzeta merodeaba por esa zona, y le lleg¨® la pelota mansa a Berenguer, que no tuvo m¨¢s que empujarla. La Real acus¨® el golpe. Parec¨ªa un equipo fantasmag¨®rico, con once sombras haciendo la guerra por su cuenta, fuera de sitio. sin verticalidad ni noticias en las cercan¨ªas de Sim¨®n. Un bloque que no ten¨ªa nada que ver con ese que lleva un a?o disfrutando en el juego posicional en la Champions. Le falta chicha para someter a los rivales. Todo lo contrario que los bilba¨ªnos, que sin cocinar un f¨²tbol de estrellas Michelin, sab¨ªan ser m¨¢s profundos y amigarse con la l¨ªnea de fondo. Se jugaba a lo que les gusta: intensidad, ida y vuelta, rock and roll...

El segundo tanto se demor¨® poco, era cuesti¨®n de tiempo. Sancet meti¨® un pase profundo al de siempre, Nico Williams. Se detuvo el tiempo con el bal¨®n en los pies del hermano de I?aki. Tierney desatendi¨® la vigilancia que le demandaba ese instante. Centr¨® el 11 y no pudo reatar Vesga, el cuero se enred¨® entre Guruzeta, de nuevo en la zona de peligro, y Zubeldia. El rechace lo coloc¨® muy bien junto al poste Berenguer, con la zurda. Los leones leyeron muy bien el choque, si no ve¨ªan espacios echaban el freno y met¨ªan la bola en una caja fuerte. Para rematar, otros piques, entre Yuri y Brais M¨¦ndez, por un lado, y luego Le Normand y Unai G¨®mez, que dibujaron un final muy brusco. Imanol no daba cr¨¦dito ante la blandura de su gente en el ¨¢rea. Cambi¨® a los extremos y encontr¨® muy poca reacci¨®n. Solo un remate de Elustondo en el minuto 58, que se fue cerca del poste de Sim¨®n. Su Real estaba totalmente perdida. El derbi les super¨® de cabo a rabo, aunque maquillaron el marcador en el minuto 88 con un tanto que tras disparo en semifallo de Aihen Mu?oz rebot¨® en el pecho de Oyarzabal, en una tarde de billar. El primer tiro entre palos. San Mam¨¦s acab¨® con el vacil¨®n ¡®?Y Remiro qu¨¦?¡¯. El Athletic duerme tercero, a siete puntos de los l¨ªderes. ?Qui¨¦n manda en Euskadi? Respuesta: el que lleva nueve puntos m¨¢s.

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