Algo se ha roto en el Sevilla
Las quejas de Garc¨ªa Pimienta han sentado muy mal al club. Renov¨® dos a?os m¨¢s, pero si una de las partes no quiere, la 26-27 no ser¨¢ efectiva.
Algo se ha roto en el Sevilla entre Xavi Garc¨ªa Pimienta y la Planta Noble. El t¨¦cnico, que ha mantenido siempre un perfil muy discreto a pesar de los evidentes fallos de planificaci¨®n, no pudo m¨¢s y nada m¨¢s concluir el mercado de invierno alz¨® la voz para expresar su decepci¨®n por la no llegada, sobre todo, de un lateral izquierdo. Lo hab¨ªa pedido insistentemente, pero la falta de dinero ha dejado coja una posici¨®n en la que el equipo est¨¢ sufriendo claramente: la mayor¨ªa de los goles siguen llegando por ese perfil.
Tampoco se ha fichado a un mediocentro creativo, algo que ya ven¨ªa echando de menos Garc¨ªa Pimienta desde el verano. As¨ª que el entrenador, aunque luego matizar¨ªa sus palabras, explot¨®. Y en un club donde andan m¨¢s pendientes ¨²ltimamente del qu¨¦ dir¨¢n que de los hechos, las quejas no han sentado nada bien. De momento, a pesar de la goleada ante el Barcelona, el Sevilla se mantiene en la tabla m¨¢s o menos aliviado, pero acudir¨¢ a Valladolid, ante un rival directo, con apenas 17 jugadores del primer equipo (como mucho) y muy mermado en la columna vertebral, con Marcao y Kike Salas como ¨²nicos centrales puros, un d¨¦ficit de centrocampistas y apenas Isaac Romero como delantero.
El presidente Jos¨¦ Mar¨ªa del Nido Carrasco y el director deportivo V¨ªctor Orta ya no est¨¢n tan encantados con su t¨¦cnico. Gaby Ruiz, mano derecha de Orta, desdijo de alguna forma a Pimienta en la previa del duelo del domingo al asegurar que est¨¢n ¡°contentos¡± con los recursos y que hay ¡°que usarlos bien¡±. Si no era un dardo, se parec¨ªa. Pero las quejas de Pimienta resultan m¨¢s que elementales. Las hab¨ªa expresado durante muchos meses de puertas para adentro y lo hizo tambi¨¦n, ante la falta de respuesta, cuando fue preguntado en sala de Prensa. Algo muy normal en el mundo del f¨²tbol.
El Sevilla afronta ahora un tramo fundamental de LaLiga para saber si le espera un final de campa?a tranquilo o incluso ilusionante (Europa sigue relativamente a tiro) o volver¨¢ a las andadas del sufrimiento por no descender a Segunda. Si se mete en zona peligrosa no habr¨ªa que descartar un volantazo en el banquillo. Es algo connatural al f¨²tbol. Tampoco, si la relaci¨®n no se estabiliza, se excluye que eso pueda ocurrir una vez concluida la campa?a.
Sorprendentemente, el club ampli¨® el contrato de Garc¨ªa Pimienta por una campa?a m¨¢s de lo inicialmente pactado, hasta junio de 2027. Pero la realidad no es tan as¨ª. De hecho, esa ¨²ltima temporada que comienza en 2026 puede ser anulada por cualquiera de las dos partes sin coste alguno. Y adem¨¢s, el sueldo del t¨¦cnico, comparado con los ¨²ltimos que han pasado por Nervi¨®n, es nimio. Nada que ver con los alrededor de 20 millones de euros que supusieron los finiquitos de Lopetegui, Sampaoli, Diego Alonso y Mendilibar, especialmente costosos los dos primeros.
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