Una joya entre las ruinas
Despu¨¦s de una primera parte sopor¨ªfera, con gritos de "Rufete vete ya" y silbidos a algunos jugadores, Melamed rescat¨® un punto con sabor a Primera.
El sopor. Si en los partidos de pretemporada la ilusi¨®n camufla el habitual sopor, no hay consuelo posible en los que se juegan cuando todo est¨¢ decidido en el campeonato. En verano el aficionado se agarra a los brotes verdes, pero en primavera y en un club donde todo es tan incierto como en el Espanyol la decadencia cubre todos los rincones. Un ejemplo claro fue la primera parte que perpetraron los de Vicente Moreno ante Osasuna, 45 minutos donde cualquier plan era mejor, todo cubierto por una calma tensa que solo se quebr¨® en el minuto 26 cuando aparecieron los primeros c¨¢nticos de "Rufete vete ya".
La grada despierta. Pero esa quiebra se multiplic¨® en el minuto 42. Aleix Vidal encaden¨® dos errores consecutivos que propiciaron una jugada mortal de Osasuna. Pase de Budimir al espacio y gol de Barja. El equipo navarro lo celebr¨® con entusiasmo, el Espanyol sigui¨® como alma en pena por el c¨¦sped. Silbidos, c¨¢nticos de "Rufete vete ya", "estamos hasta los huevos", "RdT, RdT" y abucheos cada vez que Vidal tocaba el bal¨®n. Pa?uelos blancos para un presente que se ve¨ªa negro como el carb¨®n.
Castigo y redenci¨®n. Un carb¨®n, s¨ªmbolo de castigo, que se acab¨® para el delantero madrile?o en el descanso aunque el t¨¦cnico argumentara las cuestiones t¨¦cnicas de su suplencia. RdT entr¨® entre aplausos junto a Melendo. Osasuna baj¨® sus revoluciones y el Espanyol encontr¨® sus mejores minutos dentro de la t¨®nica pusil¨¢nime del encuentro. Melendo y el pichichi perico mejoraron las prestaciones de Wu Lei y un invisible Morlanes, que junto a Yangel Herrera dinamitaron un mediocampo que fue una autopista para el equipo de Arrasate en los primeros 45 minutos. Es curioso la cantidad de futbolistas que no han sido capaces de ofrecer este curso el rendimiento que se les presupone. Morlanes o Yangel, la punta de un iceberg 'tit¨¢nico'.
Sistemas y jugadores. Tambi¨¦n mejor¨® el Espanyol con el cambio de sistema. El 5-3-2 solo le funcion¨® al t¨¦cnico en el Metropolitano ante un Atl¨¦tico de resaca por su eliminaci¨®n en la Champions, por lo que en la segunda parte decidi¨® regresar a su estado natural, con Cabrera de falso lateral zurdo y Melamed, que entr¨® como el volc¨¢n en erupci¨®n que siempre se espera de ¨¦l, como extremo. Su electricidad descarg¨® el 1-1 y provoc¨® las mejores jugadas de un Espanyol que le recuper¨® el pulso al partido. Hasta algunos aficionados bajaron un momento al bar a por palomitas y la grada empez¨® a aplaudir y a meterse en el partido. Aceptado el tedio, cualquier peque?o gesto era una enormidad, y la segunda parte del equipo perico al menos lo mereci¨®.
Todo es confuso. El punto permite que el Espanyol alcance los 40, una salvaci¨®n firme que ayuda a ahuyentar las teor¨ªas m¨¢s apocal¨ªpticas siempre presentes en el ambiente perico. Pero un punto que demuestra de nuevo, por c¨®mo fue el encuentro, la inconsistencia e irregularidad de un equipo que confunde tanto como sus propios dirigentes con los mensajes y las decisiones. Una semana menos para conocer qu¨¦ deparar¨¢ el futuro.