La llegada del delantero uruguayo, que hizo 21 goles, fue una de las piezas fundamentales para que el Atl¨¦tico se proclamara campe¨®n de Liga.
Pasaba el reloj de las 19:50. Simeone corr¨ªa por la banda de Zorrilla con los brazos en alto, gesto triunfal, mirada al cielo. Felipe, lo mismo, con una bufanda anudada en la cabeza. Saltando. Grito de "campeones, campeones" infinito. Pero, en medio de esa celebraci¨®n entre un oc¨¦ano de asientos violeta, un hombre curtido en mil batallas permanece sentado en la hierba. Solo. Con el tel¨¦fono en la mano y llorando como lloran los futbolistas del Valladolid, que en este partido han certificado su descenso a Segunda. L¨¢grimas distintas, sin embargo, son las de ese hombre. L¨¢grimas felices. L¨¢grimas de liberaci¨®n. L¨¢grimas de consuelo. Se llama Luis Su¨¢rez. Le llaman El Pistolero. Es uruguayo y de sus botas han salido 21 goles que han ayudado a que Simeone alce los brazos triunfal, que Felipe se anude esa bufanda en la cabeza, que sus compa?eros griten eso de "campeones". Esa ser¨¢ para siempre una de las im¨¢genes de la 11? Liga del Atleti. Luis Su¨¢rez llorando como un ni?o mientras habla con su familia del t¨ªtulo logrado en Valladolid.
Le dijeron que estaba acabado. Le llamaron viejo. Le apartaron. Su historia en el Atleti comenz¨® as¨ª, despu¨¦s de eso en el Barcelona, donde en seis temporadas jug¨® 283 partidos, marc¨® 198 goles, dio 97 y se convirti¨® en el tercer m¨¢ximo goleador de su historia. Pero una llamada de Koeman, su entrenador, de apenas 30 segundos aquel verano de 2020 daba por finalizada su historia cul¨¦ de la manera m¨¢s abrupta. Ya no entrenar¨ªa m¨¢s con el primer equipo, deb¨ªa hacerlo solo, en un campo aleda?o, como si fuera un futbolista m¨¢s, uno cualquiera, no historia del club. "No olvido que en la pretemporada me mandaban aparte", reconocer¨ªa el jugador este octubre a TVE. Con aquel dolor viaj¨® a Madrid, despu¨¦s de que el Cholo le llamara.
La posibilidad de su fichaje era, para el t¨¦cnico argentino, la pieza que a su plantilla le faltaba para intentar asaltar eso que ya hab¨ªa logrado en 2014, el t¨ªtulo de Liga abrazado a otro uruguayo en el Camp Nou: Diego God¨ªn. "Cuando sali¨® la opci¨®n me llam¨® el club y yo me re¨ª y les dije: ?Es en serio? Vamos como locos a por ¨¦l", desvelaba despu¨¦s el t¨¦cnico en una entrevista en ESPN Argentina. Las palabras que le dijo a Su¨¢rez fueron: "Mira Luis, nosotros tenemos que ganar y vos queres ganar". Una conjunci¨®n perfecta que nada m¨¢s comenzar la 2020-21 se tocaba sobre la hierba. La historia de Luis Su¨¢rez en el Atl¨¦tico comenzaba como Simeone esperaba: con goles.
"Siempre estar¨¦ agradecido al Atl¨¦tico. Hemos sufrido, tanto mi mujer como mis hijos, el a?o que m¨¢s"
Luis Su¨¢rez
Fueron dos en su estreno, para empezar la temporada con una goleada (6-1), ante el Granada, al que le sigui¨® una primea vuelta de r¨¦cord, con 50 puntos logrados de 57 posibles. Ritmo de campe¨®n atado a las botas de un charr¨²a que s¨®lo sabe de ganar. Guarda en las vitrinas de su particular museo cinco Ligas de las siete que ha disputado desde que llegara a Espa?a, al Bar?a, en 2014, seis como cul¨¦ y la 2021-22 como rojiblanco. En total fueron 21 sus goles, a 0,66 por partido. Tres de cabeza, tres de penalti, cinco con la zurda y 13 con el pie derecho. Despu¨¦s de esa primera vuelta, lleg¨® un bache, dos partidos ante el Levante que cambiaron el paso al equipo. El mullido colch¨®n desde el que miraban la competici¨®n desde lo alto de la tabla se fue quedando sin relleno, hilo a hilo, hasta llegar a las dos ¨²ltimas jornadas con el todo o nada en juego con el Real Madrid. Otro error y LaLiga ser¨ªa blanca. El Pistolero llevaba sin p¨®lvora dos meses. Ante el Alav¨¦s, el 21 de marzo, hab¨ªa sido su ¨²ltimo gol, el n¨²mero 19. Despu¨¦s, una lesi¨®n muscular que le dej¨® en blanco tres partidos y cuatro sobre el verde pero en blanco en el marcador.
Osasuna era el pen¨²ltimo rival del Atl¨¦tico LaLiga pasada. Y ante Osasuna la bota de Su¨¢rez despert¨®, regres¨®. El Atl¨¦tico gan¨® 2-1 para encarar el ¨²ltimo partido, ese de Zorrilla con el t¨ªtulo en su mano... Si ganaba. Durante un momento, pareci¨® que no. Durante un momento, muy largo: en el minuto 18 ?scar Plano le arrebataba a los rojiblancos la ¨²ltima l¨¢mina del colch¨®n para estamparlos con la dura realidad. LaLiga que hab¨ªa comenzado con un 6-1 al Granada, dos goles de Su¨¢rez y una primera vuelta de 50 puntos ya no exist¨ªa, la ganar¨ªa el Madrid. El Atl¨¦tico se fue al descanso rumiando eso. Cuando regres¨®, la puntera de una bota se rebel¨® contra ese destino. El suyo era otro. Y estaba lleno de mieles. ?ngel Correa empataba el partido en el minuto 57. Diez m¨¢s tarde, el marcador se daba la vuelta por completo, al 1-2. Y ten¨ªa que ser Su¨¢rez el autor de ese gol, el ¨²ltimo del Atl¨¦tico en la temporada 2020-21. Ten¨ªa que ser ¨¦l. Estaba escrito. "Creo en el karma", esgrimir¨ªa el jugador en esa entrevista con TVE en octubre pasado, "el destino, el de que te desprecien, ese destino que tendr¨¢ el final que tendr¨¢ que tener". Un final con ¨¦l llorando, sobre la hierba, con otra Liga prendida de la bota.
LaLiga que hab¨ªa comenzado con un 6-1 al Granada, dos goles de Su¨¢rez y una primera vuelta de 50 puntos ya no exist¨ªa
El hombre lleno de cicatrices se sec¨® los ojos y la sonrisa brot¨® de su rostro como el sol que reci¨¦n amanece y lo llena todo de luz. "El t¨ªtulo es especial por la situaci¨®n que me toc¨® vivir, de la forma c¨®mo me menospreciaron y el Atl¨¦tico me abri¨® las puertas", aseveraba justo despu¨¦s ante el micr¨®fono de Movistar+. "Siempre estar¨¦ agradecido al Atl¨¦tico. Hemos sufrido, tanto mi mujer como mis hijos, el a?o que m¨¢s". Su mujer, Sof¨ªa Balbi; sus hijos, Delfina, Lautaro y Benjamin. Las personas con las que hablaba por tel¨¦fono desde el centro de la hierba de Zorrilla, mientras lloraba ¨¦l, lloraban ellos... de extrema felicidad. Siete meses despu¨¦s de aquello, los premios siguen llegando. En los de AS 2021, Su¨¢rez recibe el galard¨®n, como antes hicieron God¨ªn y Forl¨¢n, s¨ªmbolos rojiblancos, del Premio Am¨¦rica AS del Deporte. U-ru-gua-yo.