
Nunca se colg¨® la etiqueta de medi¨¢tico, ni acapar¨® las mismas portadas que sus compa?eros de viaje, pero los poderes de Carlos Marchena (Las Cabezas de San Ju¨¢n, Sevilla, 41 a?os) en el f¨²tbol espa?ol, sobre todo cuando entra en juego la Selecci¨®n, est¨¢n solo al alcance de los elegidos: campe¨®n del mundo sub-20 (Nigeria 1999), plata ol¨ªmpica (Sidney 2000), campe¨®n de Europa (2008) y campe¨®n del Mundo (2010). No ser¨ªa justo olvidar sus dos Ligas, una Copa, una Copa de la UEFA y una Supercopa de Europa con el Valencia, con las que completa un palmar¨¦s admirable.
En plena Eurocopa, con La Cartuja como sede de los partidos de Espa?a, a Carlos Marchena se le amontonan los recuerdos y nunca viene mal compartirlos con el pr¨®jimo. Son las vivencias de un privilegiado del bal¨®n que ahora aprende en la direcci¨®n deportiva del Sevilla junto a Monchi y Pablo Blanco y que de mayor querr¨ªa ser entrenador, que para eso ha estudiado.
¡°Cuando huelo a Selecci¨®n me meto dentro¡±
Me han dicho que el lunes en La Cartuja quer¨ªa saltar al campo¡ que vivi¨® el partido como si lo estuviera jugando.
S¨ª, s¨ª. Sent¨ªa nervios, parec¨ªa que iba a jugar. Iba como aficionado y quer¨ªa disfrutar, pero no pod¨ªa. Tuve que pararme, intentar desconectar y decir Carlos, un momento, que vas vestido de calle. Son momentos especiales. Recuerdas los momentos que pasaste all¨ª dentro y cuando huelo a la Selecci¨®n no puedo evitar meterme dentro. Fueron momentos tan gloriosos los que vivimos.
En su caso ha vivido de todo. Antes de ganar la Eurocopa y el Mundial, padeci¨® Portugal 2004 y Alemania 2006.
No lo olvido. Viv¨ª las dos etapas. En la primera, siempre se volv¨ªa escaldado porque las cosas no sal¨ªan bien. El 2004 fue duro. S¨¢ez se hizo cargo y con ¨¦l llegamos una serie de jugadores de las selecciones inferiores. Ven¨ªamos de trabajar sin foco, con tranquilidad y nos encontramos lo que significaba la absoluta. Pagamos no tener tranquilidad. Conflicto en todo, en todo. Cada decisi¨®n eran un mundo y lo pagamos los j¨®venes. Aquella Eurocopa no sali¨® como hab¨ªa so?ado. Era mi debut y sal¨ª un poco decepcionado. Pens¨¦ que aquello no era tan bonito como pensaba o como lo que hab¨ªa vivido con las inferiores: ganar, disfrutar. La absoluta ya eran palabras mayores.
¡°Antes de ganar viv¨ª el 2004 y el 2006. Todo era un conflicto. Cada decisi¨®n era un mundo¡±
Llegaba colgado de medallas y se encontr¨® la pura realidad de lo que era la Selecci¨®n.
Nuestra ilusi¨®n era cambiar lo mal que lo hab¨ªamos pasado cuando ¨¦ramos ¡®chicos¡¯ y sufr¨ªamos tanto porque ve¨ªamos que nunca se ganaba nada en las Eurocopas y los Mundiales. La corriente con la sub-20, sub-21, ol¨ªmpica, no pod¨ªa ser mejor y al llegar intentamos cambiar el rumbo, pero nos dimos cuenta de que no iba a ser tan f¨¢cil. ?bamos con la ilusi¨®n de que pod¨ªamos hacer cosas, pero sin el convencimiento real de que pod¨ªamos hacerlo. No est¨¢bamos preparados para meternos entre los cuatro primeros
El 2006 tambi¨¦n fue un duro golpe, sobre todo el partico contra Francia. ?bamos un poco creciditos y nos partieron el pecho.
Como equipo ya no ten¨ªamos la inocencia de dos a?os antes. Empezamos bien hasta el partido contra Francia. Se vend¨ªa que nos ¨ªbamos a encontrar un rival medio retirado, con jugadores pasados de edad y nos dimos cuenta que quiz¨¢s s¨ª en su ¨²ltima etapa pero que ten¨ªa jugadores con mucho talento. No medimos bien los tiempos. Fuimos muy atrevidos y lo pagamos. Podr¨ªamos haber llegado m¨¢s lejos. Esa derrota nos hizo madurar y nos hizo m¨¢s fuertes para lo que estaba por venir.
Luis siempre dijo despu¨¦s que la Eurocopa se comenz¨® a ganar en la derrota contra Francia.
Pues si lo dec¨ªa ¨¦l por algo ser¨ªa. A Luis no hay que quitarle la raz¨®n en ese tipo de cosas. De los palos se aprende m¨¢s que de las victorias. Le das mil vueltas a la cabeza buscando las razones. En los triunfos lo das casi todo por bueno y las reflexiones no son tan pausadas.
He encontrado una frase suya que dec¨ªa exactamente que la Espa?a campeona de Europa y del mundo nace de la humildad y del sacrificio y del sufrimiento.
¡°Las generaciones que llegan ahora se encuentran otra Selecci¨®n, no la que nos encontramos nosotros¡±
Me gusta utilizar esas palabras porque se ajustan a lo que ocurri¨®. Desde que hemos comenzado la entrevista casi hemos hablado m¨¢s de los momentos malos, de saber sufrir, de tener humildad. De saber, en el 2008 cuando todo te iba bien, que te hab¨ªa costado muchos momentos amargos y a eso hab¨ªa que darle importancia. Todo lo malo que nos pas¨®, nos vino bien. A los chicos que van a la Selecci¨®n ahora les digo que van a un equipo mucho m¨¢s ganador que antes, pero que eso cost¨® un trabajo y hay que valorarlo. Las generaciones que llegan ahora se encuentran otra Selecci¨®n, no la que nos encontramos nosotros.
Siempre se habla del partido contra Italia en cuartos de final como el punto de inflexi¨®n. Pero al fin y al cabo fueron unos penaltis. Los dos que para Iker y los que marca Espa?a.
¡°El d¨ªa que ganamos a Italia en los penaltis se acabaron todos los fantasmas y todos los complejos¡±
S¨ª, pero fue una tanda de penaltis que significaba mucho. Era pasar de cuartos, ganar a Italia, ganar una tanda¡ Eran simples penaltis, pero despu¨¦s de un partido muy trabajado, una pr¨®rroga muy igualada, despu¨¦s de tantas cosas que siempre ca¨ªan para el otro lado. Y ese d¨ªa cay¨® a nuestro favor. Ese d¨ªa nosotros dijimos, ahora s¨ª. Y se acabaron los fantasmas y los complejos que ten¨ªamos. Ese d¨ªa el f¨²tbol espa?ol dio un salto bastante grande. Los dos siguientes partidos fueron los mejores porque los jugamos sin esa barrera sicol¨®gica. Te sueltas y eres t¨², sueltas todo el talento y la confianza que tienes y apareci¨® lo que apareci¨®, el tremendo f¨²tbol que ten¨ªa esa generaci¨®n.
Desde atr¨¢s, desde la cueva al lado de Puyol, como ve¨ªa a los que estaban por delante.
¡°Como central era una gozada ver jugar a los de adelante. Era tener la mejor entrada sin haberla pagado¡±
Ten¨ªa la mejor entrada sin haberla pagado. Era disfrutar. Ahora a los centrales se les exige mucho m¨¢s que en mi ¨¦poca, pero hay que saber siempre qui¨¦n tiene que tener la pelota. Lo mejor es que la tengan los buenos y estos son los de adelante. Hay que saber d¨¢rsela y estar preparados para cuando ellos la pierden. Pero la gente de aquel equipo nunca la perd¨ªa. Era un disfrute. Te daban confianza. Te la ped¨ªan, aunque tuvieran uno encima. D¨¢mela, d¨¢mela¡ y se la dabas. Y era una gozada jugar por detr¨¢s de ellos.
Pero a Marchena siempre le gust¨® salir con el bal¨®n jugado. A su manera tambi¨¦n era un jug¨®n.
S¨ª, me gustaba. Jugu¨¦ bastante tiempo de mediocentro, pero entend¨ªa que cuanto menos la tuvi¨¦semos los de atr¨¢s, m¨¢s da?o ¨ªbamos a hacer. Los de adelante eran infinitamente superiores a nosotros con la pelota en los pies. Al lado de los que ten¨ªamos era una falta de respeto decir que yo era un jug¨®n. Aprend¨ª mucho de ellos y sobre todo disfrut¨¦ mucho de ellos. Los rondos de aquella selecci¨®n eran excelentes. No quer¨ªas entrar nunca al medio. Como entraras te costaba una vida salir. Ir a la selecci¨®n te hac¨ªa mejorar por el alto nivel que hab¨ªa.
Despu¨¦s del Mundial de Nigeria (1999), Franz Beckenbauer dijo que hab¨ªa visto detalles futbol¨ªsticos suyos en usted¡ ?Le benefici¨® o le perjudic¨®?
?Hombre, me benefici¨®! Vino a decir como que pod¨ªa ser su sucesor. Fue un halago que me dio mucha confianza. Simplemente que se pudiera asociar un nombre con otro fue algo maravilloso. La pena es que ten¨ªa una foto con ¨¦l y la perd¨ª. Yo no soy de recuerdos, pero esa foto me hubiera gustado guardarla y tenerla.
De aquel equipo doble campe¨®n, Capdevilla y usted eran los menos medi¨¢ticos.
Quiz¨¢s por no haber jugado ni en el Barcelona, ni en el Madrid. Tampoco me gusta mucho el foco, me encuentro m¨¢s c¨®modo en el segundo plano. Mi car¨¢cter es tranquilo. Huyo de las c¨¢maras. En aquel equipo era f¨¢cil sentirse importante. No hab¨ªa distancias con los jugadores estrellas, ni con los que ven¨ªan nuevos. ?ramos un equipo por encima de todo. Y eso hay que agradec¨¦rselo a ellos, a los m¨¢s medi¨¢ticos. Sobre todo, a Xavi que era el buque insignia de ese grupo. Todos nos sent¨ªamos importantes.
Usted para ellos era el ¡®pater¡¯ o el ¡®padre¡¯¡

MIGUEL MORENATTI (DIARIO AS)
-Unos me lo dec¨ªan en ingl¨¦s, otros en espa?ol. Ven¨ªa por eso, porque intentaba hablar con todos, en los momentos de euforia bajar un poquito el tono. Por mi car¨¢cter m¨¢s que nada. Siempre he sido m¨¢s mayor de lo que me ha correspondido e intentaba que fu¨¦ramos gente responsable. No me consideraba un l¨ªder como tal, lo que intentaba es darle pausa a todo y si hab¨ªa que decir algo importante o desagradable alguna vez, me consideraba legitimado para decirlo. Las cosas hay que decirlas en el vestuario. Nosotros lav¨¢bamos dentro los trapos sucios, que alg¨²n d¨ªa los hubo, como en todas las familias.
?Si no hubiera aparecido Piqu¨¦, hasta cuando pod¨ªa haber seguido como titular en la selecci¨®n?
No lo s¨¦. Gerard ha sido uno de los centrales m¨¢s grandes que hemos tenido y entend¨ª que ten¨ªa que seguir remando, seguir aportando mi granito de arena. M¨¢s desde fuera pero siempre orgulloso y preparado para jugar cuando el seleccionador lo considerara oportuno.
Ayudando como en la final del Mundial en la que se meti¨® dentro del campo para que los holandeses no pudieran sacar r¨¢pido de centro tras el gol de Iniesta.
Eso habla de c¨®mo vivo y siento los partidos. Intensamente. Sent¨ªa que estaba jugando, aunque no estuviera en ese momento en el once. Me da hasta un poco de verg¨¹enza de hablar de ello. En ese momento tambi¨¦n reflej¨¦ mi car¨¢cter, en un momento de euforia intentar hacer lo que cre¨ªa m¨¢s correcto.
Si tantos a?os despu¨¦s le dan a elegir con cu¨¢l se queda con la Eurocopa por ser la primera o con el Mundial por lo que significa.
Ufffff¡ Lo he pensado muchas veces. La Eurocopa fue muy importante por venir de donde ven¨ªamos, por todo lo que hab¨ªamos sufrido. Fue impresionante¡. Pero un Mundial es un Mundial. Es decir, he ganado la Eurocopa y ahora voy con todo lo bueno que tengo a ganar el Mundial y lo gano. Fue un sue?o tras otro. Mi madre guarda recuerdos de todo. A mi no me gusta mucho tener cosas en casa. No quiero que mis ni?os se cr¨ªen en lo que ha sido su padre en el pasado, sino que vivan el presente y sepan que la vida sigue. El pasado no hay que mirarlo, hay que disfrutarlo.
Usted tiene el t¨ªtulo de entrenador, tras el empate ante Suecia, ?Le gustar¨ªa estar ahora en la piel de Luis Enrique?
¡°Estar en la piel de Luis Enrique es dif¨ªcil. Ser seleccionador es un orgullo, pero hay que saber que todo se te puede cuestionar¡±
- Entrenar a la Selecci¨®n tiene que ser algo muy bonito y un orgullo. Estar en su piel ser¨ªa dif¨ªcil. El f¨²tbol espa?ol conlleva estar en boca de todos, pero siempre con orgullo. Todo lo que se haga se puede cuestionar. Debes poner en una balanza el placer de entrenar a los mejores futbolistas de Espa?a con el hecho de que cualquier situaci¨®n o decisi¨®n, se te va a criticar. Estamos hablando de f¨²tbol y saber en el mundo en el que estamos.
?El lunes en La Cartuja se puso a buscar a Sergio Ramos¡?
Ja, ja, ja¡ Ya sab¨ªa que no estaba. La decisi¨®n sobre su ausencia la habr¨¢n consensuado entre los dos, meditado mucho. En cualquier caso, es una decisi¨®n dura, muy dura por lo que Sergio ha significado y significa en el f¨²tbol espa?ol, pero no puedo me puedo meter en la piel de Luis Enrique, ni en la de Sergio. Me falta much¨ªsima informaci¨®n.
?C¨®mo ve a esta selecci¨®n despu¨¦s del primer partido?
-La veo bien, con buen juego, creando ocasiones. El lunes estaba cerca del banquillo y vi un muy buen ambiente. Me fij¨¦ en detalles del banquillo y se ve¨ªa al equipo junto. Los j¨®venes tienen experiencia para la edad que tienen. El partido contra Suecia posiblemente le quite un poco de confianza, pero creo que hay que mantenerla.
- ?Cu¨¢ndo ve un partido de Espa?a lo ve como ex internacional o como entrenador?
-Un poco de todo. Por momentos parece que soy un jugador m¨¢s. El lunes pegaba unos saltos cuando no marc¨¢bamos que me asustaban hasta a m¨ª, pero luego tambi¨¦n me sal¨ªa la vena de analizar. ?Qu¨¦ har¨ªa yo en este momento? ?A qui¨¦n sacar¨ªa? ?Qu¨¦ le viene bien al equipo?
- ?Y en qu¨¦ minuto hubiera metido a Gerard Moreno?
- Ja, ja, ja¡ No puedo decir lo que hubiese hecho. Eso se queda para m¨ª. Me falta todav¨ªa much¨ªsima, much¨ªsima formaci¨®n. Desde fuera hay millones de detalles que se nos escapan y que Luis Enrique sabe desde dentro. Seguro que razones tendr¨¢ para hacer todo lo que hace. Es tan dif¨ªcil ser entrenador que solo sabe las razones quien est¨¢ dentro.