El f¨²tbol en general y el espa?ol en particular luchan desesperadamente contra una lacra que se ha instalado en sus tripas y no hay forma de erradicar. ?Cu¨¢ndo una mano acaecida dentro del ¨¢rea debe ser sancionada con la pena m¨¢xima del penalti y cu¨¢ndo no? Cuenta el sabio refranero de la lengua castellana que ¡°lo que no se entiende es que est¨¢ mal hecho o mal explicado¡±. Justamente lo que sucede con este mal end¨¦mico que azota la competici¨®n y que los responsables no son capaces de aclarar ni de unificar criterios.

El domingo pasado se vivi¨® la pen¨²ltima acci¨®n pol¨¦mica en el derbi madrile?o. La mano de Felipe fue interpretada de dos formas distintas por el ¨¢rbitro de campo y por el ¨¢rbitro del VAR. El primero consider¨® que no era merecedora de ser castigada con penalti; el segundo, por el contrario, ten¨ªa muy claro que s¨ª merec¨ªa esa sanci¨®n. De lo contrario, de no estar totalmente convencido de que su compa?ero se hab¨ªa equivocado, no le hubiera recomendado que acudiera al monitor a revisar la jugada. Recordemos que el VAR s¨®lo est¨¢ para reexaminar acciones flagrantes, para poder rectificar errores claros y manifiestos.

Es obligado evocar que en los tiempos en los que el VAR no hab¨ªa venido al mundo, el asunto de las manos era balad¨ª en comparaci¨®n con el presente. As¨ª lo explican cinco ex ¨¢rbitros internacionales, con los que AS ha intentado buscar un poco de luz dentro del marem¨¢gnum actual que ni siquiera puede ser resuelto con la nueva herramienta tecnol¨®gica puesta a disposici¨®n de los colegiados.

Con un Mundial (2002), una Eurocopa (1996), tres finales de la Copa de la UEFA (r¨¦cord europeo), 11 a?os internacional, 15 en Primera Divisi¨®n (231 partidos), cinco trofeos de mejor ¨¢rbitro espa?ol, Antonio Jes¨²s L¨®pez Nieto puede ser considerado como un experto en la materia. Su inquietud por la situaci¨®n a la que se ha llegado con el espec¨ªfico asunto de las manos es relevante como se deduce de sus palabras.

¡°Me consta que la nomenclatura actual que estamos utilizando en muchos momentos confunde. ?Qu¨¦ es natural o no natural? ?Qu¨¦ es invasivo o no es invasivo? Para m¨ª, el concepto primordial para sancionar este tipo de manos deber¨ªa ser la intencionalidad, se tienen que castigar las manos deliberadas y si hay que aceptar el tema accidental habr¨¢ que evaluar la dificultad o el riesgo de la jugada, no del jugador. No se deber¨ªan sancionar las manos no trascendentes para el juego. No podemos estar haciendo un mapa fisiol¨®gico, si la mano est¨¢ un poco m¨¢s arriba o m¨¢s abajo. Nos encontramos con manos casi iguales con decisiones diferentes y c¨®mo se lo explicamos al gran p¨²blico¡±.

L¨®pez Nieto est¨¢ convencido de que los nuevos apellidos con los que se ha querido acotar cada acci¨®n dificultan su entendimiento. ¡°Si ya es dif¨ªcil avanzar con las manos deliberadas, si les metemos m¨¢s conceptos, si acotamos m¨¢s, seguir¨¢ pasando lo que est¨¢ pasando. En mis tiempos pit¨¢bamos los penaltis de verdad, los intencionados, aunque tambi¨¦n se nos escapaban muchos. Ahora hemos llegado a un problema grande. La jugada del pasado domingo en el derbi se repetir¨¢ la jornada siguiente y la otra. Lo que ocurre es que cuando sucede en un derbi o un Real Madrid-Barcelona tiene una repercusi¨®n mayor. En el Valencia-Villarreal hubo una jugada igual o similar y se pit¨® penalti. Tambi¨¦n tengo que reconocer que los ¨¢rbitros en jugadas parecidas nos equivocamos o las interpretamos diferente porque al final somos personas¡±.

Lo que s¨ª considera vital es que se unifiquen los criterios entre los ¨¢rbitros. ¡°Por lo menos hay que intentar que nosotros tengamos claros los conceptos, que haya una unanimidad. En muchos casos no la tenemos porque la tropel¨ªa de conceptos sobrepasa la inteligencia natural. Que si natural, que si invasiva, que si por encima del hombro¡­. Hemos querido acotar, reducir tanto, que nos olvidamos de un concepto que yo siempre utilizo, que es el feeling. Lo crucial es la importancia de la jugada. Una acci¨®n, aunque la mano sea accidental, si el bal¨®n va para la porter¨ªa y va a entrar a gol, yo tengo la mano separada y me pega la pelota, aunque no sea de forma intencionada¡­ se pita penalti y ni se habla de esa jugada. O si es un pase definitivo que se ve que el compa?ero puede marcar, tampoco pasa nada. Pero si esa misma jugada absurda ocurre en la esquina del ¨¢rea, que la pelota va para fuera, la pegas con la mano y se pita penalti¡­ no se entiende. ?Qu¨¦ incidencia tiene esa acci¨®n en el juego? Ninguna real ni importante. El jugador sabe que cuando tiene la mano separada tiene un riesgo, pero lo que no puedes es llamar mano antinatural a una mano en la que est¨¢s saltando y est¨¢ despegada. Yo reto a quien sea a que salte con las manos pegadas al cuerpo. Eso es lo que es antinatural¡±.

Reconoce que desgraciadamente no es un problema ¨²nico del f¨²tbol espa?ol. ¡°La FIFA y la UEFA est¨¢n cada d¨ªa intentando darle una vuelta m¨¢s a este tema de las manos y cada vez que le dan una vuelta, aunque sea con buena intenci¨®n, lo complican m¨¢s. Pas¨® la temporada que se habilit¨® el espacio del cuerpo entre la axila y el hombro. ?Qui¨¦n afina exactamente con que parte la ha bajado? El camino de las acciones en las que las manos entran en acci¨®n es cada vez m¨¢s complicado. El otro d¨ªa un periodista me dec¨ªa que el penalti de Felipe en el f¨²tbol de verdad no se pita y en el f¨²tbol actual, s¨ª. Totalmente de acuerdo con ¨¦l. Lo que tenemos que pretender es que el f¨²tbol tenga su verdad continua¡±.

Su temor es que, dada la situaci¨®n, la picaresca complique a¨²n m¨¢s el asunto. ¡°Se puede llegar al caso en que un jugador h¨¢bil, con buen golpeo, vaya a lanzar el bal¨®n directamente contra la mano antinatural despegada del cuerpo y a lo peor, en una jugada que no tiene ninguna trascendencia, se pite el penalti que ha forzado el contrario. Estamos llegando a l¨ªmites peligrosos. No es de ahora, llevamos seis, siete, ocho a?os con las manos a la deriva. Lo que ocurre es que ahora con el VAR se ven m¨¢s. La jugada del derbi a un ¨¢rbitro le pareci¨® penalti y al otro, no. Pero es que 48 horas antes, con una jugada parecida, ocurri¨® al rev¨¦s. Yo que llevo 50 a?os en esto y sigo en activo, estoy confundido, c¨®mo no lo van a estar los aficionados en sus casas¡±.

Emilio Soriano Aladr¨¦n tiene a bien haber sido en su momento el ¨¢rbitro espa?ol m¨¢s joven en alcanzar la internacionalidad. En su tarjeta de presentaci¨®n cuenta con haber dirigido un Mundial (Italia-90), dos Eurocopas (1988 y 1992), 15 a?os como internacional y 17 en Primera Divisi¨®n. Mantiene su atenci¨®n m¨¢xima a la situaci¨®n arbitral y, por supuesto, al pol¨¦mico asunto que nos ocupa.

¡°Hay un problema de protocolo. Las instrucciones que se dan a los ¨¢rbitros no est¨¢n lo suficientemente explicadas. Hay tres o cuatro casos de estas jugadas diferentes. No m¨¢s. Y los ¨¢rbitros los tendr¨ªan que conocer al dedillo y no es as¨ª. Las manos, y m¨¢s en el ¨¢rea, siempre han sido conflictivas para nosotros. En la acci¨®n del domingo, si la ves en una toma frontal ves un penalti como una catedral, pero si lo ves en una toma lateral, ves claramente que el jugador no tiene intencionalidad ninguna y utilizo esa palabra sabiendo que se ha erradicado del enunciado de las normas. S¨®lo se puede pitar penalti cuando una mano es deliberada, por no decir la palabra intencionada¡±.

Soriano relata c¨®mo ha sido la evoluci¨®n de la punibilidad de las manos. ¡°Primero s¨®lo habl¨¢bamos de la intencionalidad, luego se comenz¨® a tener en cuenta si la mano en cuesti¨®n cortaba jugadas importantes y se comenz¨® a sancionarlas, pero es que ahora se pitan manos en acciones en las que los jugadores est¨¢n de espaldas o de lado y eso no puede ser. Lo importante es la disposici¨®n que el futbolista tiene al juego con sus manos y sus brazos. Si no existe la disposici¨®n de utilizarlos es que quiere jugar el bal¨®n y entonces no es punible¡±.

Es absolutamente contrario a globalizar la postura. ¡°No se puede llegar a la conclusi¨®n de sancionar todas las manos en el ¨¢rea como penalti. Esto es un juego. Los brazos forman parte de la din¨¢mica de un cuerpo, acompa?an todos los movimientos que haces. Antes los jugadores se pon¨ªan las manos abajo para taparse sus partes, ahora est¨¢n obsesionados con pon¨¦rselas atr¨¢s. Hasta saltan con las manos pegadas para evitar que les de el bal¨®n. Lo que hay que tener claro es la posici¨®n del infractor con respecto al bal¨®n. No existe unificaci¨®n de criterios cuando un ¨¢rbitro est¨¢ en el VAR o est¨¢ en el campo. Enjuician las acciones de distinta manera dependiendo de d¨®nde est¨¦n. Tienen dos criterios distintos. Ahora pita m¨¢s el VAR que el ¨¢rbitro y no debe ser as¨ª. El VAR es fant¨¢stico, pero no me ha dado la satisfacci¨®n que me esperaba. Pensaba que se iba a llegar a la m¨¢xima perfecci¨®n posible y no se ha llegado¡±.

Ex director del Comit¨¦ Nacional de ?rbitros durante 17 a?os, el colegiado asturiano estuvo presente en un Mundial (1994), una Eurocopa (1996) y unos Juegos Ol¨ªmpicos (1992). Pit¨® la final de la Champions del 96 y estuvo 13 temporadas en Primera, 10 de ellas con la escarapela de internacional. No es muy partidario de entrar en la pol¨¦mica suscitada con el asunto de los manos, principalmente por su reciente pasado, pero es evidente que es un asunto que le apasiona y al final, aunque con el freno de mano echado, ofrece su versi¨®n.

¡°La intencionalidad tiene que estar en la base de la sanci¨®n. Dentro de las reglas de juego todo aquello que no sea deliberado no es sancionable. Y todo aquello que es intencionado es doloso. Hay que separar la mano deliberada y la mano casual. ?stas nunca llevan sanci¨®n. Si el bal¨®n golpea en la mano de un jugador que est¨¢ de espaldas, aunque tenga los brazos abiertos, no puede ser sancionable. Una mano que est¨¢ apoyada en el suelo, tampoco se puede tener en cuenta. Una mano que est¨¦ muy cerca y pueda ser accidental, tampoco. A partir de ah¨ª, se pone el criterio de las que tienes que tener en cuenta, todas en las que se intente obtener un beneficio con su uso. Las que est¨¦n por encima del hombro deben de ser penalizables, salvo que sea un golpe por detr¨¢s sin que el jugador lo vea. Toda la mano que est¨¦ en el campo visual del jugador puede ser infracci¨®n por acci¨®n o por omisi¨®n. Y digo por omisi¨®n porque un jugador que tiene el brazo separado puede que no quiere jugarla, pero tampoco tiene intenci¨®n de evitarla¡±.

La acci¨®n de Felipe en el derbi se encierra para D¨ªaz Vega entre las jugadas en las que el jugador no tiene voluntad de dar al bal¨®n con la mano. ¡°Se debe analizar si cuando el bal¨®n pasa por la altura de la cabeza del jugador que quiere jugar el bal¨®n con la cabeza, ?tiene alg¨²n movimiento el brazo? El bal¨®n cae desde arriba en una forma de resbal¨®n y le da en el antebrazo, ?puede ser punible? Si al jugador en esas cent¨¦simas de segundo le dio tiempo para hacerlo intencionado es una casualidad que el f¨²tbol debe tener capacidad de asumir. Y si es una casualidad, no la puedes penalizar¡±.

El asturiano parte de la base de que la filosof¨ªa de la regla siempre est¨¢ basada en el esp¨ªritu del juego. ¡°?Qu¨¦ es lo que el jugador quiere hacer, qu¨¦ demandaba el juego en ese momento? ?Qu¨¦ es infracci¨®n por mano? Jugar el bal¨®n de forma deliberada con la mano. De forma accidental o involuntaria no es infracci¨®n. El VAR no tiene nada que ver con esto. El VAR es un scanner que te ayuda a esclarecer la jugada una vez pasada si no ha estado clara, pero el tema de las manos es f¨¢cil de acotarlo. El problema de las manos es que no lo entiende nadie. Al ¨¢rbitro hay que darle las ideas claras¡±.

 

Internacional. 14 temporadas en Primera Divisi¨®n.

¡°Lo m¨¢s importante ser¨ªa que los ¨¢rbitros se pusieran de acuerdo con el asunto de las manos. Hablando con algunos de ellos, te dicen que no lo tienen claro con tanta especificaci¨®n. Y luego hay que tener meridianas las acciones deliberadas y no. Por mucho que se quite de la norma, la intencionalidad siempre ha de estar presente en el juego y m¨¢s en las manos¡±.

¡°La jugada del domingo es el fiel reflejo de lo que est¨¢ pasando. Para Hern¨¢ndez Hern¨¢ndez no es penalti porque ve que el bal¨®n le cae en la mano y para Gonz¨¢lez Gonz¨¢lez, s¨ª, porque ve la posici¨®n de la mano. Eso no puede ser. El ¨¢rbitro del VAR se meti¨® en un charco en el que nunca se debe meter porque la jugada es m¨¢s que gris, que es la terminolog¨ªa que ellos utilizan. Es una jugada de interpretaci¨®n del ¨¢rbitro de campo. ?Por qu¨¦ se mete el VAR en una acci¨®n en la que no debe meterse? Yo soy el ¨¢rbitro de campo y le mando al carajo¡±.

Internacional. 14 a?os en Primera Divisi¨®n. Colegiado con m¨¢s ¡®Cl¨¢sicos¡¯ arbitrados: 15.

¡°La pol¨¦mica surge porque los ¨¢rbitros son humanos y pueden interpretar de distinta forma las normas que les han explicado sobre las manos. Cualquier mano que ocupe un espacio no natural dentro del ¨¢rea debe castigarse con penalti. Otra cosa es que el bal¨®n venga por el aire y te pegue en el brazo, eso no es penalti. Todas las manos que corten un bal¨®n que vayan hacia gol, aunque sea por un movimiento instintivo, son penaltis. Hay que aplicar la l¨®gica y la l¨®gica es la intencionalidad o no intencionalidad en algunas jugadas. Las manos no deliberadas no deben ser penalti salvo que est¨¦n excesivamente despegadas del cuerpo. En mi ¨¦poca se interpretaba si la mano era involuntaria o no. Ahora con las im¨¢genes del VAR hay diferentes enfoques sobre la jugada. Aunque la acci¨®n es la misma, por televisi¨®n se ven las jugadas desde distintos enfoques que en el campo¡±.