N¨²?ez se saca la espina con el gol del triunfo ante Costa Rica
Marc¨® de cabeza en un c¨®rner en el minuto 94. Antes Muniain adelant¨® a Euskadi y empataron los ticos, liderados por Borges, con Moya. Gran partido de Yeray.
N¨²?ez lleva un a?o para olvidar. Percibe con punter¨ªa que es el tercer central para Garitano y quiso elaborar un plan de fuga en Bilbao, abortado porque las cosas no se hacen as¨ª en el Athletic. Nada de cesiones porque no te gusta tener que ganarte las alubias por detr¨¢s de Yeray e I?igo Mart¨ªnez. Cuando sale al campo parece ap¨¢tico y ni el gol que daba el triunfo ante Costa Rica le desat¨® digamos una euforia desmedida. Fue un c¨®rner perfectamente sacado por Aihen Mu?oz fuera del tiempo de prolongaci¨®n anunciado, casi en el minuto 94 (se agregaban tres); con los pies bien plantados y sin la vigilancia precisa de Vargas, cabece¨® de forma inapelable.
Euskadi sac¨® adelante un buen partido de f¨²tbol, animado y movido, que parec¨ªa orientarse hacia Costa Rica. El plantel vasco se va renovando tras la retirada de leyendas como Aduriz, Agirretxe y Xabi Prieto. Ha cogido por costumbre jugar en fechas FIFA y desde 2000 s¨®lo ha perdido tres partidos. La ¨²ltima derrota data de hace casi una d¨¦cada. Desde mayo de 2019 no jugaba, en Panam¨¢, y hab¨ªa expectaci¨®n, aunque en estos tiempos de COVID no se puede plasmar con presencia de gente en la grada.
Jugaron todos los citados menos los albiazules Castro y Mart¨ªn. Es decir, el Glorioso s¨®lo estuvo representado a trav¨¦s de Manu Garc¨ªa. De inicio, parec¨ªa un Athletic-Costa Rica, por los nueve leones del once titular. El equipo de Clemente, en 4-2-3-1, arranc¨® con entusiasmo, con dos pivotes, Muniain en la mediapunta (fant¨¢stico entrando desde atr¨¢s), las alas para Morcillo y Williams, y Villalibre para los goles. ?Mensaje impl¨ªcito a Garitano? Ten¨ªan ritmo, en pocos toques llegaban al ¨¢rea contraria y la pelota corr¨ªa. Acababan las jugadas, ten¨ªan el bal¨®n bajo arresto y la iniciativa era de la tricolor. En un contraataque, se desat¨® Morcillo, que con metros es un pu?al. Le sigui¨® por la zona central Muniain, y el extremo condujo y orient¨® la pelota como un superclase. Tir¨® una diagonal con una rosca fuerte pero precisa, que sorte¨® a dos defensores escalonados, y Muniain la control¨® con la derecha y tir¨® con la zurda en postura algo forzada para batir entre las piernas a Navas.
El campo estaba r¨¢pido y sonre¨ªa al juego alegre de los locales. Costa Rica no estaba c¨®moda con ese frenes¨ª. Son m¨¢s de juego posicional, de darla en horizontal y no arriesgar en carreras. Villalibre se mov¨ªa bien entre l¨ªneas pero apenas participaba del juego. El frente ofensivo tico se intercambiaba las posiciones para marear a los defensas. Yeray fue un tit¨¢n y hasta sac¨® un bal¨®n bajo los palos; en las disputas no se le pas¨® ni una. El gol espole¨® a los visitantes y Campbell a la media hora prob¨® a Herrer¨ªn, que jug¨® cuatro meses despu¨¦s y sac¨® muy bien la manopla. Se visti¨® una camiseta con las mangas cortadas como pudo con tijeras.
Borges dio un recital. Un jugador de Segunda B, del Depor, que quiso mostrar su etiqueta de Primera, aunque deber¨¢ trasladar esa clase de vez en cuando a sus citas en Riazor. Domin¨® el juego como quiso y en el minuto 33 ejerci¨® de nueve con clase para controlar y picar la pelota, aunque la mand¨® fuera. Ante ¨¦l, Muniain esta vez economiz¨® esfuerzos, digamos que se cans¨® en lo suyo, en atacar por dentro, no en l¨ªos por la banda o en defensa. Euskadi empez¨® bien y acab¨® el primer tiempo con una postura similar. Una perfecta triangulaci¨®n Muniain-Morcillo-Williams permiti¨® el lucimiento de este gir¨¢ndose en el ¨¢rea, una virguer¨ªa que se le march¨® fuera cerca del descanso.
En el segundo tiempo sali¨® Vargas por el levantinista Duarte. Borges segu¨ªa son su lucimiento y casi marca de cabeza. Se la sac¨® Yeray con las abdominales. Costa Rica se hizo el due?o por completo del juego. Los vascos intentaron sacarse ese letargo contagioso de los ticos y Villalibre al fin tuvo un remate, con la zurda, pro se la adivin¨® Navas.
Los costarricenses subieron de forma clara el nivel de presi¨®n y activaron sus bandas. La idea era clara: abrir a los costados y colgar la pelota r¨¢pidamente. N¨²?ez tuvo otro de esos lamparones que habitualmente echa en sus hojas de servicios. Primero rompi¨® un fuera de juego en una apertura de Rodr¨ªguez a Venegas, y luego en el centro-chut de ¨¦ste, Moya le gan¨® la partida para empatar. El partido parec¨ªa irse a Am¨¦rica Central. Y un error de Vargas trat¨® de desmentir esa sensaci¨®n, pero Oier, con un gran robo, trat¨® de colarla de vaselina cuando la acci¨®n ped¨ªa un zapatazo. Los ticos se animaron en ¨²ltimos minutos y su banda izquierda era dinamita. Por el otro lado Gamboa tambi¨¦n pon¨ªa el turbo cerca del minuto 90. Aquello entr¨® en una espiral de toma y daca. Hubo un momento para recordar que Keylor Navas es uno de los porteros m¨¢s laureados de la era moderna a nivel de clubes. Capa se la puso a Bautista, que cabece¨® y el exmadridista neg¨® el gol con un parad¨®n. Aihen Mu?oz recogi¨® el rechace y tampoco pudo deshacer la igualada. Williams tuvo una ¨²ltima carrera que tambi¨¦n roz¨® el 2-1. El que s¨ª lo logr¨® fue N¨²?ez en el 94.?