Jo?o F¨¦lix pide galones
El portugu¨¦s fue la mejor noticia del ataque del Atl¨¦tico tras salir desde el banquillo. Acaba un a?o de altibajos dejando claro que calidad le sobra.
Jo?o F¨¦lix puso quiz¨¢s la ¨²nica nota positiva del Atl¨¦tico en el inoperante partido del ataque colchonero contra el Leipzig. El portugu¨¦s, que volv¨ªa a la ciudad que le vio crecer, entr¨® al campo a los 58 minutos por Herrera y cambi¨® la din¨¢mica del encuentro. Comenz¨® a entrar en juego tirado a la banda izquierda y lo primero que hizo fueron dos ca?os preciosistas y efectivos. Busc¨® combinar con Carrasco, el otro jugador que estaba mostrando m¨¢s desequilibrio y gener¨® el gol que puso el empate moment¨¢neo para el Atl¨¦tico que finalmente fue insuficiente.?
Recibi¨® en conducci¨®n, tir¨® la pared con Diego Costa y fue derribado cuando ya encaraba en el mano a mano. Si el propio Costa es el habitual tirador de los penaltis, fue Jo?o F¨¦lix qui¨¦n pidi¨® asumir la responsabilidad lanzando desde los once metros en el momento caliente con un chut imposible para Gulacsi. Sus compa?eros le buscaron y ¨¦l baj¨® a recibir para ser importante en la salida de bal¨®n, girando siempre entre l¨ªneas cuando le lleg¨® con ventaja. El portugu¨¦s se march¨® frustrado, consciente de que su buena entrada en el partido no hab¨ªa sido suficiente para por lo menos forzar una pr¨®rroga. En un primer a?o complicado, puede ser la pieza sobre la que edificar su crecimiento la pr¨®xima temporada.
Firmado como el fichaje m¨¢s caro de la historia del club el pasado verano (127,2 millones) tras maravillar en su debut en primera con el Benfica, su primer curso no ha estado a la altura de las expectativas creadas en una pretemporada excelsa. Su estreno goleador ante el Real Madrid en la inolvidable noche del 3-7 o su doblete a la Juventus situaron las ilusiones en lo m¨¢s alto, pero con el inicio de los partidos oficiales la cosa se complic¨®. Variando de posici¨®n entre la inc¨®moda banda derecha y de segundo delantero, donde Simeone todav¨ªa no le ve¨ªa preparado para encontrar sus huecos entre l¨ªneas, fue intercalando destellos, como su jugada maradoniana de la primera jornada contra el Getafe, con largos periodos de partidos sin aparecer.?
Segundo m¨¢ximo goleador del equipo
Jo?o F¨¦lix, de solo 20 a?os, ha tenido en las lesiones uno de sus grandes enemigos. El portugu¨¦s, Golden Boy apoyado en sus 20 tantos en el Benfica, ha sufrido dos parones de larga duraci¨®n por problemas f¨ªsicos que han lastrado su participaci¨®n. Pese a eso, partidos como el del Leipzig refuerzan la confianza que se tiene en ¨¦l. Calidad le sobra, cualidades y personalidad tambi¨¦n, pero todos sus compa?eros reiteran que le tiene que acompa?ar la cabeza para ser uno de los mejores.
El balance de su primer a?o est¨¢ marcado por la intermitencia en sus destellos, pero si logra la continuidad ser¨¢ un jugador ¨²nico. Sus n¨²meros han sido inferiores a los esperados, pero los nueve goles en 36 partidos le han servido para acabar como el segundo m¨¢ximo goleador de un equipo que ha adolecido todo el a?o de pegada (solo le ha superado Morata con 16 tantos). Ya lo dijo Oblak en AS, "los inicios aqu¨ª siempre son dif¨ªciles. Yo lo he sufrido bastante, s¨¦ c¨®mo es, c¨®mo se puede sentir. Pero con tiempo, si tienes calidad, paciencia y mente fr¨ªa, siempre llega tu momento". Y ese momento de Jo?o F¨¦lix se espera que llegue la pr¨®xima temporada. Por ahora sus n¨²meros han mejorado a los del primer Kun Ag¨¹ero, pero tiene que dar un salto de relevancia enorme para poder acabar compar¨¢ndose con el argentino, el otro ni?o de oro (gan¨® el Golden Boy en 2007) del Atl¨¦tico.?