La condici車n de Bale en el Real Madrid siempre ha estado en discusi車n. El jugador gal谷s no ha respondido a las expectativas generadas por ser el fichaje m芍s caro de la historia del club (101 millones de euros) y nunca ha tenido la continuidad esperada a causa de sus persistentes lesiones (22 en cinco temporadas) y discreto rendimiento. Desde que lleg車 en 2013 ha disputado 16.033 minutos, tan solo el 53% del total, y no ha estado en 115 partidos. Esta temporada se presum赤a como trascendental en su trayectoria en el Madrid. El club blanco le hab赤a concedido el papel de superfigura tras la salida de Cristiano, en una decisi車n dif赤cil de justificar viendo la evoluci車n futbol赤stica del gal谷s. Lejos de asumir ese estatus, Bale ha ido perdiendo protagonismo y eficacia con el paso del curso y sus n迆meros no tienen nada de extraordinarios (12 goles y cinco asistencias), tal y como muestra el siguiente gr芍fico.
Bale empez車 la temporada a un nivel razonable. Marc車 ante Getafe, Girona y Legan谷s y asisti車 tambi谷n contra el conjunto catal芍n, Athletic y en la Supercopa de Europa frente al Atleti en los primeros cinco partidos. Sin embargo, todo fue un espejismo. Desde noviembre no da un pase de gol (Viktoria Plzen) y s車lo en diciembre mantuvo un promedio realizador interesante gracias a su hat-trick contra el Kashima en las semifinales del Mundial de Clubes. Su efectividad se cuestiona con las cifras en la mano. Bale necesita nueve remates para superar al portero rival esta campa?a, lejos de su acierto de la 2013-14 (5 disparos), 2015-16 (seis) y de la 2017-18 (cinco). S車lo en la 2014-15, su segunda temporada de blanco, presenta un registro m芍s bajo (diez remates). En la 2015-16 tambi谷n hac赤a un tanto cada nueve remates intentados. Si analizamos su precisi車n como goleador y asistente en funci車n de los minutos jugados, Bale marca este curso cada 165* (151* en la 13-14, 237* en la 14-15, 125* en la 15-16, 214 en la 16-17 y 112 en la 17-18) y da un pase decisivo cada 397* (175* en la 13-14, 336* en la 14-15, 170* en la 15-16, 322 en la 16-17 y 337 en la 17-18). Asiste menos que nunca y tampoco su estad赤stica de cara a la porter赤a rival luce como en otras campa?as.
Bale ha contribuido con 100 goles y 63 asistencias en las cinco temporadas y media que acumula como jugador del Madrid, acostumbrado a aparecer en la foto de momentos memorables de la historia reciente del conjunto blanco con goles determinantes en t赤tulos de Champions o Copa. Aun as赤, su incidencia no se debe s車lo limitar a estos cap赤tulos del juego. Al jugador gal谷s se le atribuye cierta apat赤a. Sus desconexiones han sido una constante y no figura como un futbolista con visi車n colectiva. La infograf赤a inferior detalla sus intervenciones durante un partido en cinco par芍metros distintos (pases, remates, regates buenos, recuperaciones y centros al 芍rea). La primera conclusi車n que se puede extraer es la regresi車n de Bale esta temporada en dos aspectos. Completa menos regates (uno cada 72,6 minutos) y su tasa de recuperaciones tambi谷n ha ca赤do en picado (una cada 58,5*). En el resto de apartados mantiene unos guarismos similares al de campa?as pasadas. La 2015-16 emerge como su temporada m芍s productiva en casi todas las estad赤sticas (registr車 tambi谷n 19 goles y 14 asistencias en 31 encuentros).
Las t赤midas actuaciones de Bale se convierten en una p谷rdida l車gica de protagonismo. Zidane ya le arrebat車 la titularidad en favor de Isco y ahora Solari, pese a alg迆n volantazo como ante el Ajax, le ha relegado en las alineaciones por Vinicius y Lucas. Las prestaciones de ambos respecto al jugador gal谷s se ven reflejadas en los n迆meros pese a que Bale ha marcado m芍s goles (12 por los 7 de Vinicius y 4 de Lucas). El brasile?o lleva ocho asistencias m芍s. Bale sale mal parado en la comparaci車n directa de pases, remates, regates buenos, centros al 芍rea y recuperaciones. No lidera ning迆n apartado y su participaci車n en el juego es menor que la de Vinicius y Lucas. El perfil trabajador del extremo gallego le eleva en la estad赤stica de pases, recuperaciones y centros, mientras que el brasile?o regatea y remata m芍s (consultar gr芍fico inferior).
Vinicius se ha arrogado un rol que deber赤a haber reca赤do en Bale. El Madrid ataca m芍s por la izquierda (42% de las jugadas), la banda del brasile?o, que por la derecha (34%). Solari ha intentado reactivar a Bale situ芍ndolo en algunas situaciones en su h芍bitat natural. Lo hizo 15* ante el Alav谷s, en el Clas赤co y en el derbi, pero s車lo ante el Atl谷tico brill車 en el tramo final con el gol que sentenci車 el triunfo blanco (1-3). Otro medidor que representa la merma de pujanza del gal谷s es el c車mputo de pases de finalizaci車n (entrega al compa?ero en posici車n de gol o entrega al compa?ero que provoca un acercamiento del bal車n hacia la porter赤a rival, superando la l赤nea defensiva) que realiza por partido. Las medias de Vinicius y Lucas alcanzan 1,2 pases por partido; la de Bale se queda en 0,9. Peor a迆n resulta esta cifra si se coteja con las de cursos anteriores (1,4 en la 13-14, 1,5 en la 14-15, 2,3 en la 15-16, 1,2 en la 16-17 y 1,6 en la 17-18). En el Tottenham, antes de firmar por el Madrid, presumi車 de promediar 2,3 pases de finalizaci車n en la 2011-12 y en la 2012-13.
Los gr芍ficos y estad赤sticas ya referidas ponen el acento en la dudosa relevancia de Bale en el Madrid, incluso delatan una involuci車n que contrasta con la posici車n privilegiada que le hab赤a asignado la presidencia del club tras el adi車s de Cristiano. Su rendimiento no s車lo no ha mejorado, sino que se ha resentido. Bale sigue bajo la lupa.