Dos leyendas hablan. Dos leyendas del f¨²tbol. Uno de la Real Sociedad, Luis Miguel Arconada. Otro del Athletic Club, Jose ?ngel ¡®Txopo¡¯ Iribar. La Fundaci¨®n de la Real Sociedad les ha conseguido juntar en el segundo de sus actos del ¡®Korner Festibala¡¯ que organiza durante toda la semana en el Teatro Principal de San Sebasti¨¢n, en una iniciativa diferente que cumple su segundo a?o y con la que pretende unir el deporte y la cultura. ¡°Cuando me retir¨¦, tenia 37 a?os y sent¨ªa que todav¨ªa pod¨ªa dar m¨¢s, que pod¨ªa seguir jugando, pero sin decisiones que tomas. Hoy en d¨ªa los porteros tienen una vida profesional mucho mayor¡±, dice Iribar. Le escucha atento Arconada. Respeto mutuo entre ambos. Muchas paradas juntas, cientos, miles, millones. Paradas de leyenda.
Como las de Arconada, cuya grandeza aumenta cuando se recuerda que siempre jug¨® de txuri-urdin, a pesar de las tentaciones que le llegaban constantemente desde Madrid. Es famosa y recordada aquella portada hist¨®rica del Diario AS: ¡°?ltimo NO al Madrid¡±. Ese era el titular. El periodista Aitor Lagunas, de BeinSports le espetaba sorprendido si no se le pas¨® por la cabeza en alg¨²n momento. ¡°Cuando jugaba en la Real no aspiraba a m¨¢s, estaba muy a gusto aqu¨ª¡±, respond¨ªa tajante Arconada. Normal que luego se cantara en Atotxa el m¨ªtico c¨¢ntico ¡®No pasa nada, tenemos Arconada¡¯. Hasta el ¡®Txopo¡¯ se rinde a su leyenda. ¡°Recuerdo la primera vez que jugamos en contra. Me impresion¨® verle jugar. Aquel partido que termin¨® 5-0 tuvimos bastantes ocasiones de gol en la segunda parte y lo par¨® todo¡±, dec¨ªa divertido. ¡°Tranquilo, es que fue uno de mis mejores partidos¡±, le respondi¨® entre risas.?
La leyenda de Iribar no se queda atr¨¢s. Faltar¨ªa m¨¢s. Y m¨¢s cuando su relaci¨®n con el Derbi vasco se remonta al d¨ªa famoso en el que sali¨® portando la ikurri?a con Kotabarria, capit¨¢n de la Real. ¡°Antes de salir ten¨ªamos una mezcla de orgullo, miedo e incertidumbre de lo que pudiera pasar porque la Ikurri?a estaba prohibida, pero al salir y ver la explosi¨®n de j¨²bilo... Fue inolvidable¡±, recuerda. Luego, con la autoridad que les da su leyenda, pero siempre con mucha sutileza, hablaron de la cantera. De Zubieta a Lezama. De Lezama a Zubieta. En clave de porteros. Antes un cl¨¢sicos del vivero Vasco. Hoy en v¨ªas de extinci¨®n. ¡°Es muy dif¨ªcil sacar un portero de elite, y m¨¢s con los antecedentes que tenemos aqu¨ª. Trabajas igual que siempre en la cantera y no te sale un portero. Es cuesti¨®n de ¨¦pocas¡±, dice Arconada. Recoge el guante Iribar. ¡°Se trabaja con ellos desde las escuelas y aqu¨ª siempre hemos contado con gente a la que le gustaba entrenar a los porteros¡±. Pero el ejemplo de que los tiempos cambian en ese aspecto lo encontramos en las gradas. Siguiendo atentamente las palabras de Iribar y Arconada est¨¢n los dos porteros del primer equipo de la Real. Gero Rulli y Miguel Angel Moy¨¢. Ambos aprende de los mejores. Pero ninguno es salido de Zubieta. Los tiempos cambian, las leyendas perduran.
