Bale se ofrece para Tur¨ªn

Se presiente que ha llegado la hora del Madrid y comienza a haber m¨¢s reservas que plazas disponibles. Bale tambi¨¦n se ha echado a la calle pidiendo sitio. Lo hizo en Gran Canaria, en un partido western de los que suele dirigir, con acierto desigual, Paco J¨¦mez. El gal¨¦s, que lleva haciendo la goma toda la temporada, marc¨® dos goles y mostr¨® una enorme hiperactividad. Si se piden voluntario para Tur¨ªn, ¨¦l levant¨® la mano. Esa que no ha bajado nunca Lucas V¨¢zquez. Y s¨®lo hubo de lamentar la lesi¨®n de Nacho.

Medio Madrid se qued¨® en la capital y el otro medio, en el que figuraban nueve internacionales absolutos como titulares, se bast¨® para liquidar a Las Palmas, que si la pr¨®xima semana cae en el Ciudad de Valencia quedar¨¢ en manos del forense. Para ocupar el tiempo de las sucesivas esperas preeuropeas Zidane le ha puesto al equipo la tarea de cazar al Atl¨¦tico, un objetivo de andar por casa para evitar que el equipo caiga en un duermevela. Se lo ha comprado Bale, sobre cuyo Brexit lleva meses debati¨¦ndose con fundamento en el Bernab¨¦u y alrededores.

Sobre los atrevidos dibujos de Paco J¨¦mez ha pasado el gal¨¦s como Atila, hecho muy poco casual. Al Rayo del t¨¦cnico canario ya le meti¨® nueve goles en seis partidos. Bale vive del espacio y Paco J¨¦mez, al que le gustan los partidos de colores vivos, de toque y defensa adelantada, se los dio. Por ah¨ª se le empez¨® a ir el partido a Las Palmas. Fue en el segundo intento, producto de un pase fant¨¢stico de Modric, cuyas ausencias las siente el Madrid como una conmoci¨®n cerebral. Bale esprint¨® ante Macedo y cruz¨® un remate violento a la red. El lance y el partido confirmaron dos conclusiones: Bale es mejor en la izquierda que en ning¨²n otro lado y ha nacido para partidos abiertos.

Benzema no mejora

Las Palmas tuvo una salida de gran valor, a sabiendas de que no perder¨ªa la categor¨ªa en este partido. Si acaso lo ha hecho antes o lo har¨¢ despu¨¦s. Con Halilovic como arteria principal se dej¨® ir hasta tres ocasiones antes de que Bale echara el cierre al duelo. Luego el Madrid ya no toler¨® nada y le castig¨® todas las infracciones administrativas de su centro del campo. Modric est¨¢ en primavera, Lucas contagi¨® su energ¨ªa y su constante iniciativa (le hicieron su sexto penalti desde que lleg¨® Zidane), Asensio fue genio inconstante, Vallejo ofreci¨® solidez y Benzema meti¨® un penalti, su ¨²ltimo refugio en las duras: dos de sus tres goles del a?o llegaron de pena m¨¢xima. Luego perdon¨® mucho, pero es inmune al error. La ¨²nica intriga en torno a ¨¦l es qu¨¦ diez le acompa?ar¨¢n en Tur¨ªn.

J¨¦mez hizo un ¨²ltimo intento de agitar el partido con los cambios y la apelaci¨®n a los dos puntas. Pero un penalti a Bale que ¨¦l mismo transform¨® a vuelta de vestuario adelant¨® el final anunciado. Ah¨ª empez¨® el partido de Tur¨ªn. Se fueron Casemiro y Modric y se quedaron los dem¨¢s (Lucas, Asensio, Bale...), indicio de que Isco tendr¨¢ recompensa en la Champions. Todos llegan a punto a la hora de la verdad.