Santamar¨ªa, el "maestro" de los entrenadores del Espanyol
El club le rinde tributo al t¨¦cnico que ha dirigido m¨¢s partidos. "Al Espanyol le falta un punto para estar arriba del todo", dijo. Quique S¨¢nchez Flores se emociona.
Del ingl¨¦s John Greenwell, que cobraba 12.000 pesetas al mes en 1928, a Quique S¨¢nchez Flores han pasado otros 58 entrenadores por la historia del Espanyol en la Liga. T¨¦cnicos ef¨ªmeros, otros que han vivido m¨¢s de una etapa (como Javier Clemente, presente ayer), pero ninguno como el uruguayo Jos¨¦ Emilio Santamar¨ªa. Lleg¨® al Espanyol en 1971 y se fue en 1978, con 252 partidos dirigidos, un tercer puesto (72-73), dos participaciones en la UEFA y dos triunfos en los m¨ªticos derbis de Sarri¨¤. Esa es parte del legado del ¡°maestro¡±, que esta tarde fue homenajeado por todo lo alto en la presentaci¨®n de la Galer¨ªa de Entrenadores en el auditorio de Cornell¨¤-El Prat, un paso m¨¢s para convertir el estadio ¡°en un museo¡±.
Santamar¨ªa, que este a?o cumplir¨¢ 88 a?os, no sal¨ªa de su asombro ante el homenaje que le brind¨® el club, bien dirigido por la iron¨ªa de Sergi Mas. ¡°Ten¨ªa que haber ido antes al m¨¦dico. No s¨¦ si el reloj aguantar¨¢. El club no me deb¨ªa nada. Esto es demasiado. Imposible de imaginar¡±, coment¨®.?¡°Viv¨ªa al lado del campo, en la misma Avenida Sarri¨¤, a 100 metros de la famosa gasolinera. Le hab¨ªa pedido al club que compraran 100 balones para el primer d¨ªa de entrenamiento. La alegr¨ªa de los chicos fue enorme, los ve¨ªa satisfechos. Pepe Mauri fue mi colaborador y me llenaba de amistades. Creo que al Espanyol le falta un punto m¨¢s para estar arriba del todo¡±, proclam¨® con sus jugadores delante.
Uno de ellos tambi¨¦n fue luego entrenador: Paco Flores. ¡°No di lo que pude por excesivo nerviosismo. Me qued¨® esa r¨¦mora, pero no pude. Como an¨¦cdota os contar¨¦ una. Perd¨ªamos 3-0 en Valencia y el t¨¦cnico me dijo que saliera. Hab¨ªa un lateral del Valencia que se hab¨ªa pasado el partido dando patadas. A m¨ª solo me dio una. Luego le solt¨¦ un pu?etazo, me sacaron roja y me expulsaron¡±, nadie pudo reprimir las carcajadas.
Ni Camacho, ni Clemente, ni Quique, ni tampoco Constantin Galca, Juanjo D¨ªaz y Jaume Sabat¨¦, los otros t¨¦cnicos presentes.No solo hubo entrenadores, exjugadores pericos como Ra¨²l Tamudo, ?ngel Morales, Osorio, Ochoa, Pepin, Molinos y un largo etc¨¦tera no quisieron perd¨¦rselo. Tampoco falt¨® la Fundaci¨®n, propulsara de estas iniciativas, ni Ramon Robert, que acab¨® su exposici¨®n con un ¨®rdago: ¡°En la ciudad hay un monstruo y nosotros somos un gran club. En la vida real, como en las pel¨ªculas, el bueno siempre gana, y al final acabaremos ganando¡±. Y solt¨® una broma. ¡°Quique, ponte las pilas¡±.
Quique y su d¨ªa de emociones
Quique S¨¢nchez Flores se lo pas¨® tan bien con las iron¨ªas de Sergi Mas que se le escap¨® la risa en m¨¢s de una ocasi¨®n, como tambi¨¦n estuvieron a punto de saltarse las l¨¢grimas. Al actual t¨¦cnico blanquiazul le une un lazo con Jos¨¦ Emilio Santamar¨ªa desconocido hasta la fecha para el gran p¨²blico. ¡°Siento reverencia por ¨¦l y por su mujer Nora, que es mi madrina. Mi familia es ¨ªntima de la suya y tambi¨¦n de la de Di St¨¦fano. Es amigo y compa?ero de mi padre. Estoy tembloroso. Jos¨¦ Emilio se lo merece. Todos venimos detr¨¢s de ¨¦l, porque abri¨® el camino¡±, coment¨® durante el acto.
El t¨¦cnico reconoci¨® que podr¨ªa alcanzar lo de Santamar¨ªa porque no es descabellado pensar que siga aqu¨ª cinco a?os: ¡°El Espanyol es un club donde se trabaja a gusto y esas cosas no se pueden comparar con nada. Ojal¨¢ nuestro crecimiento vaya de la mano¡±.
Al margen del acto, Quique, sensibilizado con el Espanyol, ser¨¢ uno de los protagonistas hoy en la presentaci¨®n del libro Hist¨°ries en Blanc i Blau. El entrenador reflexiona sobre ser del equipo perico. ¡°Qu¨¦ gran aventura la del perico, qu¨¦ magnifica historia contada y todav¨ªa por desatar. Atr¨¢s no queda nada, todo lo atraemos aqu¨ª. El s¨ªmbolo de Sarri¨¤, patria de siempre, los trofeos levantados, los sue?os perdidos, las nostalgias no superadas, los goles encendidos, las ausencias tan presentes, Dani Jarque, nuestro gu¨ªa¡±.
Y prosigue. ¡°Este libro ocupa un espacio in¨¦dito entre todas las excelentes historias ya recogidas acerca del Espanyol y se debe a la multiplicaci¨®n de coautores que ilustran cada uno de los relato¡±, mientras que se adelantra en la fisonom¨ªa del perico. ¡°El privilegio del perico es su indomable personalidad, su sentimiento de afiliaci¨®n m¨¢s all¨¢ de lo que propongan los tiempos¡±.?
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