Liga BBVA | Athletic 1 - Valencia 2
Joaqu赤n gan車 a Toquero
El Athletic no sentenci車 y el Valencia impuso su clase.
El Valencia remont車 bajo el aguacero gracias a que tuvo la paciencia suficiente para explotar el desgaste de un Athletic que perfectamente pudo haber sentenciado antes del tramo final. Un empate acaso hubiera premiado con equidad a todos, pero la calidad se impuso a la generosidad.
La diferencia, al margen de que hubiera lances rese?ables para todos los gustos en ambas direcciones (ocasiones, penaltis, amarillas y no rojas, etc.) estuvo en que mientras Joaqu赤n fue a m芍s, Toquero se march車 fundido. Ellos representan dos conceptos, dos ideas futbol赤sticas que ayer se cruzaron para ofrecer un espect芍culo intenso que se decant車 por el que atesora m芍s clase.
De entrada, las advertencias de Emery cayeron en saco roto, su gente tard車 un rato en ponerse a la altura del rival en garra y concentraci車n. Esa falta de aplicaci車n se tradujo en la ventaja del Athletic, tras un primer cuarto de hora disputado a dos velocidades del todo incomparables.
Toma y daca.
El paradigma de la propuesta local volvi車 a ser Toquero, cuya brega retrat車 a los centrales y a Mathieu. El contagioso estilo del calvo hizo que incluso el lateral debutante, De Marcos, se animase a ir hasta la l赤nea de fondo. Presi車n, robo, carrera, pase al hueco y centro, todo muy simple y en absoluto nuevo, pero suficiente para que los ches se viesen jugando cuesta arriba.
Entre Mata y Joaqu赤n dieron la primera se?al de vida, aunque el extremo quiso rizar el rizo ante Iraizoz. Cuando estos dos ligaron con Banega, que fue a ratos, el Valencia llev車 la inquietud a la grada. Y el Athletic tom車 nota, se repleg車 y sigui車 viviendo de la correa de Toquero para descongestionar de vez en cuando.
Arbitro y linier se comieron una mano de Ekiza al cortar un centro raso de Bruno. Soldado se desga?it車 reclamando, en balde. Para que el primer tiempo no dejase mal regusto en la parroquia de La Catedral, la en谷sima carrera de Toquero hizo cantar gol a la parroquia, pero la volea de David L車pez toc車 la red por fuera.
Luego, agarrado a la prodigiosa cintura de Joaqu赤n, el Valencia redobl車 su apuesta ofensiva, lo que le expuso a sufrir con las cabalgadas de Muniain y Toquero, hasta que el gas se acab車. Los roles estaban cada vez mejor definidos cuando Llorente casi liquida la discusi車n: lo evit車 la madera.
Emery sac車 a Jonas, quer赤a forzar y aprovechar que su posesi車n se multiplicaba y Joaqu赤n fabric車 un joya que supuso el empate. Entonces entr車 Tino Costa para variar el cat芍logo ofensivo y result車: la primera la sac車 Iraizoz, no la segunda y Jonas reba?車. Otro de refresco, Gabilondo, pudo batir a Guaita dos veces. El Valencia, mal que bien, supo aguantar el coletazo de un Athletic que nunca se rinde.