Yeste no tiene motivos para celebrar su golazo

En paralelo con el adi¨®s del Athletic a Europa, en el seno del equipo se han ido cociendo otras despedidas entre las que se encuentra la de Fran Yeste. Mientras la directiva permanece aferrada al silencio, Joaqu¨ªn Caparr¨®s en sus declaraciones trata de pasar de puntillas por el asunto y la temporada se halla a punto de bajar la persiana, el zurdo ofrece sus ¨²ltimos servicios como rojiblanco y, resignado, valora el inter¨¦s de equipos de diversa procedencia que ha ido llegando a su conocimiento.

El deseo de Yeste de continuar vinculado al ¨²nico club que ha conocido choca frontalmente con las intenciones de Garc¨ªa Macua. Los cuatro meses transcurridos desde que el jugador presentase en Ibaigane una contraoferta a la propuesta de renovaci¨®n a la baja que le hiciera el Athletic, no dejan resquicio a una posible marcha atr¨¢s. Todav¨ªa hace un par de semanas, Yeste manifest¨® que no hab¨ªa perdido la esperanza de seguir en Bilbao, sin embargo tal predisposici¨®n ha dejado de tener sentido dado que contin¨²a sin tener noticia alguna de la otra parte cuando la plantilla ya mira de reojo a las vacaciones.

Garc¨ªa Macua ni siquiera se ha dignado a ofrecer una explicaci¨®n a Icon Sport, la firma que representa al futbolista, sobre los motivos que le indujeron a interrumpir unilateralmente los contactos y a guarecerse tras un hermetismo roto ¨²nicamente a trav¨¦s de una entrevista que concedi¨® a un diario bilbaino.

El presidente no ha cumplido los sucesivos compromisos adquiridos en tal sentido, ni en el plano oficial ni en el personal, de lo cual se deduce que tales promesas no eran sino maniobras dilatorias para dejar que el asunto se enfriase y ganar tiempo.

A la vista de ello, Yeste ha optado por la discreci¨®n, centr¨¢ndose en el aspecto deportivo. Problemas f¨ªsicos han condicionado su participaci¨®n en los dos ¨²ltimos meses. Ha intervenido en la mayor¨ªa de los encuentros, aunque normalmente ejerciendo de suplente y saliendo en las segundas partes.

Sobresaliente.

En este per¨ªodo Yeste tuvo incluso que apechugar en una cita concreta con la reacci¨®n adversa de parte de la grada de San Mam¨¦s. Ello dio pie a la r¨¦plica de varios compa?eros que subrayaron su calidad y abogaron por su continuidad en el equipo.

Los pitos se transformaron en aplausos en otro partido en casa, un reconocimiento que el jugador no tuvo la oportunidad de percibir el pasado s¨¢bado, cuando volvi¨® a ofrecer una de sus mejores versiones con el Real Madrid enfrente.

Yeste complet¨® una actuaci¨®n sobresaliente en el Bernab¨¦u, coronada con un gol espectacular. Protagoniz¨® una acci¨®n individual en la que burl¨® a cinco rivales antes de superar a Casillas y enmudecer a la parroquia blanca.

Pese a la belleza de la jugada, result¨® llamativa la no celebraci¨®n de la misma. Mientras los jugadores, primero Gurpegi y luego los dem¨¢s, le abrazaban alborozados, ¨¦l se dirigi¨® hacia un c¨®rner sin mover un m¨²sculo de su rostro ni realizar gesto alguno con los brazos. Semejante inexpresividad invitaba a interpretar que cuanto ha vivido en estos cuatro meses pesaba demasiado en su ¨¢nimo, de modo que prefiri¨® no aprovechar su momento de gloria para reivindicarse.

A expensas de que ¨¦l mismo se exprese, en los pr¨®ximos d¨ªas empezar¨¢n a sonar los posibles destinos de Yeste, todav¨ªa el '10' del Athletic.