Un micro abierto le juega una mala pasada a Belén Esteban: “Tío, esto no me gusta”

Durante los últimos meses, 'Sálvame' ha adoptado una nueva estrategia con la cual, cada tarde, un nuevo colaborador toma las riendas del programa durante la primera hora de emisión, en lo que se conoce como 'Sálvame Limón'. Una vez entrados en el 'Sálvame Naranja', Jorge Javier Vázquez aparece en pantalla para continuar con las horas restantes hasta las 21:00 horas, momento en el que comienza 'Informativos Telecinco'. La última en sumarse al rol de presentadora ha sido Belén Esteban, aunque parece que a la Princesa del Pueblo no le ha hecho demasiada gracia.

SI bien la de San Blas hizo creer durante los primeros minutos que estaba encantada de ejercer como presentadora de 'Sálvame Limón', un micro abierto le jugó una mala pasada dejando al descubierto su verdadera opinión al respecto. "Buenas tardes. Ahí lo están viendo. Con un look juvenil, un ba?ador fluorescente y una gorra de rapero, el rey Juan Carlos I en una barbacoa con el hijo de Corinna Larsen", comienza diciendo Belén Esteban en una tarde que, a priori, comenzaba con total normalidad.

La colaboradora de Telecinco estaba nerviosa y se equivocó a la hora de leer el famoso 'cue'. "Ay perdón. Quién tiene boca, se equivoca" decía la Princesa del Pueblo tras un error de lectura. Minutos más tarde, Belén Esteban ya se movía como pez en el agua por el plató mientras abordaban el tema de la supuesta crisis matrimonial entre Antonio David Flores y Olga Moreno tras descubrirse una serie de infidelidades por parte del ex yerno de Rocío Jurado. Después de una hora presentando, aparecía en el plató Jorge Javier Vázquez para recoger el testigo.

Fue precisamente en la incorporación del presentador que se produjo el momento épico de la tarde. Belén Esteban le confesaba en petit comité, o eso creía ella, que no se sentía cómoda como presentadora. "Tío, no me gusta. Yo no quiero hacer de presentadora. Lo paso fatal. He leído fatal", decía la de San Blas sin percatarse de que su micrófono estaba abierto y que todos los espectadores habían escuchado sus palabras.