Fortfast, que ya lleva una larga colecci¨®n de v¨ªdeos de an¨¦cdotas sobre trabajadores, entrevista esta vez a aquellos que casi todos hemos molestado alguna vez: los trabajadores de discotecas. Como era de esperar, porteros, responsables de seguridad y camareros coinciden en lo mismo: no todos tienen la dureza suficiente para lidiar con borrachos.

A pesar de que muchas de las experiencias que nos cuentan sean inevitablemente graciosas, es realmente duro saber las situaciones desagradables a las que tienen que enfrentarse cada noche estos trabajadores. Para empezar, una chica cuenta su experiencia como camarera y las decenas de situaciones machistas a las que tiene que enfrentarse: chicos que le lanzan cumplidos hasta el punto de la pesadez, que la persiguen e incluso que afirman que van a esperarle en la salida y van a "violarle".

Por otro lado, los porteros y los vigilantes de seguridad cuentan las situaciones de violencia que han vivido por parte de borrachos que se pelean entre ellos o que intentan ponerse violentos con los mismos trabajadores. Seg¨²n cuenta uno de ellos, los porteros generalmente han tenido que someterse a un duro entrenamiento. "Esas personas tienen que estar muy preparadas mentalmente para lo que se les viene encima", reconoce.