La semana pasada ve¨ªamos como Didac Ribot, un youtuber, conquistaba a sus suscriptores con un v¨ªdeo tan sencillo como ocurrente: el joven no ten¨ªa ninguna de verg¨¹enza para ir a la playa, tumbarse en toallas ajenas y, minutos despu¨¦s, fingir que se hab¨ªa equivocado soltando comentarios como: "?Marisol? Uy, me he equivocado, perd¨®n". Y claro, las reacciones de la gente oscilaban entre la incredulidad y la risa.

Adem¨¢s de este v¨ªdeo, vimos que el youtuber ten¨ªa otros con c¨¢mara oculta en los que aparec¨ªa como un ejecutivo sin pantalones o soltando a cada chica que ve¨ªa por la calle "buenos d¨ªas, se?oritas". Esta vez ha apostado por triplicar su edad: ahora es un abuelo gru?¨®n.

Acompa?ado de un tal Jes¨²s (Tiparraco en Youtube) que resulta ser su padre, Didac Ribot se pasea por la ciudad en silla de ruedas soltando insultos, exigiendo Coca-Cola y cerveza en el supermercado y suplicando a su hijo que le deje comer una hamburguesa del McDonald's. Los viandantes entran en juego cuando Jes¨²s les pregunta d¨®nde hay un supermercado o decide dejar que cuiden al abuelo "unos minutos".

Uno de los mejores momentos del que adem¨¢s han hecho eco las redes sociales es cuando una joven aconseja al abuelo que se compre unos pantalones nuevos porque los suyos est¨¢n un poco rotos... Pero la chica no lleva unos en buen estado, precisamente. El precio de las modas.