En primer lugar y antes de arrancar me gustar¨ªa dejar claro que el botell¨®n siempre ha existido. Por mucho que nuestros padres hayan dicho por activa y por pasiva que no lo hac¨ªan, lo hac¨ªan. La diferencia resid¨ªa en que no estaban representados por extremistas como el protagonista de 'Pim pam toma Lacasitos' y su consumo era m¨¢s responsable y menos precoz. Pero exist¨ªa.

M¨¢s de una vez , los medios de comunicaci¨®n se han referido a los adolescentes de los 2000 como la generaci¨®n del botell¨®n. Sin embargo, ahora que bebemos menos y nos hemos convertido en consumidores potenciales, nos llaman millennials para que no nos ofendamos.

Como nuevo grupo de consumo a tener en cuenta, hoy ya tenemos la cabeza m¨¢s asentada y no bebemos hasta no saber qu¨¦ portal es el nuestro. El botell¨®n poco a poco ha ido ocupando menos d¨ªas en el calendario y las carreras que hacemos por postureo, m¨¢s. El footing (como nacidos en los 90 deber¨ªamos recuperar este anglicismo) es el principal culpable junto al resto de h¨¢bitos que enumeramos a continuaci¨®n:

1. Existe Netflix y HBO

?Para qu¨¦ salir a beber en la calle cuando puedes estar en casa calentito devorando 'House of cards' o poni¨¦ndote al d¨ªa con 'Juego de Tronos'?

2. Las resacas ya no son lo que eran a los 17

Si beber tres copas y un chupito una noche te supone al d¨ªa siguiente un dolor de cabeza digno de llamarse migra?a, un mareo desestabilizador y v¨®mitos, debes dejar los destilados. Asume que salir tres d¨ªas seguidos y mezclar distintos tipos de bebidas es una actividad de riesgo y solo apta para h¨ªgados en proceso de cirrosis y adolescentes inconscientes. Es la vida, no pasa nada.

3. El balconing da miedo y los anuncios de cerveza han hecho mucho da?o

Uno ve lo que hace el alcohol en los guiris de Salou y, claro, coge miedo. Si a un temor a ese nivel, le sumas los anuncios id¨ªlicos de cervezas donde todos est¨¢n cual perdices bailando en Formentera, el modelo mental de vacaciones y las expectativas cambian.

4. Dicen que el veganismo mola

No comer animales y ponerte como las grecas es compatible. Pero, ser vegano suele ir acompa?ado de #hashtags como #healthy, #ecofriendly y #foodporn y, no nos enga?emos, ser foodporner con resaca no solo es un sufrimiento, sino una p¨¦rdida de tiempo y de dinero.

5. Existe Tinder

Los borrachos sociales est¨¢n de suerte. Ya no es necesario hipotecar el h¨ªgado y los ri?ones para ligar una noche. Ahora, existen aplicaciones que te ofrecen un cat¨¢logo de hombres y mujeres en edad de casamiento para que t¨² desde el sof¨¢ puedas entablar conversaci¨®n con qui¨¦n m¨¢s te guste.

6. Vives solo, ergo, no existe la necesidad de beber en la calle

Tienes un maravilloso piso de alquiler (todo lo que tenga ventanas entra dentro de este adjetivo) y puedes hacer fiestas en casa porque nunca est¨¢n tus padres. Los padres en este contexto son como los reyes: no existen. Unas cervezas, unos nachos y varias partidas al Sing star superan con creces cualquier botell¨®n.

7. Las ofertas de cubos de cerveza son realmente competitivas

?Para qu¨¦ gastarte los dineros en el pack 'botellonil' si las calles est¨¢n repletas de terrazas con opciones para compartir unas cervezas con amigos? ?Hay que apoyar el comercio local!

8. Dicen que ser healthy es el nuevo ser influencer

Si vas de sano como mucho puedes tomarte un Alvari?o con un pez un domingo. Si te comes una vaca, una copita de Ribera del Duero. Pero ya est¨¢. Ni chupito de hierbas, ni licor caf¨¦, ni n¨¢. Si eres healthy, eres healthy con todo lo que el hashtag implica.

9. Salir de verm¨² no se considera botell¨®n

Es una actividad de padres y como en el vocabulario y registro de an¨¦cdotas paternales el botell¨®n no existe, tomarte 3 Izaguirres jam¨¢s ser¨¢ considerado botell¨®n.

10. Beber con vino y siestear despu¨¦s es GLORIA BENDITA Y AM?N

Cocinarte unos gnocchi al pesto mientras te tomas una copa de vino. Comerte los gnocchis con otra copa de vino y digerir los gnocchis con una m¨¢s entra dentro del comportamiento adulto alejado de la pr¨¢ctica 'botellonil'. La sobremesa que viene despu¨¦s, en la que no eres capaz de pronunciar la palabra gnocchi porque vas un poco piripi, entra dentro del patr¨®n adulto si te echas a dormir la siesta.