Si naciste entre los ochenta y los medio-noventas, uno de tus sue?os parece hacerse realidad. Oliver y Benji volver¨¢n a nuestras pantallas en 2018, en el a?o del Mundial de Rusia, con nuevos cap¨ªtulos. As¨ª lo ha confirmado el productor y ¡®padre¡¯ de los talentosos futbolistas nipones, Yoichi Takahashi. En 1981 los dibuj¨® y en 1983 ya estaban en la peque?a pantalla. Resistieron m¨¢s de dos centenares de cap¨ªtulos, a base de jugadas acrob¨¢ticas, reflexiones personales antes de disparar y campos ¡®king-size¡¯. La noticia ha asaltado a los medios espa?oles con especial virulencia. Normal, nos gustaban m¨¢s que un partido en el asilo a los directivos del AC Milan.

Ha pasado por varias cadenas de la parrilla espa?ola, desde Telecinco a Antena 3. La audiencia siempre respald¨® las aventuras de Oliver, Tsubasa Ozora en el anime japon¨¦s. Guardamos grandes recuerdos de la serie, como el comienzo del romance de Oliver con el bal¨®n: le salv¨® la vida cuando ten¨ªa cinco a?os. O donde contin¨²a su carrera cuando acaba la serie original, el Bar?a. Benji Price termin¨® como portero del Hamburgo y Mark Lenders, como estrella en Tur¨ªn. Sin embargo, otras muchas cuestiones son dignas de ser repasadas en busca de respuestas.

?Continuar¨¢ el efecto Pro Evolution Soccer?

En Oliver y Benji suced¨ªa algo parecido al videojuego Pro Evolution Soccer. Todo el que haya jugado a este videojuego sabe c¨®mo se transformaban los nombres de equipos y jugadores debido a la ausencia de derechos¡­ y el deseo de contar con todos los conjuntos posibles. As¨ª, dependiendo de la versi¨®n, encontr¨¢bamos al Chamart¨ªn (Real Madrid) o al North London (Arsenal), pero tambi¨¦n a Roberto Larcos (Roberto Carlos), Ravoldi (Rivaldo) o Palm (Pel¨¦).

De la misma forma, la serie cambiaba el nombre a los equipos en los que jugaban los protagonistas. Todo empez¨® con el Sao Paulo, el primer equipo de Oliver lejos de Jap¨®n. Era el Brancos. Despu¨¦s fichar¨ªa por el Catalu?a, que hace las veces del Bar?a. Asimismo, el Valencia es el San Jos¨¦. La Juventus es el Piemonte, el Milan es el Calabria, el Bayern de M¨²nich es el Rotburg¡­

?Persistir¨¢n los parecidos evidentes?

En la misma l¨ªnea, las referencias de jugadores de la ficci¨®n a futbolistas reales eran constantes. Oliver Atom se parece al nip¨®n Kazuyoshi Miura, muy lejos de su nivel en la serie. alem¨¢n Karl Heinz Rummenige era Karl Heinz Shneider. Maradona era Juan D¨ªaz, Valdano era Alan Pascal, Rivaul era Rivaldo, Willem Arminius era el holand¨¦s ?dgar Davids, Gino Hern¨¢ndez era el italiano Gianluigi Buffon¡­ Y aunque muchos se?alan al mentor de Oliver, Roberto Sedinho, como Socrates, en Epik nos recuerda m¨¢s a Luis Enrique.

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?Lleg¨® a ganar Jap¨®n el Mundial gracias a Oliver?

No. La edad m¨¢xima que Oliver alcanza en la serie son 22 a?os. Empieza la historia con tan solo 11, cuando disputa torneos a nivel regional y nacional en Jap¨®n. Se embolsa gran parte de esos t¨ªtulos. Cuando llega a la categor¨ªa juvenil, logra su primer torneo internacional para Jap¨®n. Se impone en el Mundial sub-16 junto a los que temporadas pasadas eran sus rivales. En la final, vencen a Alemania. Tras este hito, la serie se detiene durante seis a?os, de 1995 a 2001.

Un a?o despu¨¦s, tendr¨ªa lugar el Mundial de Corea y Jap¨®n, en el que atracaron a Espa?a sin compasi¨®n. En la serie, Oliver juega en Brasil, en las filas del Sao Paulo. Tras una ¨¦poca en la tierra de su mentor, Sedinho, pone rumbo a Barcelona. En el ¨²ltimo cap¨ªtulo de la serie, emitido en verano del 2002, Oliver debuta con el Bar?a ante el Valencia.

Entra en el campo sustituyendo a la estrella blaugrana y termina haciendo el gol del empate. Mientras tanto, podemos ver a Mark Lenders y a Benji Price triunfando en sus respectivos equipos, Juventus y Hamburgo. El cap¨ªtulo termina con Oliver y sus compa?eros nipones iniciando un duelo contra Brasil en el estadio de Yokohama, correspondiente al Mundial 2002.

?Medir¨¢ el campo tanto como en el pasado?

Seg¨²n un estudio de un estudiante japon¨¦s publicado en 2013, los campos de f¨²tbol de Oliver y Benji llegaban a medir hasta 18 kil¨®metros. Un d¨ªa sin pan en toda regla. Y no solo eso. Oliver llegaba a alcanzar los 150 kil¨®metros por hora. Esto se justifica en la inmensa cantidad de tiempo que los jugadores tardaban en alcanzar el ¨¢rea contraria. En ocasiones, incluso se apreciaba la superficie esf¨¦rica de la tierra (??). Esta extra?a situaci¨®n escond¨ªa motivos narrativos: cuanto m¨¢s tarden en llegar de porter¨ªa a porter¨ªa, m¨¢s pueden pensar en sus cosas.

?Qu¨¦ futbolista actual ser¨ªa Oliver?

El creador de la serie, el mismo que nos ha puesto la miel en los labios con vistas a 2018, lo reconoci¨® en una entrevista: Andr¨¦s Iniesta. El japon¨¦s tambi¨¦n actuaba como centrocampista ofensivo. El creador de la serie es un reconocido seguidor del Bar?a, habitual en el Camp Nou. Quiz¨¢ ese el motivo por el que Atom acaba de blaugrana. Tambi¨¦n es f¨¢cil relacionar a Mark Lenders con Cristiano Ronaldo. ?Qui¨¦n ser¨ªan los gemelos Derrick, Benji Benji o Tom Baker?

?Y qu¨¦ hay de las teor¨ªas de la conspiraci¨®n?

Aqu¨ª hay barra libra. La historia se bifurca en dos direcciones, en funci¨®n si hablamos del ¡®manga¡¯ (c¨®mic) o del ¡®anime¡¯ (serie). Sea como sea, Internet disfruta destacando las banderas franquistas que ondean en el Camp Nou en el duelo de Oliver ante el Real Madrid o el final en el que no tiene piernas y todo ha sido un sue?o (al m¨¢s puro estilo Serrano). S¨ª hay otros datos curiosos que podemos detallar: Oliver se acaba casando con su amiga de la infancia, Patty, y su apellido nip¨®n, ¡®Tsubasa¡¯, significa ¡®alas¡¯ y ¡®cielo¡¯. Takahashi ha desarrollado otros proyectos parecidos que tambi¨¦n han gozado de cierto ¨¦xito, como ¡®Hungry Heart Wild Striker¡¯.

?Volveremos a ver las jugadas m¨ªticas?

Son la esencia de Oliver y Benji. El f¨²tbol al uso no era suficiente. En ¡®Campeones¡¯ se alcanzaba otra dimensi¨®n. En ella, para marcar se firmaban acrobacias dignas del Circo del Sol. Los hermanos Derrick eran, sin duda, los m¨¢s originales. Eran los autores de la catapulta infernal y el tiro combinado. Oliver y Tom tambi¨¦n lo ejecutaron. En la vida real, algunos futbolistas lo han intentado con ¨¦xito cuestionable.

Tambi¨¦n resulta memorable el tiro del tigre de Mark Lenders, la parada impuls¨¢ndose en el palo de Ed Warner o la ¡®follaseca¡¯ (tiro con chanfle) de Oliver.

Roberto Sedinho, ese brasile?o retirado que vive en Jap¨®n y guarda un extremado parecido con Luis Enrique, le ense?¨® esa t¨¦cnica al joven Atom ?Cu¨¢l era tu favorito?

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