Si vas al mercado de tu barrio, afina el o¨ªdo. Te morir¨¢s de la risa con algunos oradores, de la fruter¨ªa al ¨¢rea bragas y fajas. Lo mismo pasa, con id¨¦ntico tono ca?¨ª, en el mercado de fichajes del f¨²tbol. Solo hay que afinar un poco la memoria para recordar an¨¦cdotas m¨¢s graciosas que un c¨®ctel de Lepe y Jaimito. La salsa del f¨²tbol veraniego no es la Eurocopa o los Juegos Ol¨ªmpicos; son los traspasos.

El falso primo de Weah

Imaginad que sois el entrenador del Sporting de Gij¨®n, uno de los equipos casi descendidos la pasada temporada. En el mercado invernal, os llama Lionel Messi y os ofrece la soluci¨®n a vuestros problemas: ¡°Fichad a mi primo¡±. Hac¨¦is caso al Bal¨®n de Oro argentino e incorporais a su familiar. Al verle en sus primeros minutos en el campo, os sent¨ªs como el primero que pinch¨® en un ¡®banner¡¯ tipo ¡°gana mil euros solo con entrar en esta web¡±.

Eso le sucedi¨® al entrenador del Southampton, el m¨ªtico ¡®red¡¯ Graeme Souness. Los ¡®Saints¡¯ sufr¨ªan en la zona baja de la Premier League cuando, como por arte de magia, George Weah se saca a una estrella a precio de saldo de la chistera. El entonces jugador del AC Milan y Bal¨®n de Oro llama al entrenador escoc¨¦s para ofrecerle los servicios de su primo, Ali Dia. Se supon¨ªa que hab¨ªan coincidido en la selecci¨®n y en el PSG. Le vendi¨® como un ¡®futbolista-caviar¡¯, pero result¨® ser un trozo de chopped.

No era su primo. Y el que llam¨® tampoco era Weah, sino un imitador que accedi¨® al tel¨¦fono de Souness. Los seguidores del Southampton lo descubrieron el 23 de noviembre de 1996. El ¡®crack¡¯ del equipo, Matt Le Tissier cay¨® lesionado en el minuto 36. El entrenador dio entrada al supuesto primo, ¡°que corr¨ªa por la cancha como Bambi sobre hielo; fue muy vergonzoso verlo¡±, asegur¨® Le Tissier. Abandon¨® el campo en el minuto 85 y jam¨¢s volvi¨® a vestir de rojiblanco. Ah¨ª termin¨® su fugaz historia balomp¨¦dica.

Javi Mart¨ªnez salt¨® la valla de su antiguo club

Si en tu ¨²ltimo d¨ªa de trabajo te dejas la cartera en la taquilla, ?qu¨¦ haces? A)Pides a un compa?ero que la coja, qued¨¢is para tomar una ca?a y te la devuelve B) Vas al d¨ªa siguiente y la coges t¨² mismo C) Te cuelas ese mismo d¨ªa a lo Grand Theft Auto. Javi Mart¨ªnez, futbolista del Athletic de Bilbao hasta el verano de 2012, opt¨® por la ¡®c¡¯, seg¨²n la entidad vasca.

El Bayern de M¨²nich de Guardiola pag¨® la cl¨¢usula de rescisi¨®n del navarro para hacerse con sus servicios. Seg¨²n el club vasco, Javi Mart¨ªnez entr¨® sin permiso en la ciudad deportiva de los rojiblancos, Lezama, para recoger las pertenencias que le quedaban en su taquilla. El informe de la empresa de seguridad sobre el incidente recog¨ªa que "un individuo salt¨® la valla exterior" a las 00:15 horas. Entonces, fue reducido por uno de los guardias.

El jugador cuenta otra historia los hechos. En declaraciones a El Larguero de la Cadena SER, asegur¨® que llam¨® al timbre durante quince minutos a 23:15 de la noche. Como nadie le contestaba, entr¨® por una valla que sab¨ªa que estaba rota. Mart¨ªnez asegura que el guardia no le redujo, sino que le dej¨® acceder a su taquilla.

Mista, tras llegar al Atleti: ¡°A Cibeles¡±

Fue en desliz¡­ pero qu¨¦ desliz. El delantero Miguel ?ngel Ferrer, m¨¢s conocido como Mista, lleg¨® al Atl¨¦tico de Madrid en verano del 2006, despu¨¦s de cinco exitosos a?os en Valencia. En su presentaci¨®n, quiz¨¢ v¨ªctima de los nervios, pronunci¨® a la diosa innombrable. ¡°?Sue?os? Yo creo que ir a Cibeles¡­ Digo a Cibeles, perd¨®n, a Neptuno. Disculpen, diculpen (risas)¡±. Solo marc¨® seis goles vestido de rojiblanco.

Pato Sosa se cae en la presentaci¨®n

Marcelo Fabi¨¢n Sosa lleg¨® al Atl¨¦tico de Madrid en el a?o 2005. Jam¨¢s destac¨® por su juego, plano y tosco, pero los colchoneros nunca le olvidar¨¢n por dos motivos. Primero, porque os¨® a despeinar a Cristiano Ronaldo (ya en Pe?arol), y segundo, por su rid¨ªcula presentaci¨®n de rojiblanco. Su resbal¨®n en el c¨¦sped del Vicente Calder¨®n desat¨® las carcajadas de los periodistas presentes. El ucraniano Konoplyanka le imit¨® con sorna al presentarse como sevillista.

Ayala el ¡®breve¡¯ en Villarreal

?C¨®mo olvidar al central con muelles? El zaguero argentino era bajito, pero saltaba como una rana para despejar cualquier bal¨®n que asomaba en el ¨¢rea del Valencia. Igual de r¨¢pido salt¨® del Villarreal, equipo por el que firm¨® tras terminar su contrato con los ch¨¦s, al Zaragoza, entonces acaudalado.

El uno de julio empez¨® su contrato con los de Castell¨®n y, diecis¨¦is d¨ªas despu¨¦s, sin tan siquiera debutar, se fue a la sombra de la Pilarica. El argentino Mart¨ªn Demichelis hizo algo parecido con el Atl¨¦tico de por medio, en su camino del M¨¢laga al Manchester City. Otro albiceleste, Bielsa, se ha marcado la misma jugada en Roma.

Imperioso, director deportivo rojiblanco

Todo lo que rodea a Jes¨²s Gil, el presidente del Atl¨¦tico de Madrid de 1987 al 2003, es susceptible de asomarse al esperpento. Entre el mill¨®n de an¨¦cdotas que regal¨® a los aficionados al f¨²tbol, destaca la de su caballo imperioso. El roc¨ªn, de pura raza espa?ola, lleg¨® a montar medio centenar de yeguas anualmente. Ese ¡®prodigioso¡¯ animal era el confidente del m¨¢ximo mandatario rojiblanco: ¡°Hablo algunas noches con ¨¦l y me da consejos sobre los fichajes y las destituciones¡±.

Keylor Navas, en el avi¨®n mientras el fax se atranca

Fue la an¨¦cdota m¨¢s chocante del pasado verano. David de Gea era el elegido para sustituir a Casillas en la porter¨ªa del Real Madrid, mientras que Keylor Navas tomar¨ªa su puesto en Manchester. Sin embargo, por arte de magia, el fax no lleg¨® a tiempo y la operaci¨®n nunca lleg¨® a cerrarse, mientras el disciplinado portero caribe?o esperaba en el avi¨®n, pensando en su nueva vida en la ciudad de Oasis. Nunca lleg¨® a despegar.

Todo en Turqu¨ªa

Mejor ni explicarlo. Mirad como recibieron a Guti¡­

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