CORONAVIRUS

Los efectos secundarios de las vacunas de Pfizer y Moderna

JOAQUIN SARMIENTO

Los efectos adversos m¨¢s habituales detectados son fiebre, cefaleas, mareos o molestias en la zona en la que se ha administrado la inyecci¨®n.

Los expertos insisten en que los beneficios de las vacunas contra el coronavirus son claramente mayores que los riesgos. Los casos en los que se produce una reacci¨®n adversa son m¨ªnimos, aunque en ocasiones pueden provocar efectos secundarios y ninguno de los remedios aprobados por los reguladores escapan a esta circunstancia.

As¨ª, la vacuna de Moderna ha sido la que m¨¢s efectos secundarios ha causado con 332 casos por cada 100.000 habitantes, seg¨²n los datos de la Agencia Espa?ola del Medicamento. Por su parte, esta cifra se reduce a 204 casos con el f¨¢rmaco desarrollado por Pfizer.

Mientras, la vacuna de AstraZeneca, cuya utilizaci¨®n en los menores de 60 a?os ha sido suspendida por el Ministerio de Sanidad "por un principio de precauci¨®n" tras los casos de trombos detectados, ha provocado efectos adversos en 69 casos por 100.000 habitantes, seg¨²n recoge la Agencia Espa?ola del Medicamento.

Los efectos secundarios m¨¢s habituales

Los efectos secundarios m¨¢s comunes detectados por las autoridades sanitarias son fiebre, cefaleas, mareos o dolor muscular en la zona en la que ha sido administrada la inyecci¨®n. Adem¨¢s, los resultados del estudio de vigilancia activa desarrollado en Estados Unidos, conocido como v-safe, a?ade fatiga y dolor de cabeza a la lista de efectos adversos m¨¢s habituales que causan las vacunas de Pfizer y Moderna.

Este estudio concluye que los efectos adversos son m¨¢s habituales con la vacuna de Moderna que con la Pfizer y que este porcentaje se incrementa tras la segunda dosis. Asimismo, los cient¨ªficos subrayan en este trabajo que "la frecuencia de las reacciones notificadas coincidi¨®, en general, con los resultados observados en los ensayos cl¨ªnicos".

El estudio de vigilancia realizado en Estados Unidos sobre las vacunas de Moderna y Pfizer destaca tambi¨¦n que "el porcentaje de participantes en v-safe que informaron de reacciones locales y sist¨¦micas fue m¨¢s alto el d¨ªa 1 despu¨¦s de la vacunaci¨®n y disminuy¨® notablemente hasta el d¨ªa 7". Los resultados de esta investigaci¨®n han sido publicados en el sitio web JAMA Network Open.