COVID-19

?Qu谷 sabemos sobre las manifestaciones neurol車gicas de la COVID-19?

P谷rdida del gusto (ageusia), del olfato (anosmia) y la aparici車n de cefaleas son quiz芍 las afectaciones neurol車gicas m芍s conocidas provocadas por la enfermedad, pero se estudia si hay otras asociadas.

as.com

Si algo sabemos del SARS-CoV-2 y de la enfermedad que provoca, la COVID-19, es que todav赤a estamos lejos de su completa comprensi車n a muchos niveles. De ah赤 que el esfuerzo de la ciencia sea imprescindible para dotarnos de certezas en estos tiempos inciertos para que tengamos m芍s herramientas en la lucha contra el denominado enemigo p迆blico n迆mero uno por la Organizaci車n Mundial de la Salud.

Cada d赤a que pasa estamos m芍s cerca de ofrecer respuestas a determinadas preguntas pero la comunidad m谷dica tiene que adaptarse continuamente a nuevos hallazgos mientras ofrece la mejor calidad asistencial posible con la informaci車n y medios disponibles. Un reto

En este sentido, desde que se declarara la pandemia, se han descrito diversas afectaciones neurol車gicas provocadas por la enfermedad como la p谷rdida del gusto (ageusia), del olfato (anosmia) y la aparici車n de cefaleas, pero es posible que el abanico sea m芍s amplio.

?Ictus isqu谷mico?

"Estamos estudiando si, adem芍s, la COVID-19 implica un incremento del riesgo de sufrir un ictus isqu谷mico", asegura el doctor Marcos Llanero, Jefe de Servicio de Neurolog赤a del complejo hospitalario Ruber Juan Bravo. "Se ha visto la aparici車n de ictus en personas sin factores de riesgo con antecedente de haber padecido la infecci車n por COVID-19 semanas atr芍s; queda por estudiar si esta relaci車n es casual o el SARS-COV-2 incrementa la coagulaci車n de la sangre e incrementa el riesgo de ictus", a?ade Llanero.

En cualquier caso, el experto aboga por seguir profundizando en las investigaciones y por mantener la prudencia. "Necesitamos investigar m芍s, todav赤a es demasiado pronto para establecer una relaci車n causa-efecto entre sufrir un ictus u otro proceso neurol車gico y haberse infectado por la COVID-19. Teniendo en cuenta el alto n迆mero de personas infectadas, ser赤a perfectamente posible que sufrir un infarto cerebral y haberse infectado por el virus coincidan en el tiempo, sin que uno se deba a la otra", concluye.