Daniel Dhers: ¡°Uno no se puede fiar del primer mundo...¡±
El rider venezolano de BMX explica la surrealista historia que vivi¨® en un campeonato en Inglaterra con un v¨ªdeo de dibujos animados by Red Bull.
¡°Aprend¨ª que uno no se puede fiar del primer mundo¡±, dice Daniel Dhers. Para llegar a esta conclusi¨®n, el rider venezolano de BMX tuvo que vivir una aut¨¦ntica odisea. Y eso es exactamente lo que vivi¨® en un campeonato de BMX Park y Miniramp en Inglaterra, a 45 minutos de Bristol, ¡°en un campo gigantesco donde no hab¨ªa nada, nada, ni se?al de m¨®vil¡±.
Le ofrecieron una "caravan" y se imagin¨® una casa rodante. Nada m¨¢s lejos de la realidad. Cuando lleg¨® vio que era algo peque?o, sin agua, con una calefacci¨®n igual que la que ten¨ªa en Buenos Aires. Hasta aqu¨ª, ni tan mal, pero resulta que su ropa no lleg¨®, solo la bici, que viaja en una especie de bolsa de golf. Sali¨® a comer con unos amigos, estuvo de festival y volvi¨® a las 3: "Voy a prender la calefacci¨®n... y no prende. No hab¨ªa gas. Se olvidaron de conectarlo". No pod¨ªa ni llamar, as¨ª que "saqu¨¦ la maleta de la bici, me puse dentro, la cerr¨¦ que solo quedaba la cabeza fuera... y hasta el d¨ªa siguiente".
La historia continu¨® en un ba?o sin cortinas que estaba muy sucio: "Me daba grima ver esa ba?era todo sucia". Como no le hab¨ªa llegado la ropa pidi¨® una prenda a un amigo, que solo ten¨ªa una camisa de franela femenina, con la que se le ve¨ªa el ombligo, le apretaba en los hombros... y la tuvo que llevar durante tres d¨ªas.
M¨¢s: cuando se fue a comer le dijeron que no aceptaban tarjeta. No ten¨ªa efectivo. Se fue al cajero que le dijeron y estaba "destrozado". Por suerte le reconoci¨® una persona y se sincer¨®: "mira hermano, me puedes regalar una hamburguesa? No tengo plata... me compr¨® un par, papas, bebida... y me dio 100 libras m¨¢s". Compiti¨® en Mini y Park, qued¨® 3? y result¨® que el animador que fue a entrevistarle era la persona que le hab¨ªa dejado el dinero y se lo reclam¨®. Afortunadamente hab¨ªa ganado dinero por la competici¨®n y se lo devolvi¨®.
A pesar de todo, Dhers asegura que ha vuelto al evento. ¡°Pero con mucha ropa en la maleta, efectivo y qued¨¢ndome en un hotel¡±, reconoce. Aunque no todo ha ido muy bien... ¡°era un hotel del 1800 y pico y era como una casa embrujada, l¨²gubre. Eso s¨ª, buen desayuno y mucho mejor quela caravan, con agua, electricidad, calefacci¨®n...¡±.
