A principios de semana, Garrett Foster (trail runner y aventurero) publicaba un v¨ªdeo en Instagram explicando que se hab¨ªa encontrado cara a cara con un puma: "Estoy 99,1% seguro de que un puma se me cruz¨® en el camino en Millcreek Canyon. Inmediatamente volv¨ª a bajar mientras miraba hacia atr¨¢s. Se lo cont¨¦ a una familia y luego volv¨ª a subir, aunue me sent¨ªa inc¨®modo y me desvi¨¦ un poco. Por el camino encontr¨¦ a una persona que se hab¨ªa encontrado con un oso la semana anterior. Y 25 minutos despu¨¦s, mi hermana me envi¨® el v¨ªdeo de un puma".

Hasta aqu¨ª todo normal. Es m¨¢s que factible que en un sitio salvaje donde viven animales salvajes, se produzca un encuentro con un animal salvaje (valga la redundancia). Lo que no es tan habitual es que al cabo de tan solo tres d¨ªas vuelva a ocurrir lo mismo en un punto diferente del bosque. As¨ª relataba el segundo encuentro:?

"Con tan solo tres d¨ªas de diferencia acabo de encontrarme con otro puma. Esta vez a meos de medio metro, en Grandeur Peak. Cuando llevaba unos 15 minutos de trail, en unos arbustos fuera del camino, me pareci¨® ver un par de ojos. Para confirmarlo me puse a mirar desde diferentes ¨¢ngulos y a distancia. A los dos minutos, los ojos, el puma, salt¨® hacia m¨ª y rugi¨® muy fuerte. Esta vez ten¨ªa una piedra y un cuchillo en las manos, una c¨¢mara en la otra y puse voz fuerte y aterradora, as¨ª que le hice huir cual gato asustado. Esto tan feliz de ue no haya pasado nada... porque fue realmente intenso".

Tras los dos encuentros en tres d¨ªas, Foster asegura que se lo tomar¨¢ con calma. Eso s¨ª, asegura tambi¨¦n que volver¨¢ a la monta?a y simplemente deja un mensaje para cualquiera que quiera ir de excursi¨®n por la zona: "Simplemente estad alerta, sabiendo que compart¨ªs espacio con animales salvajes en todo momento, incluso si no los v¨¦is. Simplemente id con los ojos iben abiertos".

Por su parte, desde la Utah Division of Wildlife recuerdan que en un encuentro con un puma, "lo ¨²ltimo que hay que hacer es correr, porque entonces se dejan llevar por su instinto persecutorio y cazador". Por el contrario, "lo que hay que intentar es hacerse cuanto m¨¢s grande posible levantando los brazos y hablando con firmeza, alto, mientras se va reculando poco a poco".