Treinta y cinco puntos de sutura y una leve fractura de cr¨¢neo suena a poco si hablamos de que un hombre pudo sobrevivir al ataque de un caim¨¢n que le mordi¨® en la cabeza. Su nombre es Jeffrey Heim y el suceso ocurri¨® el pasado domingo en el r¨ªo Myakka del estado norteamericano de Florida. El hombre se recupera ahora de sus heridas, mientras medios locales e internacionales se hacen eco de esta historia que sin duda tiene tintes de puro milagro.

Heim es un experimentado buceador aficionado a la b¨²squeda de dientes de tibur¨®n y f¨®siles de megalod¨®n. Invierte largas jornadas buscando en los fondos de los r¨ªos hasta dar con estas preciadas piezas de coleccionista. El pasado domingo d¨ªa d¨ªa 30 de mayo el joven de 25 a?os se zambull¨® en el r¨ªo Myakka y lo que no esperaba es que fuese a sufrir una de las experiencias m¨¢s traum¨¢ticas de su vida.

Mientras remov¨ªa los sedimentos en busca de uno de sus tesoros sinti¨® como algo golpeaba fuertemente su cabeza y le arrastraba. ¡°Pensaba que me hab¨ªa atropellado una lancha a gran velocidad¡±, comentaba Jeffrey; pero nada m¨¢s lejos de la realidad. Un caim¨¢n adulto hab¨ªa mordido su cabeza y trataba de llev¨¢rselo al fondo. El joven entr¨® en p¨¢nico y milagrosamente ¡ªy con otro mordisco en la mano¡ª logr¨® zafarse del animal antes de que empezase a rodar, t¨¦cnica habitual de caza de los caimanes que de haberse dado sin duda estar¨ªamos hablando de otro desenlace.

La potencia de mordida del caim¨¢n ¡ªque puede superar la tonelada¡ª provoc¨® en Heim una leve fractura de cr¨¢neo y unas profundas heridas superficiales. Por suerte para ¨¦l mantuvo la consciencia y pudo pedir ayuda para que le diesen unos primeros auxilios y fuese trasladado al hospital. Hoy Jeffrey se recupera de sus heridas y espera que todo este suceso se quede en el pasado como una an¨¦cdota m¨¢s de su afici¨®n por buscar dientes de tibur¨®n en los lechos fluviales.