Alberto Ortega: "El surf de olas grandes es un deporte de equipo"
Tito, un joven surfista vasco, que estuvo en Nazar¨¦ durante las olas gigantes del hurac¨¢n Epsilon, nos descubre el mundo del surf de olas grandes.

Alberto Ortega (27 de octubre de 1999, Leioa), m¨¢s conocido como 'Tito', es un joven vizca¨ªno que reside en Algorta y al que le pirra el pulpo para comer, Black Sabbath para escuchar y La sombra del viento para leer. Pero no le hemos entrevistado por nada de esto, sino por ser uno de los surfistas que estuvo en Nazar¨¦ aprovechando las olas del hurac¨¢n Epsilon.
Con Natxo Gonzalez como referente y Me?akoz como spot favorito, Tito surfea 'olas grandes' y hace un mes estuvo en la ola m¨¢s grande del mundo surfeando para ORG Surfboards y Cabo Surf Shop. Con una premisa que tiene muy clara: "La experiencia es la madre de la ciencia".
Alberto, todo el mundo ha visto alguna vez alguna ola grande, pero... para un surfista, ?qu¨¦ nos podr¨ªas decir que la gente no se imagine al respecto?
Si, todo el mundo ha visto "olas grandes", lo escribo entre comillas porque el significado de la expresi¨®n var¨ªa seg¨²n la persona que lo usa. Dos metros pueden ser grandes para una persona y peque?os para otra. Adem¨¢s, una ola de la misma altura puede tener m¨¢s o menos fuerza seg¨²n la marejada y el sitio.
Quien no surfea o nunca ha estado dentro de un mar revuelto o en condiciones duras piensa que nos metemos a esas olas gigantes, surfeamos y nos vamos tranquilamente. Pero la realidad es que para acabar en esos mares hay un gran trabajo detr¨¢s de cada ola: toda una vida de preparaci¨®n y aprendizaje. Por eso el surf de olas grandes casi siempre lo dominan personas m¨¢s veteranas.
Quien no surfea o nunca ha estado dentro de un mar revuelto o en condiciones duras piensa que nos metemos a esas olas gigantes, surfeamos y nos vamos tranquilamente
Vamos, que no es llegar, surfear y salir a secarse como algunos pueden pensar...
El surf es un deporte que, adem¨¢s de la evidente preparaci¨®n f¨ªsica y mental que se necesita para mantenerse sereno bajo la fuerza de una ola gigante, requiere tambi¨¦n de paciencia y constancia. Es decir, si juegas al tenis o al basket sabes que la cancha estar¨¢ siempre ah¨ª y que puedes programar tu entrenamiento y planear tus torneos. En el surf la naturaleza tiene la ¨²ltima palabra, si no hay olas no hay surf. Uno puede prepararse a conciencia, entrenar sin descanso, viajar con el equipo hasta el lugar de convocatoria y encontrarse con que el parte ha cambiado y las olas esperadas no llegan. La preparaci¨®n mental hace que la decepci¨®n no se convierta en frustraci¨®n.
Tambi¨¦n me gustar¨ªa destacar que el surf de olas grandes es un deporte de equipo. Ning¨²n surfista puede hacerlo solo. En lugares gigantes como Nazar¨¦, con semejante tama?o de mar, el surfista no ve llegar la ola que quiz¨¢ le de su mayor logro. Para ello tiene que contar con un "spotter", esa persona esencial que desde tierra avisa durante una sesi¨®n de las olas que se acercan; tambi¨¦n se necesitan motoristas que te llevan hasta el punto ¨®ptimo, que te lancen a la ola elegida y que tras surfearla te recojan o en caso necesario te rescaten; y hace falta un buen entendimiento con el shaper, ese artesano que fabrica tu tabla ideal, la que se adapta a tu forma de surfear y que conoce a la perfecci¨®n las caracter¨ªsticas de las diferentes olas. Sin esa cooperaci¨®n el surf de grandes olas no ser¨ªa lo que es hoy.
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Con todo, ?c¨®mo empezaste t¨² a practicarlo?
Empec¨¦ con las "olas grandes" en 2015/2016, cuando ten¨ªa 17 a?os. Aritza Saratxaga me introdujo en este mundo llev¨¢ndome a Me?akoz un d¨ªa de un par de metros.
La segunda vez que surfe¨¦ olas grandes, en mis inicios, me pareci¨® un d¨ªa gigante. Fue Ander Mendiguren quien me llev¨® esta vez a una sesi¨®n en la que estaban todos los locales y ahora amigos (Jes¨²s, Luis, Ibon, Jaime, Natxo...). En aquel ba?o realmente descubr¨ª que me gustaba este mundo. Al principio de la sesi¨®n estaba en el canal mirando a todos, admirando c¨®mo surfeaban aquellas olas, y poco a poco fui meti¨¦ndome m¨¢s al inside y consegu¨ª coger una ola... y comerme otro par de olas tambi¨¦n.
Tengo el recuerdo de una sesi¨®n incre¨ªble, porque me di cuenta que realmente me encantaba la sensaci¨®n de surfear esas olas y estar all¨ª fuera. Al mismo tiempo me di cuenta de que si quer¨ªa abordar olas grandes con mayor comodidad ten¨ªa que surfear mucho y entrenar tanto en piscina como en gimnasio.
?Las olas de Epsilon en Nazar¨¦? Nunca hab¨ªa visto semejante altura de olas en mi vida
?D¨®nde lo practicas y con qu¨¦ facilidades/dificultades cuentas?
Al principio fue complicado. Viv¨ªa con mi ama y mi padrastro en Logro?o, sin mar, as¨ª que cada fin de semana que pod¨ªa, cog¨ªa un bus y entrenaba y surfeaba todo lo que pod¨ªa. Hasta que termin¨¦ segundo de bachiller y fui a vivir a Algorta con mi abuela, cerqu¨ªsima de las olas.
Ahora normalmente lo practico en Me?akoz, pero desde hace dos temporadas tambi¨¦n paso cuatro o cinco meses en Nazar¨¦ para la temporada de olas grandes, con el equipo de Jet Resgate formado por la familia Laureano (Ram¨®n Laureano, Susana Lousada) y el spoter Jos¨¦ Sales.
Una de las dificultades con las que me encuentro es que a¨²n no tengo sponsors propiamente dichos. Por el momento me ayudan la marca de tablas ORG con precios m¨¢s bajos en las tablas, y la tienda Cabo Surf Shop de Uribe Costa con otros materiales. Pero el caso es que cuando llega la temporada, practicar este deporte requiere bastante dinero en material, desplazamientos y equipo de rescate.
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?C¨®mo es tu d¨ªa a d¨ªa en este contexto?
Organizo el a?o considerando el verano -desde junio hasta septiembre incluido- como mi pretemporada de olas grandes. En este periodo trabajo como socorrista (que junto a las ayudas de mi familia me permiten dedicarme a surfear) y me dedico a entrenar normalmente dos d¨ªas a la semana en gimnasio y m¨ªnimo un d¨ªa de apnea en la piscina. Adem¨¢s de todo esto intento hacer entrenos de surf con Pablo Cabezuelo todos los d¨ªas que puedo y las condiciones del mar lo permiten.
Del resto del a?o, de octubre a enero estaba en Nazar¨¦ y luego me quedaba en Algorta para surfear las marejadas de por aqu¨ª el Norte y compaginarlo con el grado superior que estoy estudiando. Pero en cuanto se anunciaba un swell (marejada) gigante para Nazar¨¦ u otra parte de la Pen¨ªnsula buscaba la manera de viajar y poder llegar a surfear el swell en el mejor sitio.
Ahora con la movilidad m¨¢s reducida, he tenido que apostar por quedarme aqu¨ª en Nazar¨¦ y a ver qu¨¦ sucede... porque con esto del coronavirus no sabemos lo que ocurrir¨¢ ma?ana. En esta ¨¦poca tambi¨¦n entreno dos d¨ªas f¨ªsico y uno de piscina. Con un problema a?adido: han prohibido surfear en Nazar¨¦ para evitar las aglomeraciones de espectadores, as¨ª que nos tenemos que desplazar para surfear.
Esas aglomeraciones se produjeron cuando las olas de Epsilon. Estuviste all¨ª. ?C¨®mo fue la experiencia?
Para m¨ª fue una experiencia incre¨ªble: una semana entera intensa de surf de olas gigantes. Los dos d¨ªas m¨¢s grandes fueron el mi¨¦rcoles 28 y el jueves 29. En el primero Antonio Laureano, el hijo de Ram¨®n, me lanz¨® a tow-in a una ola muy buena, la primera de la sesi¨®n, aunque al final de esta ola me ca¨ª y Ram¨®n tuvo que venir a rescatarme. Mi tabla fue para la arena y el inside estaba muy dif¨ªcil para ir hasta all¨ª a por la tabla, as¨ª que se me termin¨® la sesi¨®n, pero para m¨ª ya hab¨ªa valido la pena. Segu¨ª en el outside con la moto por si ocurr¨ªa algo hacer second safety, pero gracias a Dios todo fue bien.
Al d¨ªa siguiente, nunca hab¨ªa visto semejante altura de olas en mi vida. Decid¨ª quedarme en la moto, ya que estaba realmente gigante y nunca hab¨ªa entrado en un mar de semejante magnitud. Estuve observando a todos surfear aut¨¦nticos monstruos. Entre ellos mi amigo Antonio Laureano, a quien su padre le lanz¨® a una ola gigante, una derecha (que van directamente hacia las piedras) que fue su mayor ola surfeada hasta la fecha.
Este no es un deporte para ir lo m¨¢s r¨¢pido posible sino madurando conocimiento y afianzando experiencias poco a poco y, sobre todo, siempre con seguridad y buena organizaci¨®n log¨ªstica
Por mi parte, sigo entrenando todos los d¨ªas para conseguir surfear tambi¨¦n la mayor ola de mi vida junto a este gran equipo.
Habr¨¢s conseguido otras cosas hasta el momento. ?Cu¨¢les destacar¨ªas?
Podr¨ªa separar mis logros en dos partes. Por un lado los de puramente surf como mi participaci¨®n en dos eventos del campeonato internacional Punta Galea Challenge, donde participan surfistas de todo el mundo.
Y por otro lado el de mis conocimientos como socorrista -el curso de The Ocean Warrior, de Mark Viser-, como instructor de surf, como nutricionista deportivo (estoy terminando mis estudios de Diet¨¦tica) y en moto de agua de rescate.
?Qu¨¦ historia recuerdas especialmente en Nazar¨¦?
Recuerdo cantidad de historias a lo largo de mi corta carrera hasta ahora, pero la mejor fue en un swell gigante que fuimos a remar en Nazar¨¦ con Tony Laureano. Estaba gigante, pero no me encontraba en el agua, al parecer no era mi d¨ªa y solo me com¨ª olas y m¨¢s olas (unas de las comidas m¨¢s grandes de mi vida). S¨ª, me aport¨® mucha seguridad mentalmente, aunque sal¨ª un poco apagado porque no me cuadr¨® ninguna ola.
En cambio, al d¨ªa siguiente -que no estaba tan gigante pero a¨²n entraban series muy grandes- me encontr¨¦ en el agua y fue incre¨ªble la sensaci¨®n: era coger una ola, volver al lineup y as¨ª una y otra vez. Parec¨ªa que estaba perfectamente conectado con el mar, fue una experiencia incre¨ªble.
?Algo m¨¢s que a?adir sobre ti o sobre el deporte?
Me encantar¨ªa contar mil historias, experiencias y momentos inolvidables con la gente magn¨ªfica que he conocido en este deporte. Pero lo que m¨¢s me gustar¨ªa es que quede plasmado que este no es un deporte para ir lo m¨¢s r¨¢pido posible sino madurando conocimiento y afianzando experiencias poco a poco y, sobre todo, siempre con seguridad y buena organizaci¨®n log¨ªstica. Porque si no, el precio a pagar por un error puede ser muy grande: tu vida.
Ahora estoy entrenando muy duro junto a Jet Resgate, que es como si fuese mi familia, para dar la cara en cada swell y poco a poco tanto yo como Tony Laureano, con la ayuda de su madre y nuestro spoter Jos¨¦, seguir mejorando y surfeando olas m¨¢s y m¨¢s gigantes.