Pogacar: ¡°El Jumbo me aplast¨®¡±

Un ataque tras otro y Tadej Pogacar respondiendo a todos. Luego, ofensiva del esloveno, que, tras los momentos de m¨¢s intensidad, hac¨ªa gestos a la c¨¢mara, con una sonrisa, pero indicando que le tocaba sufrir. No se equivocaba, lo peor estaba por llegar. En el Granon, en la 11? etapa del Tour, Jonas Vingegaard arrebataba el maillot amarillo al corredor del UAE. Ya no lo solt¨®. Pogi pagaba los esfuerzos anteriores y el dan¨¦s, sin saberlo, empezaba una cuenta atr¨¢s hacia Par¨ªs. ¡°Tengo que sacar conclusiones¡±, reflexionaba el doble ganador de la gran vuelta francesa tras no conseguir su tercera corona consecutiva. Ya lo ha hecho. ¡°La t¨¢ctica del Jumbo fue excelente. Todos estaban al 100%. Realmente, me aplastaron con sus ataques. Especialmente, en esa parte plana entre Telegraph y Galibier. Tal vez estaba un poco nervioso sobre c¨®mo y qu¨¦ suceder¨ªa en el Granon. Cuando comenzamos la ¨²ltima subida, inmediatamente sent¨ª que no era un buen d¨ªa¡±, explica en el medio esloveno MMC.

Desde ese momento, Pogacar supo que ganar el Tour ser¨ªa ¡°muy dif¨ªcil¡±, pero no baj¨® los brazos. Lo remarca y lo demostr¨® en las jornadas posteriores, en las que prob¨® a Vingegaard sin cesar. Atac¨® al inicio de la etapa de Mende y en la subida final. Aceler¨® dos veces hacia Lers. Gan¨® en Peyragudes, pero recortando s¨®lo cuatro segundos. Lo intent¨® hasta bajando, en el descenso del Col de Spandelles, con esa ca¨ªda y ese choque de manos que ya es historia del ciclismo. No pudo ser. Lo acaecido en el Granon hab¨ªa abierto una brecha excesivamente grande en la general y, seguramente, tambi¨¦n en lo psicol¨®gico. ¡°Hoy, s¨®lo puedo especular, pero creo que si le hubiera ordenado a Rafal (Majka) que comenzara el ascenso m¨¢s despacio, hubiera sobrevivido hasta la l¨ªnea de meta perdiendo menos tiempo. Eso s¨ª, despu¨¦s del Galibier, creo que no hab¨ªa vuelta atr¨¢s para tener buenas piernas ese d¨ªa. Fue como si me hubiera dejado todos los superpoderes ah¨ª¡±, analiza Tadej.

El calor, superior al esperado y a m¨¢s durante el Tour, tampoco ayud¨® al corredor esloveno. Tal y como ha reiterado a lo largo de su corta pero exitosa carrera, las altas temperaturas le perjudican especialmente. ¡°Poco a poco, nos fuimos acostumbrando a las botellas de agua fr¨ªa y al hielo durante las jornadas, pero tengo que decir que el calor no es lo mejor para m¨ª¡±, enfatiza una vez m¨¢s, desmenuzando todav¨ªa m¨¢s su fat¨ªdica 11? etapa, que se desarroll¨® entre los 30 y 35 grados cent¨ªgrados. ¡°Empezamos bien, tambi¨¦n me sent¨ª bien, pero luego me qued¨¦ sin energ¨ªa, no beb¨ª suficiente, necesitaba mucha agua para esa etapa, pero olvid¨¦ tomar esa bebida hidratante¡±, confiesa. La cruz en medio de muchas caras, de otra actuaci¨®n soberbia para un ciclista de s¨®lo 23 a?os, que empez¨® a escribir su leyenda en La Planche des Belles Filles, donde este a?o volvi¨® a ganar. Esta vez, con un amarillo ¡°prestado¡±.

El Mundial, pr¨®ximo objetivo

En una preparaci¨®n cuestionada por nombres como Eddy Merckx, Pogacar disput¨® ¨²nicamente el Tour de Eslovenia como preparaci¨®n para el Tour, 56 d¨ªas despu¨¦s de su anterior carrera, la Flecha Valona. En esos dos meses, sin embargo, el esloveno no par¨®. ¡°Primero fuimos a los Pirineos, luego a hacer la ¨²ltima contrarreloj del Tour y luego a los Alpes. Despu¨¦s del reconocimiento, nos trasladamos a Livigno, donde tuvimos un campo de entrenamiento con el equipo y donde todo estuvo enfocado al Tour. Yo mismo eleg¨ª Eslovenia como carrera preparatoria. Inmediatamente despu¨¦s, volv¨ª a entrenar en altura, esta vez durante seis d¨ªas en Montgenevre¡±, repasa Pogi, que, tras apartarse de La Vuelta y abandonar en la Cl¨¢sica de San Sebasti¨¢n, vuelve a estar en marcha. Particip¨® en la Bretagne Classic, el 28 de agosto, y tiene Canad¨¢ en el punto de mira (GP Quebec el 9 de septiembre y GP Montreal, dos d¨ªas despu¨¦s). Dos fechas claves para alcanzar el punto ¨®ptimo de forma, destinado al Mundial de Wollongong (Australia), el 25 de este mismo mes.