Otro zarpazo de Evenepoel

Remco Evenepoel peg¨® otro pu?etazo en la mesa. M¨¢s fuerte que el anterior. El mi¨¦rcoles, en el Pico Jano, lanz¨® la primera andanada, que le sirvi¨® para vestirse de rojo y para cribar el grupo de candidatos. Y este domingo, en Les Praeres, sac¨® otra vez el martillo para distanciar a los perseguidores que todav¨ªa resist¨ªan a su estela, especialmente a Enric Mas, que cedi¨® 44 segundos en la cima y se aleja a 1:12 en la general. Y tambi¨¦n a Primoz Roglic, que el s¨¢bado ofreci¨® s¨ªntomas de resurrecci¨®n en el Collado Fancuaya, que no pudo confirmar en la segunda cita de Asturias. Al contrario, el esloveno perdi¨® 52¡å y se instala a 1:53. Los tres ocupantes del podio siguen siendo los mismos, pero la brecha se abre¡­ Y tiene pinta de que se abrir¨¢ bastante m¨¢s.

Evenepoel sigue el plan que ten¨ªa dise?ado para esta primera mitad de La Vuelta. El belga quiere exprimir su dulce momento de pedalada, esa forma que le permiti¨® exhibirse en San Sebasti¨¢n, para sacar el mayor tiempo posible. La inc¨®gnita de este joven de 22 a?os es saber c¨®mo va a llegar al tramo final de la carrera, porque nunca ha completado una grande. Y tambi¨¦n si aguantar¨¢ su equipo, el Quick Step, tan poco acostumbrado a este tipo de trabajo. Estas primeras llegadas en alto, explosivas, pero sin tanta dureza acumulada, se amoldan perfectamente a sus caracter¨ªsticas. Igual que esa contrarreloj entre Elche y Alicante, donde el martes intentar¨¢ dar la puntilla a sus rivales. La l¨ªnea argumental no se ha torcido ni un ¨¢pice.

Cuando el fen¨®meno belga abri¨® gas, Mas y Roglic soportaron el arre¨®n inicial, pero no tardaron en descolgarse. Primero, el esloveno. Luego, el espa?ol. Evenepoel se encuentra un par de puntos por encima. Esa es la rotunda realidad. Ahora mismo no muestra ninguna grieta por la que colar un ataque. El recorrido restante, con puertos m¨¢s duros, con la altitud de Sierra Nevada, todav¨ªa permite la remontada de ambos. Pero se tienen que cumplir dos premisas. Una, que Remco vaya a menos. Y dos, que Mas y Roglic, que terminaron muy tocados el pasado Tour, crezcan proporcionalmente. Pura hip¨®tesis.

Detr¨¢s de esa lucha del tr¨ªo de cabeza, las dos perlas del ciclismo espa?ol progresan a pasos agigantados. Este domingo fue el turno de lucimiento de Juan Ayuso, el mejor de los perseguidores de Evenepoel, por delante de otros gallos m¨¢s ilustres. El alicantino de 19 a?os cruz¨® a 34 segundos del belga para remontar una plaza en la clasificaci¨®n, donde ya figura quinto, a 2:36. S¨®lo a tres segundos del otro joven valor, Carlos Rodr¨ªguez, de 22, que se mantiene cuarto. De ese top-5, por cierto, ha desaparecido Tao Geoghegan Hart, que sufri¨® una ca¨ªda. Si la evoluci¨®n de Remco hacia la segunda mitad de La Vuelta es todav¨ªa una interrogante, ya no digamos el rendimiento de los debutantes Rodr¨ªguez y Ayuso. Cualquier d¨ªa pueden venirse abajo, hay que ser realistas. Pero tambi¨¦n puede pasar todo lo contrario. ?Y si ellos son la alternativa? Faltan 12 etapas para saberlo. Un mundo por delante.

El resto de la pel¨ªcula de este domingo se grab¨® en un plat¨® casi calcado al del s¨¢bado, pero con un reparto totalmente diferente. El terreno de aproximaci¨®n a Les Praeres propici¨® una escapada de nueve corredores que se jugaron la victoria de etapa en esa subida final. Pero si el grupo del d¨ªa anterior estaba compuesto por parte de la nobleza ciclista, con ilustres como Mikel Landa y Thibaut Pinot, ganadores entre todos de nueve etapas en La Vuelta; en esta ocasi¨®n ninguno de los aventureros hab¨ªa mojado nunca en una gran ronda. El m¨¢s distinguido era Louis Meintjes, un veterano sudafricano de 30 a?os, ciclista regular, digno escalador, que ven¨ªa de ser octavo en el Tour. En su palmar¨¦s faltaba una gran victoria para presumir de foto. Ya la tiene: en Asturias y en La Vuelta.