Recital del Visma en una Omloop colosal que conquista Tratnik
El esloveno da la sorpresa en una Omloop de m¨²ltiples alternativas, aunque con control del Visma. Politt y Van Aert, en el podio. Cortina, 15?.
Una victoria que justifica toda una carrera de gregario, de ese trabajo en la sombra, muchas veces ingrato, que en contadas ocasiones se ve recompensado. Es lo que consigui¨® Jan Tratnik (34 a?os) con su conquista de la Omloop Het Nieuwsblad, pistoletazo de salida a una temporada de cl¨¢sicas que no pudo empezar de forma m¨¢s trepidante. El esloveno dio la sorpresa al adelantarse al grupo de favoritos en los ¨²ltimos kil¨®metros y consigui¨® el ¨¦xito m¨¢s prestigioso de su palmar¨¦s, al margen de su etapa en el Giro de Italia 2020. El podio lo completaron Nils Politt (2?), superado en los metros finales por Tratnik, y un Wout van Aert (3?) que, junto al 5? puesto de su compa?ero Christophe Laporte, redonde¨® otro d¨ªa de dominio abrumador del Visma.
Oficialmente, no cuenta con el reconocimiento popular ni el prestigio de ser uno de los monumentos del ciclismo, pero en esencia, Omloop ofrece argumentos de sobra para considerarla como tal. En total, 202 km en los que se incluyen m¨¢s de diez tramos de pav¨¦s y muros, algunos de ellos tambi¨¦n adoquinados. Un c¨®ctel solo apto para los esp¨ªritus m¨¢s aventureros. Adem¨¢s, el desarrollo de la carrera fue el so?ado.
Se sali¨® a mil por hora desde la salida, y eso hizo que la fuga que se form¨® desde el inicio pasase a un segundo plano. M¨¢s pronto que tarde ser¨ªan engullidos. Rodando a promedios cercanos a los 45 km/h, todo estall¨® en mil pedazos cuando todav¨ªa restaban 132 km a l¨ªnea de meta. Con una montonera como detonante, se form¨® un grupo de unas 30 unidades que cont¨® con la presencia de gran parte de los favoritos. Van Aert, Pidcock, Laporte, Asgreen, Philipsen, Milan y De Lie, entre otros, estuvieron ah¨ª. Otros como Girmay y Lazkano, perjudicados por la ca¨ªda, no.
Giro de guion
As¨ª las cosas, la situaci¨®n de carrera no dio tregua hasta el final. Unos tiraban para ganar m¨¢s distancia. Otros para dar caza. No obstante, en el grupo delantero hab¨ªa demasiado gallo. Y gracias a su superioridad, tambi¨¦n num¨¦rica, el Visma decidi¨® separar el grano de la paja. El culpable, ni m¨¢s ni menos que Van Aert. Quedaba un mundo, 52 km, y el belga aceler¨® sin inmutarse. A la estela de Wout, que para m¨¢s inri contaba con la compa?¨ªa de Laporte y Jorgenson como escuderos, s¨®lo pudieron engancharse Pidcock, De Lie, Skujins y Moscon, aunque el italiano sac¨® bandera blanca a los pocos minutos.
Quedaba el encadenado clave, un paso por el Kapelmuur y el Bosberg que tradicionalmente decide el campe¨®n. Fue en los kil¨®metros de aproximaci¨®n, aprovechando su ventaja num¨¦rica, donde el Visma ejecut¨® un movimiento que parec¨ªa ser jaque mate. Jorgenson salt¨® del sexteto de cabeza y lleg¨® al Bosberg con ventaja. All¨ª, por sorpresa, el nutrido grupo de favoritos que llevaba en modo cacer¨ªa durante horas consigui¨® contactar con Van Aert, Pidcock, Laporte, De Lie y Skujins. Hubo reagrupamiento, y en esa ¨²ltima cota adoquinada emergi¨® la figura de Ivan Garc¨ªa Cortina, que llegando desde atr¨¢s como un misil se situ¨® en cabeza.
El del Movistar no consigui¨® hacer hueco, y fue en ese momento de intercambio de miradas, en el que falta valent¨ªa y sobran dudas, en el que un ataque certero suele ser sin¨®nimo de ¨¦xito. Tratnik y Politt lo sab¨ªan. Aparecieron de la nada y fueron capaces de llegar a la recta de meta para disputarse la victoria en un mano a mano al esprint. Ni siquiera el Lotto, tirando con todo por detr¨¢s para tratar de llevar a De Lie hacia el triunfo, fueron capaces de echarles el lazo. El alem¨¢n pec¨® de optimista y el esloveno, muy bien resguardado a su rueda, peg¨® el estacazo en el momento justo para llevarse la gloria. Por detr¨¢s, Van Aert, el hombre m¨¢s r¨¢pido del esprint de grupo, cerr¨® el podio. El ciclismo sigue igual. Manda el Visma.