Las cimas que Bahamontes conquist¨® en el Tour de Francia
El ciclista espa?ol, fallecido este martes a los 95 a?os, logr¨® grandes hitos en la ronda francesa, que le nombr¨® el mejor escalador de la historia.
El mundo del ciclismo contin¨²a recordando a la figura de Federico Mart¨ªn Bahamontes, primer ganador espa?ol de la general del Tour de Francia, que falleci¨® este martes a los 95 a?os.
Un Bahamontes que fragu¨® gran parte de su leyenda en el ciclismo en el Tour de Francia y, sobre todo, en las monta?as de los Alpes, los Pirineos y el Macizo Central, consiguiendo adem¨¢s del triunfo final en 1959, el maillot de la monta?a en seis ocasiones en 1954, 1958, 1959, 1962, 1963 y 1964.
Sin duda, una de las cimas quie m¨¢s ha marcado la figura de Bahamontes es el Puy de D?me, donde logr¨® ganar la cronoescalada en 1959 que le encamin¨® al t¨ªtulo, en una cima donde s¨®lo Luis Oca?a y Joop Zoetemelk han logrado imponerse dos veces.
Las cimas de los Pirineos tambi¨¦n han visto en acci¨®n al mejor Bahamontes, ya que ¡®El ?guila de Toledo¡¯ conquist¨® en tres ocasiones el Tourmalet en 1954, 1962 y 1963, en tres ocasiones el Portet d¡¯Aspet en 1958, 1962 y 1963, en dos el Col d¡¯Aspin y en cuatro ocasiones los colosos de Peyresourde (1954, 1958, 1962 y 1963) y el Aubisque (1954, 1958, 1963 y 1964).
Sin duda una de las victorias m¨¢s especiales para Bahamontes en los Pirineos tuvo lugar en la cronoescalada de Superbagn¨¨res en 1962, donde logr¨® una de sus siete victorias de etapa en el Tour. El Col de Soulor en 1956 y el Port d¡¯Envalira en 1964 completan la lista de cimas conquistadas por Bahamontes en los Pirineos.
Sin embargo, el dominio de Bahamontes en las monta?as tambi¨¦n tuvo su eco en los Alpes, donde Bahamontes coron¨® en cabeza cimas m¨ªticas como el Galibier en 1954 y 1964, el Col de la Faucille en 1954 y 1958 y el techo hist¨®rico del Tour de Francia: el col de la Bonette Restefond, con sus 2.802 metros de altura sobre el nivel del mar que Bahamontes pas¨® en cabeza en las ediciones de 1962 y 1964.
Si hay dos cimas de los Alpes que marcan la carrera de Bahamontes esas son las del Col de l¡¯Izoard y el Col de la Romey¨¨re. En el Izoard, que coron¨® en cabeza en 1958 y 1962, Bahamontes puso rumbo a su victoria de etapa en Brian?on en 1958, mientras que en la Romey¨¨re, que coron¨® en cabeza en 1954 y 1959, Bahamontes agrand¨® su leyenda en la carrera francesa con la an¨¦cdota del helado en la cima en la edici¨®n del 54.
Las subidas a Montajux, Laffrey y Bayard en 1954, Oeillon y Mont-Cenis en 1956, Montsalvy y R¨¦publique ou Grand Bois en 1959; el Col de Porte, Petit-Saint-Bernard, Grand-Saint-Bernard y la Forclaz en 1963; y el Col de T¨¦l¨¦graphe y Levens en 1964 completan la gran lista de cimas que Bahamontes conquist¨® en el Tour de Francia y que le permitieron hacerse con el t¨ªtulo honor¨ªfico de mejor escalador de la historia.