Wembanyama se da contra el muro

Los Spurs han entrado, otra vez, en barrena. La cosa no est¨¢ tan mal como en aquel tramo de la temporada en el que enlazaron 18 derrotas seguidas, la peor racha de su generalmente ilustre historia. Pero han perdido sus ¨²ltimos siete partidos, siguen clavados en diez victorias (10-43) y est¨¢n pasando las de Ca¨ªn en su largu¨ªsima gira de febrero, el tradicional rodeo trip. En los buenos tiempos, una especie de convivencia fraternal para preparar el asalto a los playoffs y la lucha por el t¨ªtulo. Ahora, una cuesti¨®n de s¨¢lvese quien pueda.

Son nueve partidos seguidos fuera de casa (por ahora han cubierto tres, con tres derrotas), cinco antes del par¨®n del All Star y cuatro despu¨¦s. Hasta el d¨ªa 29 no volver¨¢n a San Antonio, donde dejan libre el pabell¨®n para el ya cl¨¢sico Stock Show & Rodeo. En total, m¨¢s de 14.000 kil¨®metros por todas las franjas horarias de Estados Unidos y un term¨®metro perfecto para entender c¨®mo han cambiado las cosas en la franquicia texana: durante los quince primeros a?os de rodeo trip, el equipo amas¨® un balance de 88-37 y cerr¨® catorce de los quince viajes con balance ganador. En los cinco ¨²ltimos (sin contar 2021 por los ajustes y restricciones de pandemia) el saldo era 10-29 antes de arrancar esta edici¨®n (ahora 10-32). La temporada pasada se termin¨® con un terrible 1-8. Ahora, la cosa no pinta mucho mejor.

As¨ª que los Spurs est¨¢n especialmente cansados en un momento en el que todos los equipos est¨¢n cansados, a las puertas de un par¨®n del All Star en el que gran parte de la Liga, todos los que no estar¨¢n en Indian¨¢polis, se pegan una escapadita vacacional para recargar las pilas de cara al tramo final de la temporada. Gregg Popovich lo llama d¨ªas perros: ¡°Se ve en todo el mundo, y b¨¢sicamente en todos los equipos. Son d¨ªas perros y son duros. Quer¨ªa ver c¨®mo reaccion¨¢bamos en esta gira, en la carretera. Creo que es el cuarto fin de semana seguido en el que tenemos tres partidos en cuatro noches¡­ es duro, mezclado con el viaje por el rodeo. As¨ª que entiendo que los jugadores est¨¢n cansados, pero no podemos quedarnos ah¨ª. Hay que pelear para salir adelante, y nos est¨¢ resultando un poco complicado hacerlo¡±.

Un momento delicado para los rookies

Las exigencias del dur¨ªsimo calendario de la NBA suelen afectar especialmente a los rookies, los jugadores de primer a?o que no tienen experiencia para lidiar con la carga f¨ªsica y mental que trae consigo ese nudo de 82 partidos. Son jugadores muy j¨®venes y que mayoritariamente llegan desde un baloncesto universitario mucho menos cargado en su n¨²mero de partidos. Tan habitual suele ser que los novatos tengan una ca¨ªda clara en su rendimiento en la segunda parte de la temporada, que es un fen¨®meno asumido desde pr¨¢cticamente siempre en la NBA moderna y al que se conoce como rookie wall: el muro contra el que se chocan los novatos, que ven caer su rendimiento y sus estad¨ªsticas muchas veces de forma dr¨¢stica, tambi¨¦n en el caso de los que han estado a un nivel m¨¢s prometedor en la primera parte del curso.

Victor Wembanyama, para tantas cosas un privilegiado, no se est¨¢ librando de pasar por este trance. Ha reconocido un par de veces que est¨¢ m¨¢s cansado de lo normal en los ¨²ltimos d¨ªas, y ha aceptado los consejos del experto Popovich: ¡°S¨ª, ya me ha explicado c¨®mo suele ser, y no hay mucho m¨¢s, es as¨ª. Pero es dif¨ªcil llevarlo, hay que intentar trabajar, mantener las rutinas sin que afecte. Nuestros cuerpos lo notan, as¨ª que es un reto, hay que hacer esfuerzos extra aunque el cuerpo no responda bien. Nuestros saltos se van a quedar m¨¢s cortos, nuestros esprints van a ser m¨¢s lentos que al principio de la temporada¡­ es as¨ª¡±.

En enero, y pese a que control¨® sus minutos en pista por unos problemas de tobillo, el p¨ªvot franc¨¦s promedi¨® (fue Rookie del Mes) 24 puntos, 9,6 rebotes, 3,3 asistencias y 3,3 tapones. Ahora, en febrero, su producci¨®n ha bajado sobre todo en anotaci¨®n (17) y tapones (2,3). Est¨¢ en 10,5 rebotes pero solo ha totalizado cinco en sus ¨²ltimos dos partidos: uno en Orlando y cuatro en Brooklyn, donde por primera vez en la temporada lleg¨® al descanso sin rebotes, asistencias, tapones y robos. Acab¨® el partido con 21 puntos, 4 rebotes, 3 asistencias y 1 tap¨®n, pero con la pastosa certeza de que toca navegar este tramo pesado del calendario y combatir ese rookie wall que, entre la realidad y la narrativa, marca otra novedad en la carrera de un jugador llamado a hacer historia... pero que tiene todav¨ªa 20 a?os.