Sin Embiid, sin Paul George, pero con Yabusele

Lo de los Sixers es algo que viene de lejos, y que no tiene pinta que se vaya a arreglar. El modus operandi de la entidad desde que inici¨® ese Proceso, tan cuestionable en fondo y forma ha sido, ha dado como resultado las migajas incontenibles de un proyecto que no va a ninguna parte y cuya soluci¨®n es salir hasta que se acabe el camino. As¨ª funciona ahora mismo un equipo que anunci¨® que Joel Embiid no iba a participar en los back to backs esta temporada para cuidad su f¨ªsico y no llegar a playoffs tan mermado. Lo que nadie sab¨ªa es que, despu¨¦s de dos meses de descanso desde los Juegos Ol¨ªmpicos de Par¨ªs, tampoco iba a estar en la opening night, una jornada inaugural en la que todos los equipos llegan con todas sus piezas salvo rarezas enormes y lesiones de larga duraci¨®n. Nada que ver con Embiid, un p¨ªvot del que nadie sabe nada en esa estela de estrellas lideradas por Kawhi Leonard, que juntan errores y horrores sin ton ni son y no dejan opci¨®n a la improvisaci¨®n positiva, y s¨ª a la resignaci¨®n obligada.

La cara de Nick Nurse era un poema cuando atendi¨® a los periodistas para justificar que ni Embiid ni Paul George, otro que tal baila, iba a estar contra los Bucks en uno de los asaltos m¨¢s atractivos de inicios de NBA que, con toda l¨®gica, ha sido un paseo para los visitantes por omisi¨®n de los locales. El entrenador, campe¨®n en 2019 con los Raptors de (precisamente) Kawhi, no sab¨ªa muy bien qu¨¦ decir a los medios de comunicaci¨®n. Quiz¨¢ ni ¨¦l mismo supiera la respuesta a por qu¨¦ despu¨¦s de uno de los movimientos m¨¢s sonados del verano y de que los protagonistas del equipo se hartaran de decir que este era el a?o de los Sixers, hab¨ªan descansado a las primeras de cambio sin nada dentro del parte de lesiones. Simplemente, no estaban. El entrenador no estaba ni de acuerdo ni en contra de ello, simplemente no sab¨ªa d¨®nde meterse. La franquicia guard¨® silencio. Y en el Wells Fargo Center se jug¨® al baloncesto porque no hab¨ªa otra cosa que hacer.

Los Sixers perdieron (109-124), como no pod¨ªa ser de otra manera. Aguantaron en el primer cuarto, pero recibieron 78 puntos entre el segundo y el tercero para hundirse en la rendici¨®n y ver como sus sue?os paseaban por cualquier acera. Llegaron a perder de 22 puntos, lanzaron por debajo del 42% en tiros de campo y con un p¨ªrrico 8 de 31 en triples que dej¨® en evidencia que de donde no hay no se puede sacar. Especialmente cuando te enfrentas a un campe¨®n herido en su orgullo, unos Bucks que quieren dar un golpe sobre la mesa y decir eso de yo estoy aqu¨ª. Un proyecto diluido tras el anillo de 2021 que clama venganza y necesita demostrar que la dupla de Damian Lillard y Giannis Antetokounmpo puede funcionar. Hoy, 55 puntos, 23 rebotes y 13 asistencias entre ambos: 30+9+6 del base y su dieta veraniega a lo Navy Seal; 25+14+7 del griego, que ha llamado al tel¨¦fono de la esperanza para pedir una nueva cita con el destino.

Khris Middleton, quejado por las lesiones, no jug¨® y su estancia en Milwaukee podr¨ªa ser breve tras jugar en la temporada post anillo, pero cayendo despu¨¦s en una espiral de lesiones que le ha impedido ser el mismo: probablemente nunca lo volver¨¢ a ser. S¨ª lo hizo Taurean Prince, que puede ser un sustituto aceptable y que se fue a 16 puntos, con 4 de 5 en triples, tras llegar de los Lakers, donde era uno de los favoritos de Darvin Ham, de nuevo asistente de los Bucks, esta vez de Doc Rivers y su en¨¦simo viaje por el cielo y el infierno, esos banquillos que le encumbraron de forma ef¨ªmera y que le han condenado despu¨¦s, aunque nunca de forma tan definitiva como para que le falten opciones. Trabajo nunca le falta al entrenador, por mucho que eso desquicie a la incomprensi¨®n mundial, nos pongamos como nos pongamos. Pat Connaughton (9 puntos), Bobby Portis (10), Gary Trent (otros 10) y Brook Lopez (10+8+6, con 6 tapones) tambi¨¦n aportaron en la victoria pl¨¢cida de un equipo que empieza como hay que empezar: ganando a un rival directo con autoridad.

?Y los Sixers? Pues sin Embiid, sin George, sin ilusi¨®n y sin gracia. No hubo mucho donde rascar, m¨¢s all¨¢ de un sinf¨ªn de rotaciones y el papel de un Tyrese Maxey que ya puede tener paciencia y resistencia, dos cualidades que va a necesitar para aguantar las embestidas emocionales de un proyecto que de eso va sobra. El escolta lanz¨® hasta 31 veces a canasta porque nadie m¨¢s lo hac¨ªa y se fue a 25 puntos en malos porcentajes de tiro, pero su esfuerzo fue lo ¨²nico con lo que se ilusion¨® la afici¨®n local, harta del devenir de un equipo que no pisa las finales de Conferencia desde 2001. Kelly Oubre se fue a 21, Caleb Martin a 12, Andre Drummond a 10, con 13 rebotes; y Kyle Lowry a 13, con 6 asistencias. Buen papel tambi¨¦n de Guerschon Yabusele, que redebut¨® en un partido oficial de la NBA con 10 tantos, 4 rechaces, 3 pases a canasta y 3 robos, buenos n¨²meros y algo de protagonismo, con m¨¢s de 25 minutos en pista. El ¨²ltimo partido precisamente del franc¨¦s fue un 8 de mayo de 2019 frente a los Bucks de Giannis, en el 4-1 de playoffs que acab¨® con la tumultuosa etapa de Kyrie Irving con los Celtics. Ahora, es presumible que vaya a tener minutos. Especialmente en un equipo en el que las estrellas decidir¨¢n estar un d¨ªa s¨ª, otro no, y al siguiente ya veremos. As¨ª est¨¢ el tema.

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