Malas se?ales para Garuba
Ni siquiera con Draymond Green sancionado los Warriors han reclamado al espa?ol, que sigue en la G-League mientras espera su momento.
El hecho de que Draymond Green haya estado cinco partidos sancionado y los Warriors no hayan considerado recurrir a Usman Garuba no es precisamente una buena se?al para el espa?ol. Su situaci¨®n, ya de por s¨ª compleja tras un verano lleno de movimientos, en el que sali¨® de los Rockets y pas¨® por Hawks y Thunder antes de llegar a Golden State, se agrava un poco m¨¢s. Visto todo en perspectiva, el contrato two-way le permite estar con la franquicia de la NBA un m¨¢ximo de 45 d¨ªas, mientras que el resto del tiempo estar¨¢ en el filial, en este caso Santa Cruz. Sin embargo, Garuba todav¨ªa no ha gastado ninguno de esos d¨ªas, que no es obligatorio que se den si el primer equipo no le reclama.
El juego interior de los Warriors est¨¢ ocupado por Green, Kevon Looney y Dario Saric, que se repartir¨¢n la mayor parte de minutos durante la regular season. El problema para Garuba es que se ha colado en esa rotaci¨®n un invitado de ¨²ltima hora con el que no se contaba en un principio: Trayce Jackson-Davis. Elegido en el puesto 57 de la segunda ronda del draft, el rookie de 23 a?os pas¨® cuatro a?os en la Universidad de Indiana antes de dar el salto a la NBA. En un inicio, se pensaba que iba a contar m¨¢s para la G League, pero los Warriors han encontrado en ¨¦l un revulsivo aunque sea para tener un papel residual.
Con 2,03 cm, Jackson-Davis ocupa la posici¨®n de ala-p¨ªvot, la misma que Garuba, y la energ¨ªa y el cuerpo atl¨¦tico que tiene tambi¨¦n el espa?ol. Competencia directa por ese cuarto espacio en la rotaci¨®n interior, ha saltado a pista en 13 de los 16 partidos que han disputado los Warriors. El 30 de octubre ante los Pelicans firm¨® 13 puntos, 9 rebotes y 4 tapones, y tiene el benepl¨¢cito de Steve Kerr y del resto del cuerpo t¨¦cnico del equipo. Y todo ello sin tener un protagonismo muy alto, ya que promedia 3 puntos y 2 rebotes en 8 minutos de juego. Un papel residual, pero mayor que el que tiene un Garuba que sigue con Santa Cruz, sumando estad¨ªsticas pero sin ser convocado por los Warriors.
No es un buen presagio. Dentro de esas escasas posibilidades que siempre ofrece la NBA, una de ellas viene por sanciones (como ha sucedido con Green) o lesiones de terceros. Convocatorias que se dan cuando alguien est¨¢ en el dique seco y esto se da con un momento paup¨¦rrimo del equipo. S¨®lo as¨ª, a veces, es posible llegar a lo m¨¢s alto para aquellos que llegan desde m¨¢s atr¨¢s. Al fin y al cabo, no todo son estrellas en la NBA y la clase media-baja ocupa una posici¨®n muy grande, mayoritaria, y no hay hueco para que todos entren. De hecho, ni siquiera hay oportunidades para todos.
Garuba (21 a?os, 2,03 cm) sigue siendo muy joven. Lleg¨® a la NBA tras formarse en la cantera del Real Madrid y lo hizo tras una serie estupenda contra el Efes, en la que tuvo muchos minutos precisamente por una lesi¨®n, la de Edy Tavares. Su problema es que no tiene excesivo juego exterior y es un perfil atl¨¦tico muy repetido en la NBA. Promedia 2,8 puntos y 3,9 rebotes en algo m¨¢s de 12 minutos, pasando sus dos primeras temporadas en los Rockets. Y, tras salir de la franquicia texana, ha probado suerte en un equipo de leyenda como los Warriors, en el que es incluso m¨¢s dif¨ªcil hacerse un hueco. La cosa est¨¢ complicada, pero Usman Garuba no se rinde y sigue buscando su oportunidad. De forma incansable.
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