Los Nets siguen sin el alta m¨¦dica

Los Nets han mejorado. Desde la salida de Steve Nash y la confirmaci¨®n de un Jacque Vaughn ya sin etiqueta de interinidad, tienen m¨¢s forma de equipo de verdad, hacen cosas en defensa y tratan de crear una identidad en ataque. Han sorteado la mega crisis, veremos si ¨²ltima o pen¨²ltima, abierta por Kyrie Irving. Y est¨¢n consiguiendo que regrese una versi¨®n muy positiva de Ben Simmons. Todo eso son buenas noticias, buen¨ªsimas si se piensa en el pozo en el que estaba el equipo hace solo unas semanas. Pero el caso es que, con todo, sigue siendo un s¨ª pero no. Un unas noches s¨ª, otras no. Veremos si es parte del proceso, un estado de tr¨¢nsito en un crecimiento que, insisto, hay que reconocer; O si esto es lo que hay. Porque, con ataques de optimismo y noches para meter la cabeza en el suelo, los Nets est¨¢n 5-5 en sus ¨²ltimos diez partidos. Y 9-11 en la temporada despu¨¦s de perder en Indiana, contra los Pacers (128-117).

Los Pacers deber¨ªan estar tankeando. Deber¨ªan estar hablando de la envergadura y las fintas en transici¨®n de Victor Wembanyama. Del futuro, siempre un elixir embriagador porque lo puedes moldear como m¨¢s te guste, algo que no permite el tozudo y muchas veces ingrato presente. Los Pacers deber¨ªan ser uno de los peores equipos de la NBA, o ese parec¨ªa su plan, el dise?o de su reboot. Pero, como si no existiera el draft, est¨¢n ganando (8-2 en diez, si tomamos la misma medida que con los Nets) y son cuartos del Este: 11-7. Y uno de los equipos m¨¢s atractivos de la NBA. Cuando Rick Carlisle hace click con sus jugadores, pasan cosas buenas. Cuando un equipo se agrupa y se concentra en jugar cada noche, las victorias caen por su propio peso y el ecosistema florece¡­ y llegan m¨¢s victorias, y el ecosistema florece m¨¢s¡­ y el ciclo ganador avanza aliment¨¢ndose de su propia energ¨ªa.

Tyrese Haliburton (22 a?os) es una calculadora japonesa que lleg¨® a Indiana en el traspaso de Domantas Sabonis. Promedia casi 20 puntos y 11 asistencias por noche, se equivoca poqu¨ªsimo y contagia sensateza profesionalidad, IQ, a todo lo que lo rodea. Otro traspaso, el de Malcolm Brogdon, reconfigur¨® la rotaci¨®n exterior con m¨¢s mando (todo) para ¨¦l, m¨¢s tiros para Buddy Hield y minutos para el excepcional rookie Bennedict Mathurin, el 6 del ¨²ltimo draft que tiene todav¨ªa 20 a?os y que deja a su paso un inconfundible aroma a estrella. Con Myles Turner en uno de los mejores momentos de su carrera y TJ McConnell liderando un sufrido grupo de secundarios trabajadores, es imposible no tomarse en serio a estos Pacers, que est¨¢n en un estadio de su reconstrucci¨®n mucho m¨¢s avanzado de lo que se pod¨ªa esperar. Con la pareja Haliburton-Mathurin han encontrado oro. Un eje, la piedra sobre la que edificar un equipo ganador.

Los cuatro principales pasaron de 20 puntos contra los Nets: 21 con 6 rebotes, 15 asistencias y 4 robos Haliburton, 26 con 5 triples Hield; 28 con 8 rebotes Turner y 20 un Mathurin que anot¨® 16 puntos en un ¨²ltimo cuarto al que lleg¨® con un 2/11 en tiros. Y eso contra Kevin Durant y Kyrie Irving. Lo dicho: el don de los elegidos. Los Pacers encontraron su ritmo en ese ¨²ltimo parcial que ganaron 40-23 y en el que un 20-4 de inicio convirti¨® un 88-94 en un 108-98. Los Nets se pusieron nerviosos, lo fiaron todo a la electricidad de Kevin Durant y cometieron muchos errores: p¨¦rdidas, demasiadas faltas (38-10 en tiros libres lanzados), chapuzas con el partido en el alambre, de una t¨¦cnica a Durant a una flagrante a Claxton por empujar a Haliburton. Para cuando KD quiso ejercer de h¨¦roe (20 de sus 36 puntos en el ¨²ltimo cuarto), los Pacers hab¨ªan abierto la suficiente brecha.

Kyrie anot¨® 20 puntos, solo 4 tras el descanso. Ben Simmons sum¨® otros 20 sin fallo (8/8) en tiros de campo, y lleva ya unos cuantos partidos en una versi¨®n absolutamente mejorada, cada vez m¨¢s alegre de cabeza y m¨¢s fresco de piernas. Seguramente, ambas cosas se est¨¢n retroalimentando. Pero a los Nets les siguen faltando automatismos, especialmente cuando las cosas se ponen calientes y el instinto de sus estrellas es ganar la guerra por su cuenta. Y, sobre todo, les faltan defensores agresivos y r¨¢pidos (pies y manos) para la l¨ªnea exterior, donde son menos eficaces Simmons y Royce O¡¯Neale. Estos forman con Durant y Claxton un muro alrededor de la zona, pero la falta de percusi¨®n sobre la bola abre v¨ªas que aprovechan los rivales para desordenar todo lo dem¨¢s y forzar una tonelada de faltas. Los Nets han mejorado, pero tampoco est¨¢n para recibir el alta m¨¦dica. No todav¨ªa. Los Pacers son uno de los equipos de la temporada, por ahora. Y con Haliburton y Mathurin, pueden serlo tambi¨¦n de las pr¨®ximas, durante muchos a?os. Buenas noticias en Indiana, el estado en el que el baloncesto es m¨¢s que un deporte.