Los Cavaliers ya no son un secreto

Ahora mismo, Cleveland Cavaliers es el mejor equipo de la NBA. No es el campe¨®n (Denver Nuggets) ni el gran favorito (Boston Celtics). Y no es desde luego de quien m¨¢s se habla: no hizo nada en el cierre de mercado y vive instalado en una tranquilidad feliz en tiempos en los que muchos lo imaginaban sacudido por las habladur¨ªas sobre el futuro de Donovan Mitchell. Pero no, en los Cavs reina esa pl¨¢cida satisfacci¨®n que acompa?a a las victorias en cascada: nueve seguidas, 17 en los ¨²ltimos 18 despu¨¦s de quitarse una espinita (con paliza: 95-119) en pista de unos Raptors que les hab¨ªan ganado en sus ¨²ltimos cuatro duelos. Y un 35-16 que reafirma un segundo puesto del Este que ya tiene a los Bucks a dos partidos y a los Knicks, a tres. Con, por cierto, el mejor balance de la NBA a domicilio: 17-8.

En este incre¨ªble trance de 18 partidos con 17 victorias (nadie m¨¢s ha superado las 14 en ese tramo) los Cavs tienen el mejor net rating de la NBA y son el segundo equipo que m¨¢s triples anota (m¨¢s de 15 por noche) y tambi¨¦n el segundo en punto en transici¨®n. No son asuntos menores: cuando se lesionaron (para largo) Darius Garland y Evan Mobley y la temporada parec¨ªa camino de convertirse en un funesto trago que acabar¨ªa con Mitchell (antes o despu¨¦s: quiz¨¢ todav¨ªa suceda) en los Knicks, los Cavs encontraron nuevas f¨®rmulas para atacar. Corrieron m¨¢s y abrieron m¨¢s la pista a partir del pick and roll Mitchell-Jarrett Allen, anotaron m¨¢s por fuera y se aferraron a aquello de que a veces menos es m¨¢s. Mitchell, en estas semanas de despegue, ha estado a nivel MVP. 28,5 puntos, 5,1 rebotes y 7,1 asistencias por partido.

La cosa iba tan bien que en Ohio se encontraron con un problema de rico: c¨®mo hacer que la cosa siga igual cuando regresen Garland y Mobley. Cuando el primero le quitara posesiones de manejo a Mitchell y el segundo, espacio en las zonas a Allen. De momento, los Cavs siguen ganando mientras se reencuentran en su formato completo. La defensa es excepcional (11-0 si el rival no llega a 100 puntos) y el ataque sigue funcionando¡­ con esas wildcard que pueden convertirlos en aspirantes de verdad al t¨ªtulo: si Garland llega a su mejor nivel y se entiende al 100% con Mitchell, si Mobley recurre m¨¢s a su tiro exterior y abre todav¨ªa m¨¢s la pista¡­

Por ahora, y en todo caso, los Cavs son un equipo fant¨¢stico. Desde luego, y su entrenador JB Bickerstaff lo tiene clar¨ªsimo, a partir de la defensa como punto de partida: ¡°Tal y como nosotros lo vemos, queremos ser ¨¦lite en defensa, queremos estrangular a nuestros rivales¡±. Por Toronto pasaron el rodillo en el segundo cuarto, que abrieron con un parcial de 4-21 y cerraron con la victoria en el bolsillo (47-67). Nadie pas¨® de los 18 puntos de Allen porque ocho anotaron en dobles figuras y no hizo falta apretar en la segunda parte contra un rival muy menor (19-34) que busca un futuro que est¨¢ en manos de Scottie Barnes (24+10+10). Pero el presente, ahora, es de estos Cavs de los que se est¨¢ hablando mucho menos de lo que merecen. Un equipo, ahora mismo, monumental.