Los Bucks sobreviven a los nuevos Bulls

Una de las transformaciones m¨¢s llamativas de las ¨²ltimas semanas se ha vivido en Chicago. Los Bulls andaban perdidos. El a?o pintaba a fracaso y la plantilla carne de renovaci¨®n. El proyecto parec¨ªa finiquitado. El viernes 1 de diciembre recibieron en casa a los Milwaukee Bucks, a los que ganaron en la pr¨®rroga. En aquel partido no estuvo Zach LaVine, baja por lesi¨®n. Desde entonces el escolta no ha vuelto a jugar y desde entonces los Bulls no hab¨ªan vuelto a perder... hasta hoy. Esta noche han ca¨ªdo en Milwaukee, pero bien pod¨ªan haberse llevado la quinta victoria consecutiva sin una de sus estrellas. Porque desde que no juega LaVine el equipo parece otro. Uno mucho mejor.

Para empezar, parece un equipo. Juega como tal. Hasta el mes de noviembre cada uno hac¨ªa la guerra por su cuenta y LaVine era el m¨¢ximo exponente de ese juego, dando prioridad a lo individual sobre lo colectivo. Ahora el bal¨®n va de mano en mano, no para de moverse por la pista y ha aumentado la participaci¨®n de todos los miembros. Parece mentira decir esto de un equipo que hace menos de dos semanas estaba moribundo, pero ver hoy a los Bulls es bastante satisfactorio. Son un equipo entretenido, alegre, que pelea los partidos y que gana muchos de ellos (el 80% de los ¨²ltimos cinco). Con la derrota se quedan a un encuentro del d¨¦cimo puesto, que ahora mismo es el ¨²nico objetivo factible para ellos. El noveno est¨¢ a 4,5 triunfos. Pero si siguen jugando as¨ª y, sobre todo, si siguen ganando nada es descartable.

Como dec¨ªamos, hoy no pudo ser porque en la pr¨®rroga los Bucks fueron mejores. El equipo de Milwaukee hizo de la necesidad virtud. Despu¨¦s del palo de las semifinales del In Season Tournament, sumado a que el nivel general de la temporada est¨¢ por debajo de lo esperado, necesitaban una victoria s¨ª o s¨ª. Y en el tiempo extra se conjuraron para no fallar. Un 8-0 de parcial (del 118-119 al 118-126) puso los cimientos del triunfo. Giannis Antetokounmpo (32 puntos, 12 rebotes y 6 asistencias) cerr¨® ese parcial. Despu¨¦s, tres fallos desde la l¨ªnea de personal dieron esperanzas a los Bulls, que llegaron a ponerse a 2 a falta de 12 segundos, pero Damian Lillard s¨ª iba a cerrar el encuentro desde el tiro libre. El base, sin embargo, sigue sin dar la versi¨®n estelar que de ¨¦l se esperaba en Milwaukee. Anoche se qued¨® en 14 puntos (y 9 asistencias) despu¨¦s de meter s¨®lo el 17,6% de los tiros y el 22;2% de los triples.

Afortunadamente para los Bucks otros jugadores s¨ª estuvieron a buen nivel. Brook Lopez, que es de lo poco que se salva de verdad en la temporada, acab¨® con 19 tantos. Y Malik Beasly y Bobby Portis, estos dos por encima de lo que acostumbran, especialmente el primero, firmaron 19 y 14 tantos, respectivamente. Quien no levanta cabeza es Khris Middleton, que empieza a convertirse en un problema serio para su equipo. Los Bucks necesitan la mejor versi¨®n del alero para optar de verdad al t¨ªtulo, pero esa versi¨®n hace mucho que no aparece y cada vez cuesta m¨¢s imaginar que vaya a recuperarla. En los Bulls destacaron un maravilloso DeMar DeRozan (41 puntos y 11 asistencias) y Coby White (33 con 6 triples). El primero fue quien forz¨® la pr¨®rroga a cuatro segundos del final. Una pr¨®rroga en la que acabaron cayendo, pero un partido que confirma que estos Bulls no son el equipo triste de antes.

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