Llega la hora de la verdad para los Lakers

As¨ª es todo m¨¢s f¨¢cil. Los Lakers, que muchas noches sufren de forma desgarrada para ser estables en ataque, vieron el aro enorme contra los Bulls, ganaron (141-132) con una comodidad que es noticia en otra temporadas de altibajos y sobresaltos, y cargan las pilas (23-23, otra vez en el 50%) para el tramo que va a marcar, y puede que a decidir, su temporada: empiezan una dur¨ªsima gira de seis partidos por el Este (su cl¨¢sico tour para despejar el downtown de L.A. en las fechas de los premios Grammy) despu¨¦s de los que volver¨¢n a casa para jugar contra Nuggets y Pelicans. Ocho partidos que les pondr¨¢n casi en el par¨®n del All Star, veremos c¨®mo de bien o de mal en la clasificaci¨®n... y tras los que habr¨¢ pasado tambi¨¦n el cierre de mercado (8 de febrero). Mirando al frente, perder con los Bulls habr¨ªa sido un perfecto desastre.

Pero la cosa solo estuvo en cuesti¨®n durante un cuarto y pico. Los Bulls ganaron el primer parcial (31-32) con mucho rebote de ataque, puntos en segunda oportunidad y un tramo excelente de Alex Caruso (acab¨® con 17 puntos y 6 asistencias), cuya presencia en el Crypto.com siempre es un acontecimiento: recibido como uno de la casa, con el amor que merece un jugador que fue especial (y que fue campe¨®n, en 2020) pero con la pena del error que se cometi¨® al permitir que se fuera, una herida que sigue sin cerrarse. En lo deportivo (faltan especialistas defensivos en el backcourt) y desde luego en lo social, en el corazoncito de la afici¨®n.

Pero despu¨¦s, a partir del ecuador del segundo cuarto, los Lakers aceleraron y ganaron bien a un rival que, para su desgracia, es de su nivel: los dos son novenos de Conferencia y los Bulls les hab¨ªan ganado en Chicago y llegaban con solo una derrota m¨¢s (ahora est¨¢n 21-25). La baja por lesi¨®n de Zach LaVine borr¨® el morbo de ver a un jugador al que tanto se ha vinculado con los Lakers en unas cuentas de traspaso que ya no salen. Y aunque DeMar Derozan produjo como siempre que pisa una pista de baloncesto (32 puntos, 10 asistencias), los Bulls fueron un peso pluma cuando los Lakers se pusieron las pilas: en el cierre del segundo cuarto, con 10-0 final incluido, convirtieron un 58-54 en el 73-57 del descanso.

En la segunda parte la ventaja lleg¨® a 24 puntos, y el ¨²ltimo cuarto se abri¨® con seis puntos de LeBron James por la v¨ªa r¨¢pida (118-95) para borrar cualquier amago de traspi¨¦s tonto. Lo dicho: es todo mucho m¨¢s f¨¢cil con un 60% en tiros totales, un 64% en triples (20/31, a dos del r¨¦cord de la franquicia) y 35 asistencias; Un excelente despliegue ofensivo con cuatro jugadores por encima de 20 puntos. LeBron acab¨® en 25 y 12 asistencias para celebrar sus 20 all star, Anthony Davis, con 22, 11 rebotes y 6 asistencias; Austin Reaves con 20 y 8 asistencias y D¡¯Angelo Russell con 29 y un 8/13 en triples. El base est¨¢ jugando al mejor nivel de su carrera, seguramente mejor que cuando fue all star con los Nets, al menos si se mide solo su resurrecci¨®n de enero, una recuperaci¨®n extraordinaria despu¨¦s de un p¨¦simo mes de diciembre en el que el cuchillo de los rumores de traspaso no dej¨® de afilarse.

Russell, que todav¨ªa tiene papeletas de salir antes del 8-F (aunque los Lakers se lo est¨¢n pensando por su gran nivel y lo poquito que ofrece el mercado), se quedo en diciembre en 1,5 triples por partido con un 32%. En enero est¨¢ en 4,2 y un 50%. Solo Paul George anota m¨¢s que un guard ciclot¨ªmico que tiene picos excelentes pero valles terribles, que ha reconocido que le afectan mucho los rumores permanentes de salida¡­ y que es un factor X obvio en los Lakers. Cuando mete tiros y dirige el juego, desbloquea un nivel extra en el ataque de su equipo. Cuando se difumina y enlaza errores¡­

Si se suman los puntos de Hachimura, los triples de Prince y la actividad permanente y contagiosa de Vanderbilt, se obtiene la mejor versi¨®n posible (ahora mismo) de los Lakers, una que se parece a la que lleg¨® a la final del Oeste la pasada primavera m¨¢s que esa mucho m¨¢s melanc¨®lica y apagada que ha pasado de puntillas (si se excluye el In Season Tournament) por la primera mitad de una temporada por ahora decepcionante. ?Est¨¢n los Lakers a tiempo? ?Van a cambiar mucho en las dos ¨²ltimas semanas de mercado? Las respuestas est¨¢n a punto de llegar en unas semanas clave, de partidos muy duros y decisiones comprometidas, que al menos arrancan despu¨¦s de un buen triunfo, con el p¨²blico feliz y la mayor anotaci¨®n de la temporada. Algo es algo.