Jokic deja a los Grizzlies destrozados

En la Mile High de Colorado, all¨ª donde la altitud hace m¨¢s dif¨ªcil respirar y todo cuesta un poco m¨¢s que en otras partes excepto para los que all¨ª viven, se enfrentaban dos de las historias de esta temporada. Y dos cosas de las que no se dejar¨ªa de hablar si estuvi¨¦ramos en otras circunstancias, ya que es dif¨ªcil que se deje de mencionar que hace poco m¨¢s de dos meses tuvo lugar el traspaso de Luka Doncic de los Mavericks a los Lakers en el que ha sido uno de los mayores acontecimientos de la historia. Eso, y la dulce pr¨®rroga que se ha vivido tras ese momento legendario, incluido el espectacular retorno del esloveno a Dallas, que permiti¨® una ristra de aplausos hacia su figura y muchas cr¨ªticas a Nico Harrison, con el p¨²blico pidiendo su despido. Pero s¨ª, a pesar de que eso cope todas las portadas (como es normal) los dos equipos involucrados en el partido de esta noche llegaban a Denver en una situaci¨®n similar: los Grizzlies despidieron a Taylor Jenkins, su entrenador, el 28 de marzo. Y hace apenas unos d¨ªas los Nuggets hicieron lo propio con Mike Malone, con s¨®lo tres jornada para la conclusi¨®n de la regular season. Dos situaciones parecidas, que dejan entrever problemas de fondo mucho m¨¢s grandes y que amenazan con acabar con uno y otro proyecto de la misma manera. Por abrasi¨®n.

Los Grizzlies visitaban una pista muy dif¨ªcil en back to back y tras perder cinco de sus ¨²ltimos ocho partidos, el ¨²ltimo ante unos Timberwolves que amenazan con adelantarles y dejarles en ese play in que nadie quiere jugar en un partido de una anotaci¨®n muy alta (125-141) que no supieron, claro, gestionar. La salida de Jenkins, desde el punto de vista meramente deportivo, no ha tenido sentido. El t¨¦cnico dijo adi¨®s junto al resto de su cuerpo t¨¦cnico tras pisar playoffs en tres temporadas consecutivas y dar una nueva perspectiva a la entidad, que sufri¨® un frenazo en el proyecto el curso pasado por culpa de las lesiones, pero tambi¨¦n por los desmanes de Ja Morant. Son muchas las voces que dicen que el base ya no vale para liderar la entidad y que tiene que salir, mientras que el resto de la plantilla, a pesar de tener calidad, parece estancada. Es, de los primeros clasificados de la Conferencia Oeste, el rival que todo el mundo quiere en primera ronda. Su din¨¢mica es negativa, est¨¢n acabando mal y Tuomas Iisalo, que ha sustituido a un Jenkins que hab¨ªa ganado el 66% de sus partidos este a?o, se ha hecho cargo de una situaci¨®n aparentemente imposible y de la que es muy dif¨ªcil salir. La sensaci¨®n es que a la temporada de los Grizzlies le queda poco. Y que el verano va a ser movidito en Memphis. Al fin y al cabo, hay muchas cosas en las que pensar.

Peor todav¨ªa es la situaci¨®n en los Nuggets. Mike Malone fue el entrenador que lider¨® al equipo al anillo de 2023, una sinfon¨ªa de oro en las Rocosas que fue el mejor momento de la historia de la entidad. Pero, desde entonces, Calvin Booth, general manager, decidi¨® dejar ir a jugadores clave en el t¨ªtulo mientras Nikola Jokic acumulaba minutos hasta la extenuaci¨®n. El directivo ha salido junto con el t¨¦cnico (la animadversi¨®n entre ambos es p¨²blica y notoria) y seguramente con la connivencia del jugador, pues este tipo de decisiones no se toman (a priori) sin consultar a la estrella. David Adelman, de apenas 43 a?os y asistente de Malone hasta su despedida, ha sido el elegido para llevar los ¨²ltimos coletazos de un proyecto que, en estos momentos, est¨¢ inmerso en muchos rumores. Desde la posible salida de Jokic en un futuro no muy lejano hasta las malas opiniones que hay (vaya sorpresa) en torno a Russell Westbrook, que ha vuelto a confirmar que su estilo est¨¢ obsoleto y que no funciona en un equipo candidato, a pesar de que sean los equipos candidatos los que incomprensiblemente siempre le reclamaban. Veremos qu¨¦ pasa con el futuro del equipo y de su estrella. Pero no pinta bien: ni mucho menos.

Los Nuggets ven¨ªan de ganar a los Kings en Sacramento (116-124) y hab¨ªan tenido un d¨ªa de descanso del que no hab¨ªan disfrutado los Grizzlies. Y la din¨¢mica se mantuvo en una nueva victoria del equipo de Colorado (117-109), que confirm¨® que estaba mejor que su rival porque ¨²ltimamente todo el mundo est¨¢ mejor que su rival. Todo se fragu¨® con un triple-doble de Nikola Jokic, otro m¨¢s, que se fue a 26 puntos, 16 rebotes y 13 asistencias en casi 41 minutos, siendo esta vez necesario exprimirle en un ¨²ltimo cuarto que los locales tuvieron que ganar por 25-14 para hacerse con la victoria. Aaron Gordon, con 33 tantos, fue el m¨¢ximo anotador y el receptor de muchos de los pases del serbio. De nada sirvieron los 21 puntos de Ja Morant, los 24 de Desmond Bane o los 8 de Santi Aldama (3 de 6 en tiros); los Nuggets fueron mejores, especialmente en la recta final, y consiguieron ganar un partido bals¨¢mico para sus aspiraciones, llegando hasta la cuarta posici¨®n de la Conferencia Oeste y obligando a los Grizzlies a retratarse a la octava y a jugar, ya de forma asegurada, un play in que nadie quiere, pero que alguien tiene. As¨ª es la NBA que en unas semanas deja a un equipo que estaba buscando consolidar el segundo puesto en el octavo (el que est¨¢n ahora), sin margen de error o que alguien pueda hacer nada para evitarlo. Es lo que hay.

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