Ime Udoka, de faltar al Estudiantes a resucitar a los Celtics
La resurrecci車n del orgullo verde tiene un nombre: Ime Udoka. El entenador pas車 por Espa?a, aprendi車 de Popovich y busca el anillo con los Celtics.
Los Celtics est芍n de vuelta. De regreso al Garden, a las Finales, a los playoffs, a la 谷lite, a la lucha por el anillo. A la batalla tit芍nica, extraordinaria, enorm谷rrima. Al lugar en el que siempre han estado, a la guerra que siempre han librado. De camino al anillo y a la libertad, al trono m芍s grande de la NBA, uno que han ocupado incansablemente desde los albores de una competici車n de la que son equipo original, hasta 17 veces, pero solo una de ellas desde 1986. Una espera demasiado larga que una entidad de tal calibre no se puede permitir. Por eso el m谷rito es tan grande y la serie definitiva es el examen final de una temporada en la que, pase lo que pase, van a acabar con sobresaliente. Por defensa hist車rica, remontada incre赤ble, recuperaci車n milagrosa y resurrecci車n de un orgullo otrora indomable, pero recientemente olvidado.
Y eso que todo parec赤a perdido. No a inicios de temporada, o a principios de enero, cuando un r谷cord de 18-21 les alejaba de los playoffs e incluso del play-in. Entonces, una racha de 9 victorias consecutivas entre el 29 de enero y el 15 de febrero cambi車 las cosas. Y, a partir de ah赤, a volar: mejor defensa de la NBA, uno de los mejores ataques, un grupo combinado, homog谷neo, capaz de superar a cualquier rival o cualquier obst芍culo y volar para ser el mejor equipo de 2022 (como a?o natural), llegar a las 50 victorias (51-31 al final) y a la segunda plaza de la Conferencia Este antes de barrer a los Nets y superar, en un ejercicio de supervivencia y resiliencia, a los Bucks y a los Heat en siete duros partidos por serie. El retorno de los Celtics.
Pero unos meses antes de todo eso las cosas ya parec赤an perdidas: se hac赤a obvio que Brad Stevens era incapaz de contener la desmadejada qu赤mica del vestuario, desarbolada por Kyrie y hundida totalmente en la burbuja de Orlando, y dec赤a adi車s al banquillo tras una temporada nefasta en la que, con play-in mediante, cayeron ante los Nets en primera ronda de forma inapelable (4-1). Pero no volv赤a a la Universidad de Indiana, sino que se hac赤a con el poder de los despachos, de los que sal赤a un Danny Ainge excesivamente conservador, endog芍mico en s赤 mismo, enquistado en el pasado. El problema era estructural. Y el puesto de entrenador lo acababa ocupando Ime Udoka, un ne車fito en el puesto principal, un hombre sin experiencia en roles de esas magnitudes. Y, en 迆ltima instancia, el hacedor de la resurrecci車n de los Celtics.
El poder de Udoka: Murcia, Popovich...
Udoka es todo un n車mada. Naci車 en Nigeria, el 9 de agosto de 1977, y con 44 a?os es uno de los entrenadores m芍s j車venes de la competici車n, aunque no tanto como su predecesor, Stevens, que aterriz車 en la mejor Liga del mundo con apenas 37. Y se traslad車 a Estados Unidos, donde desarroll車 sin mucha convicci車n una carrera discreta en la que pas車 por varios equipos y sin pasar nunca de los 10 puntos por partido. En 2012, jug車 en el Murcia, en la Liga Endesa, donde se dio a conocer para el aficionado espa?ol. Ese curso, los murcianos certificaron en la 迆ltima jornada el doloroso descenso del Estudiantes, que se desped赤a de la categor赤a reina.
Ah赤 se produjo, probablemente, el peor momento de Udoka como profesional. La desolaci車n y los lloros de los aficionados azules se tornaron en indignaci車n cuando Udoka se paseaba por la cancha con los pulgares hacia abajo y gritando ※abajo, abajo§. El fallecido Pedro Alarc車n, jefe de seguridad del club durante 15 a?os, recrimin車 y trat車 de pararle los pies. Fue imposible. El estadounidense pint車 una de las acciones m芍s feas del baloncesto: humillar al rival ca赤do cuando el bal車n ha dejado de botar. El descenso fue a迆n m芍s triste al coincidir con el adi車s de toda una leyenda como Carlos Jim谷nez, que regres車 ese mismo verano al Estudiantes tras su paso por el Unicaja.
Udoka ha dejado eso atr芍s. Fue asistente de Gregg Popovich en las Finales de 2013 y 2014, y luego pas車 como asistente por Sixers y Nets antes de hacerse con su primer trabajo de primer entrenador en los Celtics. Los aficionados estudiantiles todav赤a recuerdan con enfado lo que ocurri車 entonces. Pero Udoka, ajeno a todo eso, ha resucitado el orgullo verde con buenos conceptos defensivos, grandes rotaciones, salidas excepcionales de los tiempos muertos, buena respuesta a las derrotas y una comunicaci車n genial con sus jugadores. Ha consolidado a Tatum como estrella, a Robert Williams como defensor de 谷lite, a Smart como base y a Horford como santo y se?a de un equipo que huele a campe車n. Y todo, con un futuro por delante que no parece tener techo. ?l es Ime Udoka, el hacedor del milagro.