Golpe a la reconstrucción de Oklahoma

Con la elección en segundo lugar del pasado Draft de Chet Holmgren, Oklahoma daba pasos de gigante en su proceso de reconstrucción. Tras la confirmación por parte de Adrian Wojnarowski y Shams Charania de la lesión de gravedad en el pie del exGonzaga y su ausencia la temporada próxima, los Thunder vuelven al lugar de inicio.

Ambos periodistas publicaron el miércoles la posibilidad de que el jugador de 20 a?os y 2,13 metros tuviera una lesión importante. El jueves confirmaron que se perderá la campa?a 2022/2023. El jugador más mediático del panorama universitario de la pasada temporada no disputará ni un solo partido a las órdenes de Mark Daigneault, entrenador del equipo, el próximo a?o.

Esto choca con los planes de Sam Presti, mánager general de la franquicia, que veía cómo la idea de su proyecto comenzaba a coger forma. El objetivo de seguir creciendo y optar a pelear el play-in en el Oeste era cada vez más tangible. Shai Gilgeous-Alexander y Josh Giddey volverán a ser los líderes de un equipo prácticamente similar al de la pasada campa?a.

Tras a?os de proceso de reconstrucción tras las salidas de Kevin Durant, Russell Westbrook y Paul George, en Oklahoma tenían uno de los núcleos jóvenes más atractivos de la liga. La pareja que formaron Giddey y Holmgren en la tradicional Summer League veraniega fue superlativa. El base australiano fue capaz de sacar lo mejor del ‘unicornio’ en la pista.

En su carta de presentación, el número dos del Draft anotó 23 puntos (13 en el primer cuarto), capturó siete rebotes y taponó en seis ocasiones ante Utah Jazz. Números a la altura de su singularidad. El jugado perfecto para unos Thunder que necesitaban con urgencia una referencia interior. A su vez, su versatilidad le permite alejarse de la canasta y anotar desde lejos, ya sea tras bote o mediante pick & pop (bloqueo y salir).

A pesar de que no fue el único jugador interesante que consiguieron en la gala del Draft (ya que eligieron a una incógnita como es Ousmane Dieng con el pick 11), Holmgren supuso la apuesta que Orlando no quiso hacer. Un jugador único, diferente, con unas condiciones hasta ahora nunca vistas. Con una envergadura de 2,28 metros, Chet es capaz de botar el balón y ser una amenaza exterior como si fuera un alero. Su altura le permite ser intimidante en la zona.

Al francés Dieng y a Holmgren se les unen Jalen y Jaylin Williams, dos jugadores que pueden dar un salto de calidad a los Thunder. Mientras que el primero, ex de la universidad de Santa Clara, subió en las listas previas al Draft gracias a un gran NBA Combine, Jaylin puede ganar importancia en la rotación interior con su gran capacidad reboteadora y en el poste.

Su baja obliga a cambiar de planes en Oklahoma. El proyecto se orienta a la temporada siguiente (2023/24) y no a la que comienza en octubre. Sam Presti estará pendiente de los jugadores que entren en el circuito universitario o ya sean profesionales antes de entrar al Draft. Esto último, en gran medida, tiene que ver con Víctor Wenbanyama (Metropolitans 92) y Scoot Henderson (G-League Ignite).

La idea de juntar a Holmgren y Wenbanyama en el mismo equipo no parece tan descabellada. Dos de los proyectos más únicos de las últimas décadas. Jugadores que, con su altura (el francés tiene 2,19m de altura y una envergadura de 2,38m), son capaces de influir en todas las áreas del juego, que representan la evolución del baloncesto.

En la lista de nombres que deberán apuntar en las oficinas de los Thunder, deberían estar Nick Smith (Arkansas), Dariq Whitehead (Duke), Amen y Ausar Thompson (Overtime Elite) y Cam Whitmore (Villanova), jugadores que ocuparán los focos en el Draft de 2023. Variables por si no tienen suerte en la lotería tradicional previa al evento.

En una temporada donde la estrella del equipo, Shai Gilgeous-Alexander, comienza su extensión de contrato (ganará 30 millones de dólares esta campa?a), un Josh Giddey que se adaptó a la franquicia desde el primer día y con Luguentz Dort, Theo Maledon, Tre Mann y Ousmane Dieng como pilares del nuevo proyecto, en Oklahoma sienten que la lesión de Holmgren ha sido un golpe duro a la reconstrucción de los Thunder.