Se acaban los adjetivos para Doncic

Luka Doncic es uno de esos jugadores verdaderamente singulares. Al igual que Federico Fellini, Pedo Almod¨®var o David Lynch, perfectamente reconocibles desde el punto de vista cinematogr¨¢fico viendo un simple fotograma de una de sus muchas pel¨ªculas, el esloveno lo es cuando hablamos de baloncesto. Si lo dej¨¢ramos todo en blanco y negro y dibuj¨¢ramos a los jugadores con el mismo f¨ªsico y las caras borrosas, distinguir¨ªamos r¨¢pidamente a Doncic: por su forma de botar, de moverse, su mec¨¢nica de lanzamiento o su capacidad para penetrar. Por su forma de ser y de estar. Eso le convierte en alguien ¨²nico y especial, una estrella que ha provocado tantas miradas en torno a su figura que es perfectamente definible en un mundo lleno de deportistas en el que hay una estirpe, siempre peque?a, de grandes titantes. Esos llamados a conquistar los grandes hitos de la historia, a coleccionar una cantidad ingente de r¨¦cords y llegar a cotas que al resto les parece impensable. Y eso es, en ¨²ltima instancia, lo que distingue de los dem¨¢s a Doncic, un jugador absolutamente ¨²nico.

Ante los Pistons, Doncic anot¨® 53 puntos para darle la victoria a su equipo. El esloveno, que fue duda hasta el ¨²ltimo momento por problemas en el tobillo que arrastraba de la visita a Phoenix (victoria) y que le impidi¨® jugar en Utah (derrota), fue finalmente incluido en el quinteto inicial y dio una aut¨¦ntica exhibici¨®n: adem¨¢s de la anotaci¨®n, 8 rebotes, 5 asistencias, 2 robos (con 4 p¨¦rdidas) y una excelente serie de lanzamiento: 17 de 24 en tiros de campo, con 5 de 11 en triples y 14 de 18 en tiros libres. Eso s¨ª, sin Christian Wood, el sobreesfuerzo de Doncic fue demasiado grande: llevaba 45 puntos al final del tercer cuarto y los Mavs s¨®lo ganaban de 1 (84-83), al final acabaron ganando de 6 (111-105). Una diferencia demasiado peque?a para jugar en casa y ante el peor equipo de la NBA, uno que adem¨¢s est¨¢ plagado de bajas: Cade Cunningham, Jared Rhoden, Cory Joseph, Buddy Boeheim, Marvin Bagley III...

La actuaci¨®n de Doncic deja su marca personal de esta temporada en ya cuatro partidos de 50 o m¨¢s puntos este curso. Esto le hace unirse a una curiosa pero llamativa lista: es el cuarto jugador de la historia que consigue cifras as¨ª antes de febrero junto a Michael Jordan, Kobe Bryant y James Harden, consigui¨¦ndolo este ¨²ltimo en tres ocasiones. Y en esta ocasi¨®n tambi¨¦n resolvi¨® en el clutch time: Bojan Bogdanovic anotaba dos tiros libres para apretar el encuentro con algo m¨¢s de 2 minutos para el final (105-102). Y ah¨ª emerg¨ªa el esloveno: canasta, respuesta en forma de triple de Bogdanovic, pero dos puntos m¨¢s para Doncic, que ah¨ª puso la sentencia (109-105). En la jugada siguiente, Bogdanovic no pudo anotar su segundo triple consecutivo y fue el propio Doncic el que atrap¨® el rebote. Dorian Finney-Smith sentenciaba desde la l¨ªnea de personal. Y el partido finalizaba con un nuevo fallo en el triple de Alec Burks, que atrapaba tambi¨¦n Doncic para sumar su octavo y ¨²ltimo rebote. Y sentenciar el partido, claro.

Las buenas noticias para los Mavs (27-25 ahora, sextos de la Conferencia Oeste) son verdaderamente relativas. La dependencia que tienen de Doncic es extrema y demasiado grande y ya han filtrado que Finney-Smith, uno de los favoritos del esloveno, est¨¢ en el mercado, lo que denota una gran inseguridad. Les cuesta un esfuerzo enorme hacerse con una victoria, necesitan desesperadamente que su estrella se vaya a actuaciones antol¨®gicas y notan cualquier tipo de baja, especialmente la de un Wood que se ha convertido en el mayor aliado en pista del base, por mucho que eso le moleste a Jason Kidd. Que Bogdanovic (29 puntos, con 10 de 15 en tiros), pendiente del mercado, les haga tanto da?o o un equipo de tan pocos argumentos (18 punos de Saddiq Bey, 14 de Jadden Ivey) les lleve hasta el final del partido. Y que el segundo del equipo que m¨¢s anote despu¨¦s de los 53 de Doncic sea Spencer Dinwiddie con 12... En fin. Victoria, s¨ª. Pero...