Blanco para Facu, negro para Willy y gris marengo para Luka Doncic

En la operativa de los Mavericks para estos primeros compases de la NBA quiz¨¢ no se contaba en un primer momento con una victoria en casa de los Pelicans. Cierto es que hablamos del finalista del Oeste del a?o pasado y todos estos encuentros que se pierden cuentan como el ¨²ltimo suspiro a final de temporada. Cierto es tambi¨¦n que los locales dieron un respingo en el final de la pasada campa?a que hizo temblar a los Suns que, posteriormente, caer¨ªan con estr¨¦pito contra el tercer invitado en esta ecuaci¨®n. Pero la actualidad pasa como un hurac¨¢n por las narices de los protagonistas y a los texanos se les hab¨ªa aclarado el panorama con las ¨²ltimas noticias. Brandon Ingram y Zion Williamson, los dos jugadores con mayor peso deportivo en los Pelicans, no estaban disponibles para este partido por molestias. Era mucho decir. Herb Jones tampoco jug¨®, aunque se iguala la fuerza al apuntar que Tim Hardaway tampoco lo hizo en el bando contrario. Demasiada facilidad para Dallas dado todo el contexto y si lo ponemos en comparaci¨®n con lo que pod¨ªa ser, algo que no aprovecharon los pupilos de Jason Kidd para salir de Nueva Orleans con una victoria.

113-111 ganaron los Pels a los Mavs en un encuentro resuelto en un apasionante final. Les cost¨® demasiado a los visitantes entrar en el partido y a remolque se desgastaron tanto como para, en el ¨²ltimo suspiro, claudicar. Un triple muy forzado de Luka Doncic en una jugada dise?ada para 2,9 segundos apenas roz¨® el aro y, con el fallo, permiti¨® a los de Willie Green mantenerse arriba. Doncic, con numerazos otra vez (37 puntos, 11 rebotes y 7 asistencias), estuvo acompa?ado por Dinwiddie (24) o Wood (23). Mucho m¨¢s repartida la anotaci¨®n en los Pelicans, con ocho jugadores por encima de los dobles d¨ªgitos y un Murphy (22) que termin¨® con un inmaculado 10/10 -ocho en juego y dos libres- en tiros para liderar su casillero.

La baja de Williamson en la pintura no abri¨® el hueco suficiente para que Willy Hernang¨®mez tuviera minutos en este encuentro. Hayes era el relevo de Valanciunas y Nance tuvo presencia como ala-p¨ªvot. El espa?ol s¨®lo ha disputado uno de los cuatro partidos de su equipo. El que s¨ª vio pista fue Facu Campazzo, que no s¨®lo tuvo el benepl¨¢cito para ser convocado despu¨¦s de recibir el visado de trabajo sino que volvi¨® a sentirse jugador de la NBA con los trece minutos que tuvo ante los Pelicans. El argentino, en su caso, err¨® tres de sus lanzamientos y consigui¨® un triple en ese rato como suplente de Doncic. En este encuentro le sac¨® much¨ªsimo m¨¢s partido a la rotaci¨®n Green que Kidd siendo las de los dos equipos cortas. Con la delicadeza que hay que hacerlo cuando s¨®lo se lleva una semana de competici¨®n, habla bien de lo que se puede hacer en Nueva Orleans cuando los ausentes Ingram y Williamson est¨¦n completamente sanos y el equipo por fin se acople a lo que una estrella como Zion espera.

Precisamente en el espejo de otro latino, Jose Alvarado, puede mirarse Facu Campazzo ahora que ha debutado con su nuevo equipo. Ese acople es el que querr¨¢. Alvarado se ha creado incluso una marca, la de los robos por detr¨¢s haci¨¦ndose el despistado, y equilibra con anotaci¨®n en el otro lado. Es protagonista. En este partido, titular. Y fue el que comenz¨® la cabalgada de los Pelicans. En la primera parte del primer cuarto estaba rozando ya la decena, hab¨ªa metido nueve, y dio el impulso que se necesitaba para firmar una manga de apertura de v¨¦rtigo: hasta 14 de ventaja tuvieron, a los 40 llegaron. Deb¨ªan aplicarse en defensa los Mavs, el aspecto en el que m¨¢s ha insistido Kidd desde su llegada, y con ese trabajo arduo fueron equilibrando poco a poco el marcador hasta llegar a controlarlo.

Dicen los expertos que el gris marengo es un color elegante, s¨ª, pero es un gris. Si a Facu le damos el blanco y Willy se tiene que quedar con el negro, Doncic es el gris marengo. De etiqueta, por supuesto, viendo a lo que nos atenemos: siendo el primer mav que lo logra, acompa?a a Stephen Curry y Donovan Mitchell como ¨²nicos que en esta temporada han anotado 30 puntos o m¨¢s en sus tres primeros encuentros; hay que irse a la 1961/62 para encontrar cuatro apellidos, West, Chamberlain, Baylor, Robertson, que les precedan en ese dato. Dicho lo cual, no deja de ser un color neutro a juzgar por su balanza: datos de ensue?o, pero derrota al fin y al cabo.

Tuvimos una versi¨®n habitual de Luka Doncic en el Smoothie King Center para no faltar a las costumbres. Se le volvieron a ver las costuras en los lanzamientos de tres puntos, que fueron adem¨¢s la cruz del final del mismo. Dos aciertos en trece intentos. Fue precisamente el acierto en los tiros lo que posibilit¨® que su rival no tuviera una fuga como la que ten¨ªan ellos. Incluso con tiempo para ver al novato Dyson Daniels encaramarse tambi¨¦n a los 11 puntos con los que termin¨®. Para el esloveno fue tirar del carro para quedarse con el amargor del final. Anot¨® dos canastas seguidas en el ¨²ltimo minuto para poner a los suyos a uno de distancia del contrincante y Graham se dej¨® un tiro libre sin encestar para dejarlo todo a pedir de boca de Dallas. Prefirieron jugar a ganar los azules, Doncic forz¨® demasiado y fall¨®.